La Resaca del Sábado: Goles que haces y no haces
Mientras a Aurich le sobró capacidad de definición contra Cienciano en Olmos, a Alianza le faltó eso por completo en Matute, aunque resolvió sus problemas de generación. Además, por cuarta vez en el año un partido no se televisó.
Problema resuelto
Estaba dicho que el principal problema de Alianza a lo largo de su racha reciente de partidos sin ganar no era la definición, sino la generación de ocasiones de gol -pues sin estas últimas lo primero está de más-. Los íntimos estuvieron, desde la marcha de Yordy Reyna -un autogenerador, que se creaba sus propias ocasiones vía capacidad individual de desborde- sufriendo por su ineptitud para llevar la pelota al área rival. La solución a esos males, al parecer, estaba en el banco y era una muy vieja y conocida.
Henry Quinteros volvió al titularato y, sobre todo, a fungir haciendo lo que mejor sabe: pasar la pelota. El 'Pato' se situó a la izquierda de la volante, primero como una especie de espejo de Albarracín en la volante en "V" íntima y luego algo más suelto, detrás de los puntas cuando el cuadro íntimo decidió emplear tanto a Vidales como a Aguirre de extremos netos. Y desde allí, el mediocampista de 35 años hizo pesar su trayectoria: se cansó de tirar servicios largos que destrozaron la línea defensiva huancaína, pues puso las pelotas siempre a las espaldas de Araujo y Mendoza, y hasta tan bien colocadas que Farfán y Figueroa quedaban pagando. En suma, con el 'Pato', Alianza tiene el 50% de la tarea hecha.
Problema sin resolución
El otro 50% subyace como problema, y bien grave, en Alianza Lima. Y tiene que ver con las atrocidades que sus delanteros cometen de cara al gol. En el partido ante Huancayo, los arietes íntimos fallaron al menos ocho ocasiones clarísimas frente al arco de Joel Pinto, que algunos dicen pudieron haber rubricado una goleada, pero que concretamente, más bien, pusieron en riesgo una victoria segura al punto que Alianza acabó contra las cuerdas y salvado por las oportunas -para los íntimos, claro está- expulsiones en tienda del 'Matador' producto de la desesperación por el empate.
Lo curioso es que en Alianza el que más desespera es Aguirre. Y si bien el 'Zorrito' tuvo hasta tres ocasiones clarísimas, la verdad es que los peores desperdicios en la tarde victoriana estuvieron en los pies de Mostto, que falló una clarísima en cada tiempo -la primera de modo grotesco cuando estaba solo en el área chica ante Pinto-. Vidales hizo lo propio en un par de ocasiones y hasta el propio Franco Navarro Mandayo, que ingresó en el complemento, cerró el partido con un gol fallado más que lleva a que los hinchas blanquiazules esperen con ansia extrema a Guevgeozián y Gonzales Vigil como aparentes calmantes para tanta insolvencia.
Harta resolución
Aurich animó la mañana sabatina con una goleada a todas luces inesperada, sobre todo por lo mucho que a lo largo del año le ha costado a la propuesta de Bakero traducir la posesión del esférico en ocasiones concretas de gol. Muy temprano, Germán Pacheco se despachó con un hat trick conquistado en apenas 11 minutos que no es récord solo por aquella inolvidable jornada de Julinho en 1995 ante Municipal con camiseta de Cristal, salvando el invicto en el recién reinaugurado San Martín de Porres con tres goles en solo 5 minutos. Y luego, Ovelar, Viza (sí, Viza) y Rojas (¡Rojas!) hicieron lo suyo para sellar un 6-1 que iguala el mejor resultado del 'Ciclón' en la historia, solo equivalente a la goleada 1-6 sobre Universitario en 1975.
De la vera contraria estuvo Cienciano, que no caía goleado por ese marcador desde 1994, y también Mario Viera. El DT uruguayo, que ya el año pasado se comió siete goles de León en Huánuco al frente de Unión Comercio, a esta hora es la víctima favorita del bullying seudonacionalista y gremial de varios técnicos peruanos que han cerrado filas a favor de Julio César Uribe en la polémica dialéctica que ambos entrenadores vienen sosteniendo. Flaco favor le hace a Viera, por cierto, alimentarla: antes del partido dijo que él jugaría ofensivamente en Olmos y no iría "a defenderse con cinco como Uribe". En silencio, a veces, las cosas salen mejor.
Para el que no lo mira por TV
El Inti Gas - Vallejo se convirtió en el cuarto partido del presente certamen de Primera División que no fue televisado en vivo. En las primeras jornadas, el Unión Comercio - Gálvez, el León - UTC y el Unión Comercio - San Martín tampoco lograron ser transmitidos en directo, como únicos lunares de un 2013 en el que la programación de los partidos y su ordenada televisación se ha llevado a cabo mejor que en cualquier otra temporada.
Lo destacable es que esta vez el canal encargado de la transmisión transparentó el problema ocurrido con el satélite y dijo sinceramente a los televidentes que no podría emitir el partido. Hay que aplaudir esto porque en verano no había sido así: esas veces muchos televidentes quedaron en ascuas sin explicación alguna de parte del mismo canal. Problemas siempre podrá haber: transmitir desde algunas ciudades es muy complejo y la geografía del Perú juega en contra de las transmisiones, sin duda. Al menos esta vez, las manos de Villasantti y la impericia de la delantera gasífera se encargaron de que la teleaudiencia no se quedara sin goles sabatinos que ver.
Composición fotográfica: Roberto Gando / DeChalaca.com
Fotos: Johann Begazo y José Luis Cabrera / DeChalaca.com, Prensa Juan Aurich
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