Melgar fue un Yaraví
Melgar ganaba 1-0 sin mayores apremios, pero se dejó empatar tontamente por Minero, que sumó así su primer punto como visitante en el Apertura, además de minutos para la bolsa con algunos jugadores Sub-20 en sus filas. La peculiaridad de la tarde fue el regreso de Silvia Reyes como jueza principal, quien fue duramente insultada por la parcialidad dominó.
Fotos: Prensa FBC Melgar
¡Ay, amor!, dulce veneno; ay tema de mi delirio, solicitado martirio y de todos los males lleno. Las lamentaciones poéticas son de Mariano Melgar, pero hoy también del aficionado rojinegro, que pese a un primer tiempo muy favorable sufrió la cuestionada expulsión de Silvia Reyes a Nórbil Romero. Para la parte complementaria, la debacle sería sorprendente. Frente al peor visitante en el presente Apertura, Melgar se dejó igualar por errores propios.
EL SONETO DE MELGAR A SU AMADA SILVIA
Si el 'Checho' aparece, todos sonríen en el barrio IV Centenario. Durante los 45 minutos iniciales los locales no tuvieron mayor rival enfrente que las polémicas decisiones de la árbitro Reyes, destinataria de los saludos adelantados por el Día de la Madre. Salvo insinuaciones, como un remate que rozó el palo derecho del arquero Jorge Damián Rodríguez, la labor ofensiva del Minero fue prácticamente nula, por lo que los primeros intentos de Ibarra avizoraban el movimiento del tanteador. Poco después del primer cuarto de hora, el anotador histórico ponía el primero para Melgar luego de una vistosa jugada.
Entonces empezó el show de Reyes. Tras la disputa de una jugada, Nórbil Romero y Luis Rodolfo Ojeda se enfrascaron en una pequeña pelea. Al parecer, el perjudicado fue el jugador rojinegro, que fue también expulsado, desatando la ira de la hinchada dominó, que no cesó de insultarla en lo que restaba de la primera mitad. La tónica era la misma, y salvo una modificación de Paulo Ramos por Pereyra (lesionado), no hubo situaciones de mayor trascendencia.
Al irse a los camerinos para el descanso, la árbitro que fue capaz de provocar el despido de Mario Leguizamón se retiró entre la hostilidad de la tribuna melgariana.
MINERO ENCONTRÓ ORO
Aunque no haya sido demoledor, el tribunero arequipeño confiaba en una amplia victoria. Fue tal vez lo que pensó también el técnico Gustavo Bobadilla, que empleó a dos Sub-20 (Luiggi Luchini y Giovanni Valdivia) para sumar en la bolsa de minutos.
Pero si Minero se había caracterizado en fechas pasadas por sus grandes primeros tiempos, esta vez fue al contrario: una parte inicial para el olvido y un complemento con inteligencia, aquella que 'Ricky' Pérez le exigía a sus compañeros en derrotas anteriores. En los primeros minutos, los de Huarochirí ya asustaban con un tiro al arco rojinegro: quedó en duda si el balón traspuso o no la línea de gol. Melgar parecía dormir el sueño de los justos, pues se complicaba en salida, cediendo de a pocos a las aspiraciones de la visita. 
La tribuna no tardaria mucho en enfurecer, ya que en una escapada, tras un fallido intento de posición adelantada de 'Ricky' Pérez, este daría un preciso pase al novel José Córdova, quien había ingresado para la complementaria. Gol.
Lo previsible: todo sería luego desesperación para los dueños de casa: recurrentes errores en la distribución del balón, jugadas creativas que quedaban en nada, Jean Ferrari fungiendo de organizador (¡¿?!). Minero, tranquilo, esperaba confiado los contragolpes letales de Pérez. En una de esas, metió el centro para el central Fajardo, cuyo cabezazo fue desviado milagrosamente por el arquero Rodríguez. La visita le puso candado al final con el ingreso de un defensor y los arequipeños se hundieron en un océano de la indecisión con dos goles errados.
A fin de cuentas, Melgar le arrancó lágrimas a medio Arequipa como lo hizo hace más de dos siglos el exquisito vate que le da el nombre.
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¿Qué nueva marca consiguió el 'Checho' Ibarra ante Minero?
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