Corea del Norte: Corea mi nombre
El pasado 17 de junio, Corea del Norte empataba sin goles en Riyad frente a Arabia Saudita. Una hora antes, otro acontecimiento futbolístico, aunque insólito, le daba la mano a la escuadra septentrional. Corea del Sur igualaba sin goles ante Irán, consumando la gesta: Corea del Norte llegaba así a una cita mundialista desde su última participación, hace 43 años, en Inglaterra. Lo curioso, qué duda cabe, es haberlo hecho gracias a una "ayudita" del vecino con quien aún tiene pendiente un tratado de paz y con quien mantiene una frontera relativamente pacífica por un acuerdo de armisticio. Es la primera vez en la historia que ambas Coreas clasifican a la misma cita mundialista.
Corea del Norte no tiene una rica historia futbolística, pero sí una muy enmarañada a la politiquería tradicional de un gobierno comunista. El país aún no cuenta con una liga profesional y tan solo lleva a cabo el denominado Campeonato República, que enfrenta a equipos de 'Primera', 'Segunda' y 'Tercera' clase entre los meses de setiembre y octubre. Los jugadores no reciben más que un estipendio para sus gastos. Por tal motivo, y porque la Asociación Norcoreana de Fútbol no se adhiere al reglamento asiático de traspaso de jugadores -por un tema político-, ningún club norcoreano está en capacidad de participar de los campeonatos organizados por la Confederación de Fútbol Asiático.
De armas tomar
El club norcoreano más exitoso es el 25 de Abril, oncena rojiblanca que pertenece al Ejército y que ha cosechado más de 10 Copas de la Federación Norcoreana de Fútbol. Curiosamente, dos estadounidenses figuran en su nómina: Freddy Restrepo y Tony Reyna. En 2007, sin embargo, el Amrokgang Sports Group salió campeón del Campeonato República. El cuadro juega con una camiseta verde y es de propiedad del Ministerio de Seguridad Popular -el equivalente al Ministerio del Interior en nuestro país-. En suma, es el equipo policial, una especie de pariente lejano de los peruanísimos y prácticamente inubicables Alcides Vigo o Guardia Republicana. Otros clubes importantes son el Locomotive Sports Group y el Pyonyang City Sports Group. Sin duda, la politización del deporte rey está a la vuelta de la esquina en Corea del Norte.
Como prueba de la ostentación característica del comunismo y la Guerra Fría, Corea del Norte posee el estadio deportivo más grande del mundo: el Rungrado, ubicado en la capital Pyonyang y con capacidad para 150 mil almas. Sin embargo, ha sabido albergar contados éxitos deportivos en un país que vive oprimido bajo el régimen de Kim Jong-iI.
El ciclón del Norte
Vale retroceder al máximo logro deportivo de esta nación. Se dio el 19 de julio de 1966, sobre el gramado del Ayresome Park en Middlesbrough, Inglaterra. Corea del Norte enfrentaba a la poderosa Italia de Facchetti, Burgnich, Mazzola y Rivera. Sobre las postrimerías del primer tiempo, el mediocampista Pak Doo Ik -dentista de profesión- silenciaba el estadio con el 1-0. A la postre, ese tanto catapultaría a Corea a los cuartos de final y eliminaría al once de la bota, en lo que se catalogó como una de las peores vergüenzas deportivas de la ‘Azzurra’. Corea del Norte terminaría octava, eliminada en cuartos por la máquina portuguesa de Eusébio y compañía. La histórica campaña del seleccionado norcoreano quedó inmortalizada en el documental de Daniel Gordon El partido de sus vidas, que en 2002 recogió las memorias de los únicos siete sobrevivientes de esa mítica oncena.
Casi diez lustros después, el cuadro rojo y azul vuelve a ilusionarse, aunque le podría durar menos de lo esperado. Ante el estricto control de los medios de comunicación en el país, se ha llegado, incluso, a sospechar que una parte de la sociedad no se ha enterado siquiera de la clasificación.
Enemigo íntimo
En la fase clasificatoria, Corea del Norte tuvo que enfrentarse tres veces a su archirrival sureño. En 2008, y tras 15 años sin verse las caras sobre un campo de fútbol, empataron 0-0 en un duelo disputado en cancha neutral (en Shanghai). Previamente, el régimen norcoreano se había negado a izar la bandera surcoreana y cantar su himno en territorio propio, por lo que la FIFA debió mediar en el impase y llevar el encuentro a China. En la fase final, se enfrentaron otras dos veces, con empate 1-1 en el primer choque y victoria surcoreana por la mínima diferencia en el segundo cotejo. Corea del Norte sumó 12 puntos, se ubicó segunda de su grupo y dejó afuera a un "caserito" mundialista: Irán.
Su selección actual no cuenta con grandes individualidades y se espera poco de ella en Sudáfrica 2010. El jugador que más veces ha vestido las sedas nacionales (31 partidos) es el defensor Ji Yun-nam, mientras que su goleador es Jong Tae-Se, con 11 dianas en 17 presencias. Los números del ariete, que milita en el Kawasaki Frontale de Japón, son, seguramente, la envidia de muchos de nuestros delanteros nacionales. Quizás el norcoreano más exitoso, a nivel de clubes, sea el diez Hong Yong-Jo, que milita en el FC Rostov de la primera división rusa.
Si bien va sin cartel al Mundial, el fútbol sí sabe de hazañas y sorpresas. Corea del Norte -o la “Chollima”, como se la conoce-, ya sabe lo que es enmudecer al mundo futbolístico. Quizá así, las tramas políticas del país asiático dejen de empañar los deseos deportivos de toda una nación y se vuelva a hacer costumbre para todos los norcoreanos corear a viva voz el nombre de su selección.
Composición fotográfica: Gian Saldarriaga / DeChalaca.com
Fotos: photobucket.com, AP
Videos: YouTube / Usuarios: guancavilca, JunaidNizReturns
escrito por marco , July 10, 2009
escrito por jose sanzzz , July 11, 2009
El desarrollo de Corea del Sur es impresionante, la computadora desde la q les escribo es made in corea...y seguro el barco en el q llego al Callao también lo era.
La situación de Corea del Norte si dá pena, dirigidos por un demente q juega a ser Dios.
Ojalá en el mundial den alegrÃas a sus paises.
escrito por Joseph , July 12, 2009
escrito por Carlos Pérez , July 16, 2009