El modelo más atractivo
De la Segunda División 2014, a ciencia cierta, solo se tiene algunos detalles preliminares: existe la intención de que el número sea mayor al que se configuró el año pasado (llegar a los 16 equipos); hay hasta doce equipos que arribaron a la Etapa Nacional de la Copa Perú en 2013 que pretenden acceder a este torneo; y también hay de los otros: clubes que arrastran problemas económicos o de índole dirigencial -como Huracán, Boys, Victoria y Ugarte- y que, en principio, tienen plazo hasta fines de enero para regularizar su situación si es que no pretenden quedar fuera del torneo de ascenso y dejar sus plazas disponibles.
Sin embargo, si se parte de la idea inicial; o sea, la de contar con 16 participantes, que es en realidad el número de equipos que decentemente debería tener todo torneo, es necesario empezar a delinear cómo se podría desarrollar, y también experimentar qué variantes se podrían aplicar en un certamen que, por obra y gracia del sistema de ascenso en el fútbol peruano, solo tiene un cupo a Primera División. Es evidente que lo ideal sería jugar dos ruedas de todos contra todos (30 fechas) y el primero sea el que asciende, así de sencillo. Suena perfecto, pero en la práctica corre el riesgo de perder sostenibilidad, ya que el grueso de los equipos, que no corren el riesgo de descender, van a perder el atractivo de la competencia y el respaldo que van a tener también será decadente.
Lo que se va a apreciar a continuación es, según trascendidos de los últimos días en los pasillos de la Segunda División, una variante pertinente para que se extienda la competitividad hasta el final del torneo y la expectativa de los equipos y los aficionados sea, en verdad, de principio a fin.
A partirse en dos
¿Cuál debe ser el mejor parámetro para un torneo que solo otorga un premio -al campeón- y en el que los dos últimos pierden la categoría? Con 16 participantes, pues a la ADFP-SD no le queda dudas de que habría que partirlo en dos. A pocos les puede gustar, pero hay que aceptar que el grueso de los clubes dependen de un factor económico y que, para ello, es determinante que su expectativa se sostenga el mayor tiempo posible. Por esta razón, la mejor variante que podría aplicar la Segunda División, de jugarse con 16 equipos, es la de formar dos grupos de ocho equipos cada uno. Ambos, lógicamente, tendrían que poseer una distribución geográfica equitativa. En esa línea, eso sí, se pueden presentar objeciones, como por ejemplo medir la opción de qué tan conveniente sería que Boys y Municipal compartan grupos.
Sobre esa base, lo que habría que generar es un enfrentamiento de todos contra todos. En suma, se estarían produciendo 14 jornadas (siete fechas de ida, siete fechas de vuelta). Tras ello, ¿qué hacer? Lo que estaría sugiriendo la ADFP-SD es establecer otra partición: los cuatro primeros de cada serie clasificarían a la liguilla por el título, que al estar integrada por ocho participantes también funcionaría con los mismos parámetros de la etapa regular; es decir, debería jugarse en 14 fechas (siete fechas de ida, siete fechas de vuelta), que sumadas a la instancia preliminar estaría generando un total de 28 jornadas. Cifra muy cercana a la que tendría un torneo con la misma cantidad de clubes pero sin partirla en dos (30 fechas).
Como es obvio, es necesario apuntar que, tras la etapa regular, los cuatro mejores de cada grupo estarían ingresando a la liguilla por el título con algunos puntos de bonificación y, lógicamente, siempre mantendrían su puntaje acumulado. La escala de bonificación tendería a ser así: tres puntos extras para los primeros de cada grupo; dos puntos extras para los segundos de cada grupo; y un punto extra para los terceros de cada grupo. Al final de la liguilla por el título, el que ocupe el primer lugar sería el nuevo inquilino para el Descentralizado 2015. Solo habría un partido de definición si es que se presenta una igualdad en el primer lugar. En suma, a diferencia de un formato tradicional, este modelo de torneo sí sería más atractivo y duradero para los ojos del espectador y también generaría mayor rentabilidad.
¿Y los de abajo?
No nos estabamos olvidando de este punto. Al contrario: habría que encontrar la modalidad más adecuada para generar más competencia en los clubes que pretenden zafar de la baja y, a la vez, para que los que respiran más aliviados tampoco se relajen en un buen tramo del torneo. Ante ello, lo más recomendable, según se desliza en la ADFP-SD, es que los cuatro peores de cada grupo no se entremezclen entre sí. Todo lo contrario: que cada uno juegue su propio cuadrangular, siempre conservando su puntaje acumulado.
En este caso, lo que habría que hacer son enfrentamientos de todos contra todos (tres fechas de ida, tres fechas de vuelta) en cada cuadrangular. Tras ello, los ocho equipos inmiscuidos tendrían 20 fechas garantizadas (sumando las 14 de la etapa regular), aunque luego cuatro clubes sí estarían bajándole la persiana al torneo, ya que la idea es que aún no se cierre la baja, pues los dos peores de cada cuadrangular integrarían la liguilla por el descenso, que no sería otra cosa más que otro cuadrangular, pero ahora sí determinante para definir la permanencia en esta categoría.
