La primera vez que Alianza jugó el 8 de diciembre luego de la tragedia de Ventanilla:Círculo cerrado
Hace veinte años Alianza Lima volvió a jugar por primera vez un 8 de diciembre. En el día que se evoca la tragedia de Ventanilla, el equipo blanquiazul goleó 4-1 a Deportivo Pesquero y clasificó a la Libertadores. Además, esa temporada completó la peor racha de su historia sin títulos.
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Roberto Gando | @Roberto_Gando Editor |
Dos episodios de ingrato recuerdo para Alianza Lima se juntaron en el estadio Nacional el 8 de diciembre de 1996. Aquel día, Deportivo Pesquero fue el rival de un equipo que buscó reivindicar el recuerdo de los ‘Potrillos’ que fallecieron frente al mar de Ventanilla en 1987; pero además, porque también tenían como misión acabar de la mejor manera posible una temporada en la que se les volvió a escapar el título nacional.
Las postales
Luego que Sporting Cristal consiguió el tricampeonato, aún faltaba conocer qué otro equipo peruano iba a clasificar a la Copa Libertadores del siguiente año. Ese cupo se definió mediante una Liguilla de tres jornadas de la que formaron parte Alianza Lima, Cienciano, Pesquero y Universitario.
Al llegar a la última fecha, la ‘U’ se enfrentó a Cienciano en el estadio Municipal de Chorrillos, donde ganaron 5-0 con triplete de Carlos ‘Mágico’ Gonzales y doblete de Adrián Czornomaz. La ventaja, sin embargo, aún la tenía Alianza, pues sumaba un punto de bonificación luego de ocupar el segundo lugar en el Descentralizado.
Dirigido por el brasileño Gilberto Alves, el conjunto blanquiazul pasó muchos apuros frente a un cuadro que contaba en su once titular con jugadores como José Chacón, Francesco Manassero y un bisoño Claudio Pizarro, en la que fue su primera temporada como profesional con 18 años. Aun así, el marcador lo abrió el también brasileño Marcelo Bujica a los 27 minutos con un preciso tiro libre sobre el arco de Jesús Purizaga.
Con la ventaja, Alianza reacomodó sus filas en la segunda etapa y aumentó la cuenta con tantos de Andrés ‘Balán’ Gonzales y de Frank Ruiz -tras pase de Waldir Sáenz, el goleador del campeonato junto al ‘Pirata’ Czornomaz-. Pese al descuento anotado por Isidro Fuentes cuando se jugaban 74 minutos, el camanejo Marco Valencia apareció con otro remate de tiro libre para decretar el 4-1 a falta de ocho minutos.
Solo 5,229 aficionados se dieron cita en las tribunas para celebrar sin mayor pompa la clasificación aliancista. Y es que la situación no daba para festejar mucho, pues en La Victoria solo ansiaban encontrar la fórmula para volver a campeonar. Habían pasado dieciocho temporadas, demasiadas para un equipo que solo un mes después -ya con el colombiano Jorge Luis Pinto como DT- enderezó al fin el camino hasta encontrar el éxito y la reconciliación deportiva con los que se fueron.
Composición fotográfica: Roberto Gando / DeChalaca.com
Recortes: diarios El Bocón y El Comercio
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