Serrato Pacasmayo - Loreto: Te regalo mi desorden
El duelo de coleros fue desigual desde el saque: Serrato Pacasmayo presentó solo diez jugadores... ¡y un suplente! Loreto aprovechó el delirante obsequio y le endilgó un 1-4 que permite al 'Decano' ucayalino respirar en su lucha por zafar de una baja a la que su rival parece condenado.
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Larry Jalk | @LarryJalk Redactor |
¿Era posible esperar otro resultado a pesar de tratarse de un duelo de coleros o el desequilibrio a favor de Loreto era demasiado marcado de antemano?
Desde el pitazo inicial, el cuadro visitante era indiscutiblemente superior a Serrato Pacasmayo. ¿Por qué? Pues por el mero hecho de que los locales alinearon con diez hombres; y en un hecho que desafía los límites de la alucinación, el DT ecuatoriano Ramón Castro guardó al venezolano Dionni López entre los suplentes. Impresionante.
El voluntariamente forzado desequlibrio numérico se corrigió a los 38', cuando Jhayro Barrera salió expulsado por reclamos airados, pero ni así tuvo chance Serrato de evitar su debacle. Los testigos de dudoso privilegio fueron los casi 50 personas que se dieron cita en el Municipal de Pacasmayo para ser testigos de un partido con olor a descenso. Era clave: lo entendió así Sport Loreto y por eso lo ganó.
Con un Johan Sotil enchufado desde el pitazo inicial, la visita empezó a tomar el protagonismo de juego. Carlos Barrena fue el principal socio del 'Cholito' para mover los hilos del ataque ucayalino. Así, antes de la media hora, Manuel Olaya recibió una falta apenas afuera del área del arco de Ángelo Vega, y el encargado para ejecutar ese disparo fue Sotil. El '99' de Loreto le pegó con la calidad de sus mejores tiempos y regaló un golazo. El balón fue al palo izquierdo de Vega, que por más que se estiró en su intento de despejar el balón, jamás llegó.
Luego se produjo la comentada expulsión de Barrera, quien fue a sentarse en las gradas de la tribuna de la losa depotiva que está al costado del campo de juego. Por más que el personal de seguridad le explicó que no debía estar en ese lugar, no lo entendió hasta que acabó el primer tiempo, cuando por fin se marchó con sus compañeros a vestuarios. En cancha, ellos no se habían dado por enterados: Barrena ya había desbordado por la banda derecha y sacado un centro al área para que Juerguen Rodríguez, de derechazo frontal, marcara el segundo tanto.
La superioridad de Loreto se mantuvo en la segunda mitad, y Barrena lo ratificó con el tercer tanto en el arco de Vega, a pase de Sotil. Con tres goles abajo, llegó el momento en que Serrato superó su propia capacidad de asombro negativo: ingresó al fin Dionni López, pero no lo hizo para completar el equipo sino por Christian Polo. Se escucharon en ese momento algunas risas en las gradas; a la gente poco le importó que el técnico Castro estuviera también en las tribunas.
La mayor capacidad de vergüenza deportiva en ese incómodo momento la tuvo -una vez más- Álvaro Bely. El argentino, que es zaguero central pero ante las urgencias de Serrato habitualmente juega como lateral derecho, se había colocado esta vez por la banda izquierda; por allí eliminó a tres rivales para sacar el centro que permitió a Edson Barrientos marcar el descuento de cabeza. Pero no sirvió mucho: minutos después, otra gran jugada individual de Sotil por la banda derecha terminó en el cuarto tanto loretano por obra de Jhonny Olórtegui, quien sentenció el partido y le dio a Loreto ese respiro en la lucha por rehuir el descenso que en el caso de Serrato cada vez se parece más a un respirador artificial.
Fotos: Larry Jalk / DeChalaca.com
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La ficha del Serrato Pacasmayo 1 - Loreto 4
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