Alianza - Real Garcilaso: Por terco y marabunta
Alianza apeló una vez más a puro centros y así, a lo seductor necio, le ganó a un equipo alterno de Real Garcilaso impecable en lo defensivo. Un error de Pretel a 13 minutos del final permitió que un tiro libre -centro- de Trujillo se colara para el 1-0.
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Hay varias formas de llegar a un objetivo y una de esas es terquear. Ganar por cansancio, por demolición; por insistencia hasta que lo que quieres se produzca. Así es Alianza 2014: como aquel chico enamorado que solamente ve a una misma chica como la destinataria de sus halagos. Repetidos, monótonos: todos convergentes al centro y apostando a que una colita como la de Guevgeozián resulte oportunamente seductora y haga el trámite. Sustentados, además, en pura teoría: la pizarrita de Sanguinetti, metódica, estudiosa, atípica para Matute -aunque no por eso inadecuada, sino a lo mejor todo lo aplaudible del caso- dicta órdenes hasta para Ponce o Kahn, los más irreverentes del asunto y acostumbrados a definir la noche en un rapto de inspiración o indisciplina -de la táctica, entiéndase-.
Al frente, la chica más necia del torneo: la que viene del Cusco, viste de celeste y siempre dice que no. Por eso, Real Garcilaso es antipático: porque cuida hasta el extremo, con ideas demasiado conservadoras para estos liberales tiempos de desenfreno y barcelonismo, que le hagan gol. Sea con 'Petróleo' en el banco o con 'Puchito' Flores por accidente como esta noche sabatina, esa cusqueña que dice ser una 'Máquina' no suelta nada, así cambie todo el repertorio por una noche. Te tiro un centro, te respondo con un no: lo repite cual estribillo Lojas en todos sus rechazos, y si alguno se ilusiona haciendo el amague de meter la cabeza, Pretel mete las manos y te recuerda la negativa. Te engatusa con novatos de esos con los que crees la harás facilita, como Altamirano -muy interesante despliegue- y Holgado al medio. O uno debutante pero nada joven como Chávez, que remite a esos chascos de cuando preguntas la edad y te das cuenta de que es mayor.
Así las cosas, el marcador en blanco era lo previsto para el estelar del sábado. La de celeste se daba el lujo hasta de mandar piropos con un emisario de esos que dizque no te puedes tomar en serio como Baylón, pero que cuando lo sueltan te perturban, como hizo Jahirsino con sus dos disparos a boca de jarro ante Forsyth, que encima andaba vestido de amarillo patito con sponsor cual envoltura de six pack. Con Costa y Landauri taponeados por el doble lateral colocado por 'Puchito', ni siquiera había forma de llegar a lanzar la indirecta, ni por el costadito.
Hasta que llegó la chance. No de frente: por un lado. A manera de centro, ese mecanismo de seducción que es el único que tiene este equipo victoriano que pretende lucir como uruguayo. Y lo ejecutó un especialista en disparar de frente pero que esta vez lanzó el pase: Trujillo. Y como dicta la teoría, ella siempre podrá tener un momento de debilidad: las manos de Pretel cedieron perplejas ante la barba de Gonzales Vigil y allí, sin que el 'Lobo' la tocara, pasó recto el remate de 'Talara'. Solo por eso ganó Alianza: más que por casualidad, por pura terquedad de una noche sabatina de verano.
Fotos: Luis Chacón / DeChalaca.com
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