Foto: FIFA.com / AFPEl debut de Maradona en Eliminatorias no sufrió de sobresaltos, contentó a la exigente hinchada argentina y no extrañó la ausencia de Riquelme. La 'Albiceleste' goleó 4-0 a una pasiva Venezuela con el brillo de su pequeño tridente ofensivo. Messi, pese a la férrea marca llanera, hizo y deshizo cuando quiso y desequilibró el partido.

La ficha del partido

 

Varias incertidumbres rondaban el estreno del ‘Pelusa’ en eliminatorias. Sí la albiceleste iba a extrañar a Román, quién sería el capitán, quién utilizaría la ‘10’. Todas se respondieron sin sobresaltos. Nadie extrañó al volante de Boca y Mascherano y Messi fueron de los más destacados en la escuadra gaucha. Maradona pasó la primera prueba ahora enrumbará a Bolivia para un desafío más complicado.

Tres que desequilibran

Hace tiempo que la selección argentina juega sin un ‘9’. Ya no está Batistuta y Crespo no es titular en el Inter. Pero no se extraña a esa posición si en reemplazo se tiene a tres que te ganan cualquier partido. Tévez, Messi y Agüero son el trío letal argentino. Los tres la rompen en sus equipos y los tres dejaron con fuertes dolores de cabeza cuando pisaron el acelerador a la débil defensa venezolana.

Mes que un jugador

Lionel Messi ahora mismo es considerado por muchos el mejor futbolista del planeta. No le importa si lo marcan tres jugadores, si sus compañeros no se muestran. Él solo puede multiplicarse y cumplir varias funciones. Gambetea y hace paredes como con la del ‘Kun’ para el primer gol. Da pases perfectos como el que el jugador del Atlético no pudo aprovechar. Coloca centros o dispara para que el arquero dé rebote y ahí pueda aparecer Tévez como en el segundo gol. No existen cerrojos para la ‘Pulga’: basta que le den espacios y causa el alboroto que hoy sufrió la 'Vinotinto'.

Así no se busca un resultado

El planteamiento venezolano fue más que austero. Todos cerrados atrás y en busca de un contragolpe que pocas veces existió. No propuso, no la buscó, no encaró. Se encargó de intentar desaparecer a Messi, pero igual no lo consiguieron. Igual había otros a quienes cubrir. Vega era un solitario atrás del barullo veneco. Salvo el cuarto, los demás no fueron su culpa. Farías buscó evitar la humillación a toda costa y el planteamiento le salió distorsionado. Venezuela perdió el partido desde el primer minuto: por inercia llegaron los goles. Igual, ya pasó el trámite del que quizá sea el partido más difícil de las Eliminatorias; ahora esperará a Colombia en su hogar y se espera que sí vaya en búsqueda de los tres puntos. 

  • ESTUVO MÁXIMO. El 'Maxi' Rodríguez colaboró con un gol, jaló marca y apretó en la marca. Acá no deja transitar a un Arango que desapareció (Foto: FIFA)
  • UNO Y CONTANDO. Messi ya le cruzó el balón a Vega y se dispone a celebrarlo. El '10' abrió el marcador en dudoso fuera de juego (Foto: FIFA)
  • EL MESÍAS. El jugador del Barcelona no caminará sobre agua, pero hace espectáculos con el balón dignos de santíficar. Chacón intenta frenarle con diabólicas estrategias (Foto: FIFA)
  • KARATE GAUCHO. Jonás Gutiérrez utiliza niponas maniobras para frenar al capitán venezolano. El jugador del Mallorca se proyectó con peligro (Foto: FIFA)
  • TUVO UNA Y MARCÓ OTRA. En el primer tiempo tuvo una clara. Pero el gol de Agüero llegó en el complemento (Foto: FIFA)
  • EL TEMA ES QUE NO PASE. Los venenezolanos usaron cualquier forma de marca para frenar a los argentinos. Rodríguez, con concentración, pudo eludirlas (Foto: FIFA)

    ¿Román? No, Verón

    Y Maradona no debe preocuparse. Las individualidades bastaron para tranquilizarlo hasta de sus problemas económicos. Con el ingreso de la ‘Brujita’ pudo disfrutar de 20 minutos totalmente dominadores. Está bien que el volante de Estudiantes sea solo una pieza de recambio pese a ser, acaso, actualmente el mejor jugador de las ligas de Sudamérica. Pero, las tácticas para Maradona pueden rotar sin dejar los lujos. Los olés pueden seguir escuchándose como en la tarde bonaerense en el Monumental.

    Aceptable performance

    El aficionado peruano puede quedarse contento con la actuación de sus representantes en el arbitraje. Víctor Hugo Rivera fue preciso en sus cobros aunque quizá un poco dócil en las amonestaciones. El primer gol se presumió de polémico, pero fue legítimamente válido. Junto al cuarteto nacional, Rivera sí que puede quedarse tranquilo aunque seguramente haya extrañado los insultos que erróneamente recibe en el campeonato local. Al igual que el último clásico. Vale un Perú.

    Fotos: FIFA.com / AFP

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