Composición fotográfica: Aldo Ramírez / DeChalaca.comFutbolísticamente, Perú dejó mucho que desear en los amistosos ante Chile y Guatemala. A esto se suma el mal rendimiento de Carrillo y Vargas, y la evidente falta de liderazgo que se vislumbra sin Claudio Pizarro. A pesar de eso, la selección también dejó algunas pocas cosas para destacar.

SISTEMA INTEGRADO. Al igual que en la gira por Medio Oriente, Pablo Bengoechea decidió apostar por un 4-3-2-1 con sistema en los partidos ante Chile y Guatemala, con distinto resultado en ambos. Es claro que el entrenador de la selección ha decidido apostar por un sistema que otorgue equilibrio en la mitad de la cancha y que permita que los laterales se asocien con los extremos para generar peligro por las bandas. El problema fue que de esto se mostró muy poco en los dos amistosos, aunque más por demérito de los extremos que de los laterales. Igual, al margen de los resultados, creemos que este es el sistema adecuado. Bengoechea hace bien al ponerlo en práctica.

NO WAY. Dos jugadores no cumplieron con las expectativas a pesar de haber tenido participación ante Chile y Guatemala. Nos referimos a Juan Vargas y André Carrillo, quienes no han respondido en la medida de lo que se esperaba de ambos. ¿Vale la pena seguir contando con ambos para los próximos encuentros? En el caso de Carrillo, su nivel ha sido irregular desde que se puso la camiseta de la selección. Tiene llegada al área pero cuando está frente al arco las luces se le apagan y desperdicia ocasiones claras como la que se pudo ver en el encuentro disputado en Valparaíso. A pesar de su juventud y de ser titular en un equipo europeo de una liga medianamente importante como la portuguesa, ha demostrado no estar preparado mentalmente para asumir retos cada vez más importantes –porque en el papel Carrillo tendría que ser uno de los referentes de cara al futuro, pero no da muestras de regularidad. En cuanto a Vargas, no supo aprovechar una nueva oportunidad luego de su buen final de temporada en la Fiorentina. No marcó diferencias en ninguno de los dos amistosos y a su edad es claro que pronto entrará en un declive que no le permitirá rendir en el nivel que alguna vez llegó a tener. En ambos casos, valdría la pena probar nuevas opciones en los partidos ante Paraguay. Lo más sano sería que no fueran convocados si es que la idea es incrementar el universo de jugadores seleccionables.

Jugadores como Juan Vargas quedaron en deuda (Foto: Agencia Uno)

LIDERAZGO CERO.
Este es otro tema que preocupa de cara al futuro. Con el retiro de Claudio Pizarro cada vez más cerca, no se vislumbra un jugador que pueda tomar la posta del jugador del Bayern Munich. Pizarro puede ser criticado por múltiples cosas dentro del campo, pero su ascendencia sobre el plantel es indudable. Es el líder desde hace más de una década, y eso nunca ha estado en discusión. El problema es que no hay relevo en este tema. Es algo que se pudo apreciar en el encuentro ante Chile, en donde perdimos la brújula de manera rápida y no tuvimos mayor reacción. Los jugadores se desorientaron y en el campo no hubo quien pusiera orden. Paolo Guerrero no es precisamente un líder, lo mismo que Juan Vargas. Rinaldo Cruzado, otro de los líderes del plantel, ya no cuenta con el nivel adecuado y es altamente probable que no esté en las próximas convocatorias. También habría que descartar a Carlos Zambrano, un jugador que tiene temperamento al igual que Vargas, pero que muchas veces abusa del juego fuerte por no saber pegar. Fuera de ellos, no hay otro jugador que aparente tener la pasta necesaria para tomar esa responsabilidad.

DOS POR DOS. Sin chances de mostrarse ante Chile, Pedro Gallese y Mario Velarde –que ante los sureños apenas disputó 4 minutos- supieron aprovechar bien la oportunidad que Pablo Bengoechea les otorgó al ponerlos como titular ante Guatemala. Gallese no fue exigido demasiado, pero en las pocas que tuvo que intervenir, estuvo a la altura. El portero de San Martín se ha constituido como la principal competencia de Raúl Fernández de cara al titularato en los próximos encuentros. Además, mantuvo su arco invicto por tercer encuentro consecutivo, algo que va a sumar mucho en lo anímico la próxima vez que se vuelva a cuadrar bajo el pórtico peruano. En cuanto a Velarde, es claro que cuenta con la confianza de Bengoechea, que parece haberlo incorporado definitivamente al universo de jugadores con los que cuenta. Ante el bajo nivel de Cruzado, es el llamado a relevarlo en esa primera línea de volantes. Igual hace falta verlo ante un rival de mayor fuste.

¿Quién debería ser el nuevo líder de la selección peruana? Es una interrogante que se deberá resolver con el correr de los días, semanas o meses (Foto: cortesía Ovación digital)

PASO A PASO.
Sufrió ante Chile, pero ante Guatemala fue el mejor de la cancha. La referencia es para Carlos Ascues, que marcó su tercer gol en la Era Bengoechea, pero que aún tiene cosas por mejorar para consolidarse definitivamente como un valor importante en esta selección. La primera labor de Ascues es ejercer presión en la mitad de la cancha para intentar recuperar la pelota y luego recién intentar subir y ceder el balón o probar con algún remate de media distancia. El problema es que en su desorden llega a equivocarse demasiado a la hora de pasar el balón. Es claramente un defecto que debe tratar de corregir porque un error así puede costar caro ante una selección de mayor nivel que la guatemalteca. A pesar de todo, cumplió en términos generales.

Composición fotográfica: Aldo Ramírez / DeChalaca.com
Fotos: Agencia Uno, cortesía Ovación digital


Leer más...

Chile - Perú: Muy lejos del primer mundo

Perú - Guatemala: El problema es que es lo mismo
 

Comentarios ( 0)add
Escribir comentario
quote
bold
italicize
underline
strike
url
image
quote
quote

busy