Diseños de camisetas de U, Alianza y Cristal: El año del vanguardismo
Alianza, Cristal y Universitario han presentado modelos de camisetas para la temporada 2017 con innovaciones más marcadas que lo usual. ¿Qué antecedentes tiene cada caso y qué patrones comunes se encuentran?
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Roberto Castro | @rcastrolizarbe Director General |
Año a año, cobra mayor importancia en el medio la expectativa por el nuevo diseño de la camiseta de cada uno de los clubes peruanos, en especial de los tres grandes del medio. No es casual: que marcas líderes a nivel mundial como Nike, Adidas o Umbro se repartan a los equipos que mayor volumen de hinchada poseen en el país ha generado que entre ellos se cree un nicho de mercado especialmente dispuesto tanto a pagar por una camiseta cara como a comparar y cuestionar de manera constante los atributos del diseño, lo que al final redunda en más y más exposición del producto.
Sin duda, no causa sorpresa que en esta carrera -aun cuando se trate de segmentos delimitados claramente, pues los hinchas de un equipo no comprarán la camiseta del cuadro rival- las marcas hagan especial énfasis en zanjar cambios en los diseños de un año a otro: es el único camino para que el hincha diferencie claramente la vestimenta de una temporada respecto de la anterior y, así, tenga disposición a pagar por el nuevo diseño.
El tema peculiar es que para 2017, estos cambios han tocado, en algunos casos, detalles nunca antes variados en la camiseta de los clubes en cuestión, por lo cual las reacciones han sido parcialmente críticas. Por supuesto, ese es un murmullo que se amplifica o diluye según los resultados deportivos de la temporada, que pueden acabar haciendo del diseño más horrible uno para recordar toda la vida, o viceversa. Como fuere, presentadas ya las nuevas camisetas blanquiazules, celestes y cremas, sí es pertinente repasar los antecedentes históricos de cada uno de los tres casos.
Alianza: manga por magia blanca
El cambio más polémico posiblemente sea el de Alianza Lima, cuadro al que Nike ha decidido vestir para este año con un diseño de rayitas verticales azules y blancas pero con una particularidad inédita: por primera vez en la historia, los blanquiazules utilizarán camisetas de mangas completamente blancas, un diseño que -tal como ocurrió en 2016 cuando Cristal presentó una camiseta alterna blanca con franja diagonal celeste- ha despertado comparaciones con el uniforme alguna vez empleado por Alianza Atlético.
Lo cierto es que en la historia blanquiazul hay ya varios antecedentes de rayitas verticales azules y blancas. El último, como es fácil recordar, se dio entre las temporadas 2013 y 2014; esta última cuenta con el diseño más similar, pues entonces podían contarse hasta cinco rayitas azules por cuatro blancas en el pecho íntimo; en el diseño 2017, Nike propone cinco rayitas azules y cinco blancas, con la salvedad de que es una raya blanca la que queda al medio del pecho.
En este sentido, vale precisar lo siguiente. Primero, que como ya explicado DeChalaca la primera camiseta aliancista de rayitas verticales azules y blancas se empleó en 1926, año en el que el club cambió su nombre de Sport Alianza a Alianza Lima. Segundo, que la camiseta aliancista con raya blanca al medio, como también señaló ya esta página web cuando los íntimos presentaron su camiseta de 2015, solo tenía antecedente en 1940, el año del retorno del club a la División de Honor luego de su descenso a la Primera División de Lima y Callao (segunda categoría). Y por último, recalcar que jamás Alianza empleó una camiseta de mangas completamente blancas, aun cuando en temporadas como 1923 -según la foto publicada líneas arriba- o la propia 1940 el diseño sí haya sido predominantemente blanco en las mangas, pero jamás al cien por ciento.
Lo que sí resulta más interesante en términos históricos para el cuadro íntimo es la camiseta alterna que ha presentado este 2017. DeChalaca ha podido constatar que el diseño es muy similar al empleado en la segunda parte de la década de los cincuenta como vestimenta cuando Alianza debía rivalizar ante Ciclista Lima, equipo que por ser más antiguo obligaba a los íntimos a cambiar su uniforme. La foto superior, correspondiente a la temporada 1960 -con el afamado golero paraguayo Adolfo Riquelme en filas íntimas y el recientemente fallecido Juan Nakajata en el ataque- es ilustrativa al respecto.
