Manuel Earl: Stopper pionero
Alcanzó la gloria con Sporting Cristal en los años 1991, 1994 y 1995. En aquella aplanadora celeste, Manuel Earl, quien este 2011 partió para siempre, se inscribió como uno de los primeros stoppers del fútbol peruano.
Balerio, Castro, Earl, Pardo, Soto, Solano, Garay, Palacios, Magallanes, Julinho y Maestri. Esa era la alineación de Sporting Cristal que la familia celeste sabía de memoria allá por el año 1994. Entre estos jugadores que jornada a jornada hacían delirar de júbilo al hincha bajopontino, pasaba algo desapercibida la figura de uno de sus baluartes defensivos: Manuel Earl. Si bien a lo largo de su carrera no dejó necesariamente grandes jugadas que quedaran impregnadas en la retina del hincha, su sola presencia en el área celeste fue el complemento ideal para un equipo que en aquella demoledora temporada apenas recibió 25 goles, contra 113 anotados.
Volviendo a La Victoria
Manuel Orestes Earl Ponce nació el 28 de marzo de 1968 en Lima, y se crió en la zona de la avenida Lucanas, en el corazón de El Provenir, emblemático barrio si lo hay en La Victoria. Desde temprana edad demostró sus dotes de buen jugador en el famoso mundialito del Porvenir, el torneo callejero más importante del Perú.
A pesar de que su nacimiento se registró en un barrio blanquiazul, sería Sporting Cristal el club que le otorgaría la oportunidad de marcar su debut en Primera División. En 1987 y con 19 años de edad, el espigado defensor hizo su estreno oficial en el balompié nacional, en el partido que Cristal le ganó 1-3 a Internazionale por la fecha 20 del Metropolitano, el 9 de agosto. Aquel día, Earl hizo dupla en la zaga central rimense con Segundo Cruz. Ese mismo año también fue convocado a la selección juvenil integrando la delegación que representó al Perú en el Sudamericano Sub-19. Dirigido por Juan Carlos Oblitas, tuvo como compañeros a jugadores de su generación como Juan Reynoso, Roberto Martínez y Andrés 'Balán' Gonzales, entre otros.
Luego de la tragedia del Fokker, Cristal decidió prestar a algunos jugadores a Alianza Lima y fue así que Earl, para 1988 pegó la vuelta a su barrio para vestir los colores blanquiazules. Fue titular con los íntimos en la Copa Libertadores ante Universitario y
los brasileños Sport Recife y Guaraní; hizo dupla en la zaga con Manuel
'Calidad' Vinces y destacó especialmente en el triunfo 2-1 sobre
Guaraní en Matute, en el que fue figura al anular al ariete brasileño
Evair.
En ese primer año con los victorianos se desempeñó como back, a despecho de lo cual marcó tres goles: en el Descentralizado B ante AELU y La Joya y en la Liguilla -en la que los victorianos quedaron últimos, de la mano de Teófilo Cubillas- frente a Unión Huaral. En este último minitorneo, se recuerda su expulsión en el clásico ante Universitario, aquel que quedó 2-2 con empate de César Cueto vía tiro libre en el último minuto.
Al año siguiente, nuevamente se mantuvo como titular en Alianza, ya con Miguel Company en el banquillo. Sin embargo, ante la partida de Juan Reynoso al Sabadell de España, Earl fue reubicado como volante central, para hacer dupla con Víctor 'Vitito' Reyes. Desde esa posición convirtió cuatro goles: ante Internazionale y Meteor por el I Regional Metropolitano y otros dos en el Plácido Galindo, frente a Unión Huaral y a Universitario. 
Este último tanto, conquistado de penal en el arco de Juan Carlos Zubczuck fue importantísimo: sirvió para que los íntimos vencieran 1-0 a los cremas en Matute, en la que sería la última victoria blanquiazul en casa sobre los cremas por los siguientes seis años. Meses después, también en Matute, Earl volvería a ver la roja en un nuevo clásico, por agresión mutua con 'Balán' Gonzales, a manos del juez Sergio Leiblinger.
El año siguiente, 1990, fue de cambios para la vida de Manuel Earl. No solo contrajo nupcias, sino que emigró a Defensor Lima, que le sirvió de plataforma para encaminarse nuevamente a la institución que le brindó la oportunidad de mostrarse en el firmamento futbolístico: Sporting Cristal. Juan Carlos Oblitas solicitó su retorno y ello se materializó para la temporada posterior.