A la liguilla por la baja, los dos peores clubes de cada cuadrangular estarían ingresando con el puntaje acumulado en las 20 jornadas de competencia. Y tras seis fechas (tres de ida y tres de vuelta), se le pondría fin a la historia: los cuatro equipos totalizarían 26 jornadas disputadas y los dos últimos se irían a la Etapa Regional de la Copa Perú 2015. Todo sería más sencillo y los clubes -incluídos los cuatro que se salvarían en el primer cuadrangular- en todo momento van a sentir que pugnan por algo.
Es lo que hay
Es evidente que este formato sería, sobre la base de todas las condiciones expuestas líneas arriba, tal como bosqueja la ADFP-SD, lo ideal para un torneo de 16 participantes. El rigor, sin duda, sería más prolongado para un campeonato que solo va a ver al campeón en Primera División. De hecho, si la Segunda División sería la única vía para ascender a la máxima categoría y tendría dos cupos, este formato ganaría más atractivo, y ni qué decir si, en algún momento, sería posible generar un par de promociones entre el 13° y 14° del Descentralizado contra el 3° y 4° de la Segunda. Ya en 2013 hubo una vivencia medianamente palpable de lo que puede ser una definición por la baja (como ocurrió en el Unión Comercio - Pacífico).
En las próximas semanas la Segunda División 2014 empezará a tomar más forma y sabrá, a ciencia cierta, con cuántos equipos pondrá en marcha su torneo. De quedarse con 14 participantes, este modelo sería difícil de aplicar porque al partirlo en dos quedaría en una cifra impar y solo generaría desorden, además de que va a sufrir la monotonía de años anteriores y perderá atractivo en el tramo final. Si la FPF decide que el torneo se desarrolle con 16 clubes, el modelo que la ADFP-SD pretende aplicar podría generar una mejor competencia.
Composición fotográfica: Roberto Gando / DeChalaca.com
Fotos: Johann Begazo y Luis Chacón / DeChalaca.com, Puno Deportes
escrito por Eduardo Martin , January 26, 2014
escrito por Itay , January 26, 2014
Primero, es completamente ilogico que los equipos mantengan su puntaje acumulado Y ganan puntos de bonificacion para la segunda etapa. tiene que ser uno de los 2, con preferencia al segundo para generar mas expectativa. Ademas que no hay que beneficiar tanto a los equipos que caen en el grupo mas accesible.
Segundo, y eso ya es mas general, la idea de partir una division profesional en 2 no es estrategica. Si es algo temporal OK, pero al largo plazo hay que fortalecer los equipos, y no lo van a poder hacer como debe ser sin enfrentar a equipos de todo el pais. Hay que reducir el numero de equipos en la Primera Division (solo en 2), para que haya mas equipos atractivos en la Segunda (o mejor llamada Primera B profesional). Las 2 divisiones profesional deben tener 14 participantes cada una por ahora (quizas incrementar en el futuro mediano/lejano).
Y por ultimo, claro, el doble ascenso no puede continuar. Con 2 equipos que ascienden y 2 que descienden, mas 2 en repechajes (3ro y ante-pentultimo), hacer un torneo atractivo con 14 equipos es facil, y no hay necesidad de jugar solo 26 fechas sino hasta 40 fechas, como lo he planteado aqui -
http://www.slideshare.net/itayingber/cambio-en-el-sistema-de-ligas-2015
escrito por Fantasma , January 26, 2014
2. Se podrÃa agregar sabor al descenso si el ascenso a segunda del próximo año se realiza haciendo un minitorneo con los que se quedaron en la etapa final de la copa perú para que los puestos 13 y 14 de la segunda jueguen promoción.
escrito por marco , January 27, 2014
escrito por roberto ch , January 27, 2014
escrito por Fantasma , January 27, 2014
escrito por Ricardo , January 29, 2014
escrito por javier espinar , January 30, 2014
El 2013 mejoró un poco con la presencia del Muni, Boys, Alf. Ugarte y el Ormeño; además del Torino y el Huracán
Este año como que va a mejorar un poquito con el Gálvez y Huaral pero aún falta
Si desean hacerlo con 16, deberÃan llamar al Manucci y al Grau de Piura.
Ojalá que ya no se repita lo del 2012 que fue un desastre.
escrito por Fantasma , January 30, 2014
escrito por Darsc , February 04, 2014
escrito por marco , March 14, 2014
Además por que botar 2 equipos si luego se van a retirar por lo menos uno antes o durante el torneo, hasta soy de la idea que no deberÃa haber descenso hasta por los próximos 5 años, si no tiene atractivo entonces por que ponerle trabas.