Bolognesi sufrió el síndrome de la medianía. Perdió 0-1 ante un
Nacional apenas cumplidor. Sin gente en las tribunas ni corazón en la
cancha, fue poco lo que pudo hacer. Sus figuras se ocultaron,
desperdició un penal. El aburridísimo partido dejó en claro que los
tacneños son los más débiles de la triada peruana en Copa Libertadores
y que su eliminación es casi inminente.
