Minero - Gálvez: Minas en el camino
Para el individual: Cocodrilo Gandi
En un encuentro en el cual las pocas individualidades salieron a relucir, era definitivo que las zagas iban a tener un encuentro sostenido y tranquilo por manejar, sobre todo por los dos tantos suscitados y algunos errores tácticos. En ese sentido, Gandi Espinoza fue uno de los que impuso mayor presencia en la defensa de Minero, mas aún evitando los embates ofensivos de Janio Posito. Asímismo, es digno de resaltar el inagotable trabajo de William Tafur por el sector izquierdo; considerando los abriles encima, corre y trajina como un juvenil.
Para el táctico: Arma que no hace daño
Robert Eneque primó el orden táctico utilizando el 4-línea-1-1, con Erick Sánchez y William Tafur por los lados, quienes entrañaron peligro cuando la posibilidad se les hacía presente -que en realidad no fueron muchas-. Además, contaron con un aporte extra en ese sector: Ángel Muchotrigo, quizás con mas vocación de contención en esa línea de mediocampistas, quien tuvo una regular labor. En la segunda mitad, los ingresos en Minero no fueron efectivos en el trámite, con Orozco que ni bien ingresó tuvo que salir, con Vílchez pujante aunque impreciso, y con el estadounidense Balla que estuvo desacertado. Mientras tanto, Rafael Castillo debió hacer de tripas corazón, pues con las bajas que ostentaba su plantel tuvo que hacer algunos movimientos hombre por hombre dentro del habitual 4-cuadrado-2, como la inclusión de Erick Torres como zaguero central junto a Cabada, o la de César Medina fungiendo de lateral derecho cuando Renzo Guevara tuvo que salir lesionado para darle el ingreso a Álex Magallanes. Dicho sea de paso, el ingreso del 'Maga' fue hartamente cuestionable, puesto que en el banco tenía a Juan Zevallos, quien claramente posee mejores condiciones para asumir ese rol.
Para el emotivo: Les hizo daño la altura
Los primeros minutos fueron de evidente estudio, con un Gálvez tratando de inquietar por el medio sector, siempre resguardando el sector defensivo, punto en el que Minero fue mejor presentado, con una zaga apropiada para un encuentro que -se supone- debió tener al elenco chimbotano como protagonista. No obstante, una jugada que inicio Mayme y que desembocó en Posito, fue bien interceptado por el paraguayo Garcete, quien batió las redes de Coronado a los 22'. Sin embargo, sobre los 34', una impresionante corrida de Nima por izquierda y el futuro remate ante la floja reacción de Hernández se convirtió en el 1-1 definitivo. Los dos tantos, pues, fueron lo más rescatable del partido. A poco del final, la emoción pudo notarse en el Municipal de Matucana, cuando ambos elencos -sacando fuerzas de flaqueza- llegaban hacia las área rivales, aunque con poca fortuna en la definición.
Para el estadístico: No hay segunda, sin primera
Vale recordar que, antes del duelo entre ambos por la segunda fecha, que culminó con victoria chimbotana por 2-0, la última vez que se encontraron de manera oficial fue en el Clausura 2008. En esos únicos cuatro enfrentamientos que tuvieron en la máxima categoría, Minero consiguió dos triunfos (ambos de local por 2-1), Gálvez consiguió uno (por la mínima diferencia) y una igualdad a cero. En esta ocasión, su reencuentro fue un soso empate.
Para el anecdótico: Cambio de lana
Una curiosidad jocosa en el encuentro se dio cuando Luis Cordero ingresó por Javier Carnero, asumiendo que ambos apellidos en la fauna son ovinos. Por otra parte, para quien escribe fue una experiencia agotadora la de narrar las incidencias del partido en Matucana, con los inconvenientes climáticos -asimilables- de los mas de 2000 msnm y, claro, con algunos problemas de ubicación dadas las condiciones del escenario. Sin embargo, fue un placer asumir dicha faena.
Fotos: José Salcedo / DeChalaca.com