Cristal: invasión al celeste
Para 2017, Adidas ha concebido una camiseta de Sporting Cristal de diseño bastante vanguardista, con rayas azul claras cuyo ancho va decreciendo desde abajo hacia arriba hasta diluirse a la altura del pecho cervecero. Un modelo llamativo pero que tampoco encuentra demasiados antecedentes en la historia bajopontina.
De hecho, rayas en la camiseta de Cristal no se recuerdan desde 2007, año de ingrata recordación en La Florida pues los cerveceros pelearon el descenso. Aquel equipo dirigido primero por Jorge Sampaoli y luego por Juan Carlos Oblitas empleó una camiseta que tenía una raya amarilla y otra azul a la altura del pecho. Antes de eso, más grato en Cristal resulta retroceder exactamente diez años más y recordar otra camiseta con líneas oblicuas azules, pero que pretendían describir las siglas "SC": aquella usada por el equipo subcampeón de la Copa Libertadores 1997.
Prefiera evocarse más un caso que el otro, lo cierto es que esta de 2017 es la camiseta de Cristal más invasiva del color celeste que se haya visto desde el verano de 1990. Por entonces, los rimenses llegaron a emplear en dos ocasiones, ambas contra Unión Huaral, una camiseta de base celeste pero con casi la mitad de color blanco entero: la primera en la final nacional perdida ante los naranjeros en Matute y la segunda en el accidentado -por insólito apagón- estreno en Copa Libertadores. Cristal nunca más empleó esa camiseta, y solo la de 2008, con la parte superior blanca -aunque de modo mucho menos pronunciado- puede habérsele asemejado.
Universitario: esos hombros rojos
Finalmente, es la camiseta de Universitario la que ha tenido una variación menos pronunciada pero igualmente comentada para este 2017. Umbro ha preparado para los cremas un diseño con tiras rojas a ambos lados del cuerpo, que se ciñen a un sólido color rojo en dos tonalidades sobre los hombros y bordeando el cuello.
Este diseño para los cremas tiene un antecedente claramente recordable: el de la temporada 2003, cuando el cuadro merengue fuera dirigido por el uruguayo Ricardo 'Tato' Ortiz. No se trató precisamente de un año con gratos resultados -se acentuó fuertemente la crisis económica que luego descalabraría al club-, pero sí se evoca de ella un partido memorable: cuando Universitario le igualó 1-1 a Racing Club en Avellaneda en el día del centenario blanquiceleste, con gol de Wilder Galliquio y el afamado pase del desprecio del 'Puma' José Carranza.
Aquella camiseta de 2003 no tenía los bordes rojos en el cuerpo, pero sí en las mangas. En el cuello era mucho más parecida, y el rojo sólido se veía en la espalda. Como la actual, también fue diseñada por Umbro, por lo que de todos los casos descritos resulta el único antecedente en el que la misma marca ha decidido desempolvar criterios de antaño.
Balance en el vestuario
Más allá de gustos y colores, lo que queda claro es que existe un importante mérito de Nike, Adidas y Umbro en haber conseguido que un mercado con alta penetración de la piratería haya cobrado la costumbre de pagar por una camiseta oficial. Es una meritoria transformación de patrones de consumo que no existía con tanto énfasis sino hasta esta década y en la que las redes sociales, hasta con hinchas incitando a sus pares a pagar por el original para así ayudar a las arcas de clubes -en dos de tres casos- en problemas económicos.
Lo que también queda claro es que las marcas requieren una mejor asesoría externa para entender los patrones de los cambios que proponen y en qué casos ellos se ajustan a la historia o riñen con ella. Como en el caso de las promociones de partidos de presentación, puede haber alrededor mucho especialista en marketing que entiende poco de fútbol y se conforma con el éxito de una campaña puntual que, con un trabajo basado en conocimiento más profundo, podría traducirse en réditos más estables. Nuevamente: hay bastante marketero que sabe de fútbol o, mejor aún, futboleros marketeros que podrían ayudar al respecto.
Composición fotográfica: Aldo Ramírez / DeChalaca.com
Foto: Facebook, prensa ADFP, libro Arriba Alianza
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