Gloria celestial
Con un "plantel de gente experimentada", como rezaba el rap, Cristal se consagró campeón de la última edición de los tristemente recordados Regionales. Earl conformó aquella temporada una zaga sólida fungiendo de stopper junto a su primo político Jorge Arteaga, y con Claudio Pedraglio reinventado como líbero por Oblitas. Desde entonces y por el próximo lustro, se mantuvo como titular habitual en la zaga rimense viendo pasar distintos zagueros: Orlando Prado, el 'Bimbo' Luis Ávila, el hondureño Juan Ramón Castro, José Soto y Marcelo Asteggiano, pero siempre con Earl como habitual tercer comparsa.
Al año siguiente y ya con la reestructuración del Descentralizado, Earl aportó goles en las victorias bajopontinas sobre Sport Boys, Universitario y León de Huánuco. Su regularidad le permitió el llamado de Vladimir Popovic a la selección, con la que solo llegó a jugar un partido internacional A-1: el amistoso disputado ante Rumania en el estadio Nacional en febrero de 1993, en el que ingresó a los 40 minutos en reemplazo de su amigo Juan Reynoso. En aquel 1993, Earl anotó cuatro goles con Cristal, tres de ellos en una demoledora goleada cervecera: el 10-1 endilgado a UTC en la 'Cancha de los Muertos' de Chorrillos por el Torneo Intermedio.
Ya en 1994, Sporting Cristal empezó a conformar la base del equipo que tres años después se consagraría subcampeón de la Copa Libertadores. Earl anotó un solo gol, que curiosamente también fue parte de una estrepitosa goleada: su tanto inició el célebre 1-11 sobre Defensor Lima del 31 de julio de 1994. Al año siguiente, con las llegadas de Soto desde Alianza y Asteggiano de Universitario, Earl rotó en la zaga con Orlando Prado en el bicampeonato rimense. Convirtió un solo gol y en una nueva goleada: fue en un 4-0 sobre Sport Boys, el equipo que al año siguiente lo cobijaría.
Sus últimos colores
Con casaquilla rosada, Earl conformó una dupla que se hizo sólida con Jorge 'Tata' Reyes, y se dio maña para irse al ataque también: convirtió goles en los triunfos sobre Alianza Atlético, La Loretana y Deportivo Pesquero. Al año siguiente, tanto Earl como el 'Tata' fueron seducidos por la jugosa oferta de Deportivo Municipal, que con el apoyo de América Televisión preparaba un equipo de polendas dirigido por el argentino Carlos Biasutto. 
Con el cuadro barrendero, no obstante, la campaña fue regular y para destacar solo quedó el que sería su último gol: el 14 de setiembre de 1997 en la victoria edil por 3-1 sobre Atlético Torino.
En 1998, Alianza Atlético lo registró como refuerzo y sería la churre la última divisa que defendería. Apenas estuvo presente en 9 partidos durante el Torneo Apertura, el último de ellos en el estadio Nacional con derrota 5-1 ante Universitario. A media temporada, rescindió su contrato con el cuadro sullanero y migró a Estados Unidos para radicarse en New Jersey, donde vivió los últimos 13 años hasta que en agosto pasado un cáncer de pulmón acabó con su vida. El recuerdo de Manuel Earl, sin embargo, perdura entre los aficionados noventeros, varios de los cuales -mal inducidos por ciertos locutores de la época- lo llamaban "Eral", pero que no olvidarán sus buenos momentos como stopper cuando las defensas de tres recién nacían en el Perú.
Composición fotográfica: Roberto Gando / DeChalaca.com
Fotos y recortes: revistas Todo Fútbol y Estadio; diarios Ojo y Líbero
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que en paz descansen todos ellos...
LE QUIERO DAR GRACIAS A LA PERSONA Q HIZO ESTO..ME DA MUCHO GUSTO Q MI PADRE SIGA VIVIENDO EN LA MEMORIA DE MUCHOS PERUANOS...
Q VIVA EL CRISTAL CARJO!!!!
Otro gol recordado en el clásico del 2-2 tras centro de Cueto en arco norte.
Recuerdo las discusiones de Ovación entre los finados Enrique Valdez con Mario Grau respecto a la pronunciación del apellido. Descansa en paz Earl.