Vuelta en Grande
Esther Grande de Bentín se coronó como campeón de la Liga Distrital de Surquillo, con lo cual clasificó para el Interligas. Recordemos aquí la historia de este equipo que alguna vez disputó la Segunda División.
Si bien en los últimos años ha destacado más por su trabajo en menores, este año el Esther Grande de Bentín volvió a la actividad en mayores vía la Copa Perú al lograr el título en la Liga Distrital de Surquillo, con lo cual se prepara para disputar el Interligas de Lima Metropolitana. Durante esta etapa, el elenco rimense ha sido dirigido por Marco Antonio Valencia quien, además, es el Jefe de la Unidad Técnica del club. Sin embargo, no muchos recuerdan que a finales de la década de los ochenta este equipo incursionó en la Segunda División, trayectoria que se recopila a continuación.
Cata de fútbol
Luego de la conversión de Sporting Tabaco a Sporting Cristal por gestiones de don Ricardo Bentín y el apoyo incondicional de su esposa, la señora Esther Grande, un grupo de trabajadores de la cervecería Backus y Johnston acordaron crear el club Esther Grande de Bentín en su honor y lo inscribieron en la Tercera División de la Liga del Rímac.
En 1981 campeonó en la Liga del Rímac y, con ello, disputó el torneo Interligas en la zona norte. Luego de eliminar a Defensor Rímac (doble 2-1) y a Atlético Relámpago (1-0 y 0-0), fue eliminado en la final de la zona por Francisco Bolognesi de Puente Piedra (2-2 y 3-4); sin embargo, presentó un reclamo por la mala inscripción de un jugador del Defensor Carabayllo y logró el ascenso a la Liga Mayor de fútbol de Lima Metropolitana. En aquella liga, terminó en el tercer lugar con 19 puntos detrás de Unión Gonzales Prada (25) y Huracán San Isidro -que luego se rebautizaría como San Agustín- (20). En 1982, Esther Grande fue uno de los animadores del torneo y se ubicó en la segunda posición del torneo con 22 puntos, siendo superado solo por Barcelona de Surquillo que tuvo dos unidades más. Al año siguiente, ocupó el tercer lugar con ocho puntos, mientras que en 1984 se ubicó en el cuarto puesto con 14 puntos, tres unidades menos que los líderes Defensor Kiwi y Tres Reyes.
Recién fue en 1985 cuando Esther Grande recuperó el protagonismo de 1982 al empatar en el primer lugar con Papelera Atlas (18 puntos cada uno) y clasificar a la etapa regional de la Copa Perú, en la que también quedó en el primer lugar junto con Defensor Ingenio. Así, llegó en 1986 a la Segunda División, en cuya Zona Norte cumplió una campaña irregular y terminó en el quinto lugar con 19 puntos. Para 1987 fue reubicado en la Zona Sur de la Segunda División, en la que acumuló 21 puntos y se ubicó en el cuarto lugar. Luego, en la definición de clasificación al Regional Metropolitano del mismo año, cayó ante Centro de Instrucción Técnica y Entrenamiento Naval con un marcador global de 2-3 y, posteriormente, en el repechaje ante Defensor Lima al registrar un global de 1-1 y perder por 0-3 en la definición por penales.
En los dos años siguientes, Esther Grande no tuvo el rendimiento de temporadas anteriores pues ocupó el quinto lugar con 20 puntos en 1988 y, luego, el último lugar con 9 en 1989, con lo que dejó la Segunda División. En 1990, disputó la Etapa Regional de la Copa Perú en la que empató en el último lugar con Juventud Apurímac y Papelera Atlas, por lo que tuvo que disputar un triangular en el que salió airoso con dos triunfos por 1-0 y 2-1. Sin embargo, en 1991 no tuvo la misma fortuna y descendió a su Liga Distrital al sumar solo 11 unidades.
Luego de ello no se tuvieron por años noticias de este equipo pues, aparentemente, no se presentó en 1992 a la Liga Distrital del Rímac. Solo luego de la salida de la familia Bentín de la Backus y del alejamiento de Jaime Noriega de Cristal, a mediados de la década pasada, el equipo se reactivó para participar en torneos de menores y promover la aparición de valores: Luis Advíncula, Jorge Bazán o el promocionado Pierre Larrauri, entre otros, son producto de sus canteras.
No obstante, para este año Esther Grande ha ido por una apuesta mayor. Luego de ascender a la Liga de Surquillo en 2012, el presente año volvió a la palestra con el título distrital que lo clasificó al Interligas. Se espera que los jóvenes promovidos de sus canteras -las cuales por lo general tienen un buen rendimiento en la Copa Federación organizada por la FPF- puedan demostrar un buen nivel en este torneo y permitan al club poder llegar lo más lejos posible de la mano de Marco Antonio Valencia, aquel ex volante aliancista de la década de los noventa, y acaso tentar un retorno a la categoría de plata.
Composición fotográfica: Roberto Gando / DeChalaca.com
Fotos: Miguel Koo Vargas / DeChalaca.com, Facebook
Investigación estadística: José Farje
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