El señor Oviedo fue al banco...
... Y acabó poniendo a Luis Fernando Suárez en el banco de Juan Aurich. Llega así un técnico reconocido a un equipo que busca serlo.
Justo cuando los peruanos nos enteramos que seremos últimos en las Eliminatorias Sudamericanas, llega una grata noticia: un técnico de nivel, Luis Fernando Suárez, es nombrado como nuevo entrenador del Juan Aurich. El hombre que llevara a Ecuador al Mundial 2006 y que realizara un digno papel clasificándolo a octavos de final dirigirá al equipo chiclayano por lo que resta del campeonato y el siguiente. Una buena nueva para una crisis que debe comenzar a arreglarse elevando la baja competitividad del campeonato doméstico.
Días atrás se especulaba quién podía llegar al banco del Elías Aguirre. Qué características debía tener y por ende los nombres se movían según como el sensacionalismo lo dispusiera. Que Del Solar, que Markarián, que Ospina, que Pelusso, que Navarro se arrepentía y volvería como si no hubiera pasado nada. Nada concreto hasta la firma del colombiano y la posterior foto junto al mandamás Oviedo.
Suárez, quien sin duda tuvo su mayor éxito en la clasificación mundialista con la selección norteña también tuvo algún otro galardón como el título colombiano con Atlético Nacional en 1999. Esta era su segunda etapa en el actual club de Juan Carlos Mariño, donde había debutado como director técnico. Ha pasado por varios clubes de su país e incluso por el Aucas ecuatoriano. Como jugador, fue un aguerrido zaguero que formó parte de aquel Nacional campeón de la Copa Libertadores de 1989. Justo en el cuadro verdolaga fue su última experiencia antes de recalar en Chiclayo; renunció al cargo pues los resultados no lo acompañaban y ahora asume un nuevo reto en un club desconocido pero ante una oferta seguramente más que tentadora.
¿Cumple los requisitos?
Se decía que Aurich necesitaba un entrenador que conozca el medio. Y Suárez no lo es. Pese a tener cuatro compatriotas en su equipo -Candelo, Arzuaga, Moreno y Chará, este último lesionado-, desconoce el entorno y deberá apurarse en el aprendizaje, pues este domingo ya recibe a Sporting Cristal y no podrá perder más puntos frente a Alianza Lima por la serie ‘A’.
Por otro lado, en Chiclayo se buscaba un técnico ganador y en cierta forma Suárez puede ser considerado apto en esos términos. Aunque vale anotar que es diferente el entorno de selección que el de clubes. Su primer objetivo no será cosa fácil: campeonar es lo pretendido y el nuevo técnico aurichista deberá traducir sus dotes ganadoras lo más rápidamente posible para que el 'Ciclón' sople de acuerdo con su estilo.
Precisamente, el estilo de Suárez es el de una tendencia conocida en el fútbol cafetero. Es un reconocido integrante de la llamada ‘Rosca Paisa’, escuela de entrenadores iniciada por Luis Alfonso Marroquín y principalmente representada en el mundo por Francisco Maturana y Hernán Darío Gómez. Luis Fernando Suárez es un aplicado alumno de ambos; el asistente del asistente. Aunque se trata de la versión corregida: tiene buena capacidad dialéctica, pero no cae en el verso verborrágico del 'Pacho'; es carismático, pero no cae en los gestos y poses folclóricos del 'Bolillo'.
En Colombia, se dice que la ‘Rosca Paisa’ se caracteriza por ser un fútbol sin riesgos. Como es harto conocido, es una escuela que juega con un clásico 4-cuadrado-2, muy diferente del sistema que Aurich usaba hasta antes de la renuncia de Navarro. Es un fútbol más tradicionalista, ordenado y sistemático. Y por cierto, más técnico que improvisador, por lo que a veces puede pecar de falta de talento si los volantes creativos no están con las luces prendidas -más o menos lo que le ocurría por años a Colombia si Rincón o Valderrama, los dos que cerraban el cuadrado, no estaban en su día-.
Esta táctica, a primera impresión, afectaría sin lugar a dudas al juego del referente del ‘Ciclón’, Mayer Candelo, pues su puesto de ‘10’ único se relegaría a un juego más abierto, compartiendo esa función con algún otro volante. Aunque es indiscutible la experiencia de Candelo en la selección cafetera con entrenadores de este estilo, sí será imprescindible encontrarle un socio adecuado que lea de la misma forma el nuevo sistema. Punto clave para el nuevo Aurich. Lesionado Chará, quién sabe si podría ser la oportunidad de probar nuevos elementos postergados en la banca como el ‘Cabezón’ Mendoza o el mismo juvenil Luis Advíncula.
Foto: eltiempo.com.co
Mostrar/Ocultar comentarios
