Masacres medicinales
Por la Primera División han transitado decenas de equipos que bien podrían encajar en la categoría ‘sin pena ni gloria’. Otros, sin embargo, dejaron una huella estadística que permite que sus nombres no sean olvidados. El ejemplo más elocuente, tal vez, sea el de Sport Pilsen de Guadalupe, que solo pasó dos años por los campeonatos nacionales, pero tuvo el deshonor de convertirse en el club que recibió la peor goleada en dichos torneos: el 11-0 que le propinó Alianza Lima en 1984.
Otros, por el contrario, sí alcanzaron la gloria numérica: Estudiantes de Medicina no solo debe ser recordado por la gran campaña en el Clausura 2001 que casi lo clasifica a la Copa Libertadores, sino también por haber alcanzado la máxima goleada de un equipo provinciano en la Primera División: el 1 de septiembre de 2002, hace diez años, aplastó 9-1 a Sport Coopsol de Trujillo. Hoy, ninguno de estos clubes mantiene vigencia en el fútbol profesional, lo que conduce a otro interrogante: ¿Cuáles han sido las goleadas más abultadas registradas entre equipos que ya no militan en la máxima categoría?
Pisando uvas
En el Clausura 2002, Estudiantes de Medicina, dirigido por Roberto Martínez, había alcanzado cierto protagonismo; Sport Coopsol, bajo la batuta del uruguayo José Carlos Trasante, iba derecho al descenso. Las dos caras de la medalla se enfrentaron en el Picasso Peratta el 1 de septiembre de 2002 y el resultado fue escandaloso. Nueve veces fueron sacudidas las redes de Pablo Pérez: Germán Muñoz abrió la cuenta a los 2’, el argentino Gabriel Viguetti tuvo una jornada de gloria (hizo cuatro) y Renzo Gonzales, Cristian Salvatierra y Milton Marquillo (2) aportaron también su cuota a la humillación; el descuento, vía penal de Rodrigo Saraz, solo decoró las cifras.
El 9-1 pasó a la historia: no solo fue la mayor goleada de la década pasada, sino también el resultado más abultado conseguido por un equipo provinciano en la Primera División.
Joyas de Barrio
Alfonso Ugarte de Puno ascendió en 1974 y, desde el principio, quiso dejar en claro que Puno era una plaza temible. El 30 de junio de ese año, por la fecha 15 del Descentralizado, el Enrique Torres Belón contempló una masacre: Barrio Frigorífico, equipo del Callao que debutó y se despidió ese año, se comió un inobjetable 8-0 gracias a los goles de Ernesto ‘Chivo’ Neyra, José Luis Ticona (2), Alberto Alvarado, José Leiva (3) y Alberto Peña.
Este resultado se reprodujo once años más tarde en Chancay. El 11 de agosto de 1985, definían su pase al Descentralizado Juventud La Joya, dirigido por Miguel Company, y el Deportivo COOPTRIP (COOPerativa TRIPlayera) de Pucallpa. En la ida, en el viejo Oficial, La Joya había casi asegurado la clasificación con un 0-2. La revancha parecía ser un mero trámite, pero fue más que eso: La Joya abusó de sus posibilidades y endosó a los selváticos un humillante 8-0 con goles de Marcos Salguero (3), René Cañamero (2), Rodolfo Chávarry, José Cañamero y el ‘Artista’ Julio César Antón.
Se siente, se siete
Este artículo, como se dijo, incluye las grandes goleadas de los equipos que hoy ya no están en Primera; las diferencias de siete goles también cuentan con un largo registro. El Descentralizado 1966, el primero de la historia, tuvo una goleada histórica en Trujillo: el 18 de septiembre de ese año, Defensor Lima apabulló al Alfonso Ugarte de Chiclín por 1-8.
Sin embargo, los 8-1 fueron más insólitos en 1997: en dicha temporada, Alianza Atlético, descendido el año pasado y ahora inubicable, consiguió ganar dos veces por dicho score en Sullana: en el Apertura, el 6 de abril, aplastó a Unión Minas con cinco goles de Ricardo Zegarra; meses más tarde, el 26 de octubre por el Clausura, lo hizo contra La Loretana, en una goleada que incluyó un tanto de penal del arquero Rafael ‘Pañalón’ Quesada.
De los siete a ceros, las referencias son más amplias: como visitante, en el Regional Sur de 1989, Aurora de Arequipa aplastó 0-7 a Diablos Rojos de Juliaca. Los 7-0 de los locales son complementados por esta nómina: Alfonso Ugarte a Atlético Torino en Puno (Descentralizado 1978), CNI a Deportivo Junín en Iquitos (Descentralizado 1984), Los Espartanos a Alfonso Ugarte de Puno en Pacasmayo (Descentralizado 1985), UTC a Atlético Grau en Cajamarca (Regional Norte 1986), Unión Minas a Deportivo Municipal en Cerro de Pasco (Clausura 1999) y Alianza Atlético a IMI en Sullana (Clausura 1999).
Muchos de los equipos aludidos en este texto nunca volverán a Primera División, pero allí, en el recuerdo, quedarán esas cifras para enorgullecer o irritar a los hinchas que les sobreviven.
Composición fotográfica: Roberto Gando / DeChalaca.com
Recortes: diarios El Bocón, Líbero y El Tiempo de Piura; revista Ovación
escrito por alex F. , September 01, 2012
escrito por Huracán es de 1ra , September 01, 2012
escrito por Tecan , September 01, 2012
escrito por Carlos , September 01, 2012
escrito por Peruanito , September 02, 2012
escrito por J.J , September 02, 2012
JAJAJAJAJAJAJAJ.......NO SABES LEER!!!
vamos a ver a fin de año quien rie mejor!!!
XD
escrito por DeChalaca.com , September 03, 2012
escrito por Juan Carlos Castillo , September 03, 2012