Defensor Arica campeón 1964: El celeste fantasma

1964 fue el primer gran año del Defensor Arica en el fútbol peruano. Hasta entonces los de Breña, luego de ganar la Liga Amateur de Lima, se habían pasado dieciséis temporadas consecutivas en la Segunda División, siempre sin éxito, viendo cómo otros alcanzaban la meta del ascenso.
En aquella campaña su presidente, Jaime Hurtado, logró armar un plantel con grandes nombres: como técnico tuvo a Emilio Vargas, ex crack de Alianza Lima en los años cuarenta cuando actuaba como entreala derecho; la cuota de experiencia la ponía René Gutiérrez, otrora figura de Universitario que encaraba los últimos años de su carrera; la juventud estaba en el arco, en el que Otorino Sartor comenzaba a hacerse grande a pesar de sus 19 años; mientras que los goles estaban asegurados con la presencia de Hugo Ocsas en el ataque.
Caídos del cielo
El camino de los celestes comenzó de forma irregular pues en su primer encuentro Porvenir Miraflores, que acabó siendo su mayor oponente en la tabla, le ganó por 1-3. Contra Atlético Lusitania fue que se recuperó goleando por 4-1 en la siguiente jornada, triunfo al que le siguieron otros dos, sobre Unidad Vecinal y Unión América. Pese a que luego tuvo otras dos derrotas, ante Atlético Chalaco y Mariscal Sucre, el final de la primera rueda marcó el inicio de una racha triunfal al vencer 1-0 a Juventud Gloria de Jesús María en la novena fecha, racha que no se detuvo hasta acabar el torneo.
En la serie de revanchas no hubo rival que se le opusiera el Arica, pues uno tras otro fueron cayendo. Primero fue el Miraflores, al que le devolvió el 3-1 de la ida. Le siguieron el Vecinal, América y el Chalaco: todos cayeron con rotundos 3-0. Íntimos de la Legua (3-1), ADO (5-1) y Mariscal Sucre (4-1) tampoco tuvieron opción contra los celestes. Asi llegó la última jornada, en la que al Gloria le tocó bailar con la más fea.
Para la fecha 18 ya todo estaba prácticamente definido pues el Arica le había sacado dos puntos de diferencia al segundo, Porvenir Miraflores, que debía chocar ante Unión América. Por entonces, para programar cada jornada se tomaba en cuenta el puntaje de los rivales en la tabla, por lo que, ante la igualdad en la suma de unidades entre los equipos protagonistas de ambos partidos, se debió recurrir a un sorteo para definir quién jugaba el sábado 14 y el domingo 15 de noviembre, sorteo que ganaron los de Breña para actuar el primer día.
Paseo en la gloria
Aquella tarde en el estadio San Martín de Porres se vio una concurrida asistencia de simpatizantes celestes motivados tanto por el triunfal momento de su equipo como por la generosa cantidad de entradas regaladas por los dirigentes del club. Sin embargo, no todo empezó como se esperaba, pues como preliminar se había pactado el encuentro entre Íntimos de la Legua y Unidad Vecinal, pero éste último no se presentó a jugar.
Con el walk over consumado y con el árbitro Héctor Hernández presto a dar inicio a todo, Arica se presentó con estos once jugadores: Sartor en el arco; Pablo Villaverde, Rafael Rosas y Carlos García; ‘La Lora’ Gutiérrez, y Anselmo Ruiz; Víctor Montoya, Genaro Barrera, ‘El Cholo’ Ocsas, Juan Nakajata y Enrique Sánchez.
La gran diferencia entre uno y otro equipo se notó desde la primera etapa en la que el Gloria no pudo evitar recibir cinco goles. Todo comenzó con uno de Montoya a los 5’, al que siguieron las anotaciones de Nakajata, Ocsas, Sánchez y nuevamente el mismo Montoya, quien para la parte final marcó dos más, mientras que Barrera con un tanto completó el 8-0 final. La goleada se facilitó en cierta forma por la actitud de los jugadores del equipo de Jesús María, quienes se dedicaron más a las protestas contra el árbitro que a jugar, lo que les costó culminar con nueve.
Con el campeonato asegurado, las tribunas se trasladaron hacia la cancha en busca de algún recuerdo. Mientras las camisetas y los botines iban de un lado para el otro como trofeos, algunos jugadores fueron levantados en hombros, mezclándose la alegría del momento con la pica pica, los globos y las pelotas celestes que también se ofrecieron gratis a los hinchas durante el partido.
El reconocimiento hacia los que lograron el título iban desde el capitán Anselmo Ruiz hasta los goleadores del equipo y de la temporada, Ocsas y Montoya, que sumaron 13 goles y que junto a Napoleón Rodríguez del Miraflores fueron los máximos artilleros. Aquel día de hace 50 años fue solo el primer paso del Arica hacia su corta pero intensa historia en Primera División y que lo llevó hasta la Copa Libertadores pocos años después.
Composición fotográfica: Roberto Gando / DeChalaca.com
Recortes: diario La Crónica
