Huancayo - Áncash: Cumpliendo las amenazas
La frecuencia: CMD
José Carlos Armendáriz y Roberto 'Titín' Drago llevaron adelante la transmisión de un encuentro en el que la emoción estuvo presente de principio a fin. Ambos supieron mantener el ritmo acorde a lo que se vio en el terreno de juego, con 'Titín' siempre atento a detallar las no pocas circunstancias que se presentaron. El único detalle que se podría mejorar es la velocidad al momento de los gráficos con las alineaciones, donde la premura por arrancar el partido pudo evitar que más de uno no aprecie correctamente a todos los jugadores.
La pizarra: Entre la fe y la convicción
El 4-4-2 de Roberto Mosquera es prácticamente una religión en sus equipos, y en el Huancayo ello no varia. Con Johan Sotil en la volante e Irven Ávila en el ataque como puntos fuertes, su ofensiva gozó de múltiples formas para generar peligro, pero la falta de precisión y algo de mala suerte chocaron contra sus intereses. En defensa, el sector derecho fue el más vulnerable, con un Anier Figueroa algo desmedido al momento de sus intervenciones, lo que provocó la necesidad de ser cubierto varias veces por Rafael Farfán cuando fue superado. En Sport Áncash, su técnico Francisco Melgar se decidió por priorizar la cobertura defensiva con un 4-3-1-2, ya que a la línea posterior le sumó tres volantes mixtos por delante de su posición, aunque con Einer Vásquez asumiendo funciones más ofensivas por izquierda cuando el trámite se lo permitía. Para atacar, su tándem estelar volvió a dar muestras de su buen momento, con un Juan Carrillo que deambuló por toda la volante, dándose maña para sembrar zozobra a la defensa local, y con Fabricio Lenci metido como cuña en el área, además de darse tiempo para apoyar a sus compañeros cuando pudo.
Los cambiazos: Parchando los baches
Con la baja por expulsión sufrida en el último minuto del primer tiempo, Mosquera se vio obligado a realizar dos variantes en la complementaria para reordenar a su equipo. Frank Vega entró para cubrir el vacio dejado por Marcos Delgado, pasando a jugar desde ese momento con tres al fondo, ya que Saúl Giral dejó su lugar a Deyair Reyes en busca de equilibrar los ataques de su equipo por ambas bandas. Por la visita, la inoperancia ofensiva de Natalio Portillo trató de ser solucionada con el ingreso de Diego Silva, pero este se hizo expulsar irresponsablemente cuando fue a disputar un balón con la plancha en alto.
El capo: Juan Carrillo
El 'Drogba de los Andes' le rindió esta tarde honores al '10' que lleva en la camiseta, convirtiéndose en el absoluto conductor de su equipo, además de asumir la responsabilidad en cada balón parado que tuvieron a favor. Si bien el Áncash solo convirtió una de las ocasiones con las que contó, Carrillo fue el artífice de ella, con una jugada digna de un gran marco, además de estrellar un tiro libre en el palo.
El extraviado: Diego Silva
Ingresó para solucionar un problema, pero acabó creando uno mucho mayor. No merecen mayores palabras su labor en el campo dados los escasos segundos que estuvo en el.
Jailaits
Pagando la entrada: El estadio de Huancayo no tuvo un gran marco de espectadores, pero los que fueron se encontraron un partido lleno de emociones desde el arranque. De ellas se encargó enteramente el conjunto local en el inicio, aprovechando la buena pegada de sus volantes ofensivos, como que dos de sus disparos reventaron los palos. Sin embargo, solo un penal de Irven Ávila, a los 32', pudo forzar la resistencia ancashina.
Respondiendo la agresión: En el inicio del segundo tiempo, se pudo notar una mejor predisposición para atacar del Sport Áncash, tratando de aprovechar el hombre de más con que contaban, pero la falta de puntería fue su aliado menos deseado, por lo que una acción individual fue la única solución que encontraron para calmar parcialmente la sed de desquite que tenían tras el gol recibido por Einer Vásquez, a los 69'. Con Lenci y Carrillo brillando en buen nivel, todo empezó a ponerse cuesta arriba para los locales.
El fruto de la esperanza: En Sport Huancayo el empate fue un duro golpe al cual supieron responder con lo mejor que tienen en su juego. Desde entonces, Sotil y Ávila se juntaron más que nunca, aprovechando el primero los desbordes y diagonales del segundo para colocarle buenos pases, hasta que sus acciones encontraron recompensa cuando todo parecía más difícil que nunca: un nuevo disparo desde los doce pasos, ejecutado por Ávila, sentencieron en 2-1 definitivo en los 90'. Al final, los penales decidieron al inevitable único ganador pero, por lo mostrado hoy, ambos merecieron llegar a la busqueda del título el Intermedio.
Fotos: diario Primicia de Huancayo