Carlos Leeb y Diego Umaña pasan por la misma incertidumbre: ambos tienen que suplir ausencias importantes en su equipo y, por ahora, no encuentran soluciones en sus bancos de suplentes.
Jair Villanueva | @Jair_Villanueva
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El ideal de un equipo es que no se resienta por la salida de un solo jugador, es decir, no ser dependiente. Ayacucho, desde el 2015, encomendó su ataque a una figura, Jesús Chávez. Si bien el 'Chucho' no fue un solista, debido a la compañía constante de Henry Colán, sí era irreemplazable en su posición.

Por el lado de Huancayo, dos jugadores por su funcionalidad al colectivo y contundencia para concluir la apuesta de Umaña no parecen tener un reflejo de lo que rinden para el 'Rojo Matador'. Ellos son Víctor Peña y Antonio Meza Cuadra. El primero, un jugador que desde la banda ordena y orienta el ataque: una posición curiosa para organizar juego. Por otro lado, el 'Torito', con la cuota de gol que aún sufre Huancayo debido a que no se recupera por completo.

Ambas bajas, una vez más, no fueron suplidas y no parecen estar cerca de ser subsanadas por ambos técnicos. En ese sentido, quedan dos caminos: primero, intentar con la misma propuesta y encontrar referencias parecidas en algún jugador; segundo, cambiar la apuesta.

Leeb en el banco de suplentes no tuvo a un enlace como Chávez. De hecho, desde su salida ha puesto el 4-trapecio-2 como figura principal. Umaña, entretanto, dispuso un 4-2-3-1, con Marcos Lliuya haciéndole un lugar a Blas López como enlace. Pese a los intentos de ambos técnicos, el resultado no es el mismo. Así, pues, Leeb decidió cambiar, mientras que Umaña se mantiene en su apuesta. Por ahora, ninguno tiene éxito.

Foto: Prensa Ayacucho


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