• EL CAPO. José Mesarina hizo las dos asistencias que terminaron en goles de Marco Ruíz y Carlos Barrena. (Foto: Diario de Chimbote)
  • LA CLAVE. Marco Ruíz aseguró el marcador con un cabezazo. El gol llegó en el momento más flojo de Gálvez. (Foto: Diario de Chimbote)
  • LA JOYITA. Un potente remate de Osnar Noronha al segundo palo de Jesús Cisneros marcaba el inicio de la victoria para Gálvez. (Foto: Diario de Chimbote)
  • LA cALAMIDAD. Ni chicha ni limonada. Cristian García anduvo flojo en la marca e intrascendente en ataque. (Foto: Diario de Chimbote)
  • EL DUELO. César Medina tuvo hasta dos ocasiones para anotar, pero Jesús Cisneros evitó el grito de gol. (Foto: Diario de Chimbote)
  • KAZUKI ITO. Víctor Hugo Carrillo no tuvo inconvenientes para controlar el juego en el Manuel Rivera Sánchez. (Foto: Diario de Chimbote)

El capo: José José

Partido de rendimientos equilibrados en lo que a los locales se refiere: nunca pisaron el acelerador para vencer a un desganado Cienciano, que poco demostró en Chimbote. Entre los destacados, el nombre de José Mesarina se hace presente por ser partícipe en las jugadas que acabarían en celebración de las tribunas del Manuel Rivera Sánchez: el lateral volante del equipo de la ciudad del acero obtuvo la calificación más alta del encuentro, compartida con Marco Ruíz y Daniel Reyes. El ‘24’ del equipo chimbotano se lució con un centro preciso que alcanzaría la cabeza de ‘Chemo’ para el tanto de la tranquilidad, mientras que en la primera jugada de gol ensayó un pase en profundidad que fue recibido por Carlos Barrena, quien asistiría a Noronha para que el ex CNI pusiera el primer grito de gol.

La clave: Para la calma

Simple: Gálvez no pisaba el acelerador, mientras Cienciano andaba a pedales aceitados. Las cosas ya estaban cuesta abajo para los incaicos al inicio de la segunda mitad, pues los locales estaban arriba en el marcador. Los jugadores con franja en el pecho necesitaban asegurar el marcador y llegó un cabezazo de Marco Ruiz a los 50’ para cerrar el partido desde temprano.

La joyita: Se hace costumbre

Osnar Noronha volvió a anotar y de manera magistral: como en Huancayo, el ‘23’ le pegó con decisión y potencia cuando corrían 27’ al pobre balón, que mientras chillaba de dolor por el potentísimo remate se colaba en el segundo palo de Jesús Cisneros para decretarse el primero del encuentro.

El tapadón: También se hace costumbre

Daniel Reyes es uno de los artífices de los grandes resultados que saca Gálvez. Hoy también pudo colaborar en la victoria de su equipo, que disfrutó de las acostumbradas atajadas felinas de la ‘Pantera’. Sin embargo, a los 75’ hubo una que resaltar: Juan Cominges le pegó de larga distancia, ante lo que Reyes saltó y, en vez de despejar el balón, atrapó la redonda en el aire. Tapadón.

La calamidad: Figurita que no pega

Cristian García no defendió ni se proyectó. El lateral del equipo rojo del Cusco estuvo apático en el juego, un tanto lento y con una pasividad inigualable en la marca. La 'Figura' todavía viene buscando a Barrena y compañía, quienes hicieron añicos su cintura.

El cambiazo: Más tiempo

Labor sacrificada la de Marlon García, quien ingresó en la segunda mitad para hacer las veces de volante. Sin embargo, el ‘14’ imperial tenía que bajar para participar en la marca por el cambio táctico que realizó Raúl Arias tras sacar del campo a Cristian García: los cusqueños emularon a los locales y jugaron con una línea de tres al fondo los restantes 74’, con lo que desguarnecieron los laterales. José Luis Núñez podía hacer lo propio por el sector derecho, pero el ‘Presidente’ tenía que correr metros de más, no por orden del comando técnico sino para apoyar a su equipo en la marca.

El duelo: No es un cisne

Jesús Cisneros le ahogó el grito de gol en dos ocasiones a César Medina. El joven volante también tuvo lo suyo, pero no pudo vulnerar la puerta imperial, ya que sus tiros chocaron en los tubos, paradójicamente, también en dos oportunidades. Hasta la salida del ‘10’, el cancerbero rojo le ganó el duelo al joven ídolo del pueblo de Chimbote, pero no tuvo la misma suerte con los otros compañeros de Medina.

Kazuki Ito: Poco trabajo

No se exigió cuantiosas veces al de negro. Junior Castrillón, volante mixto de Cienciano, fue el único dolor de cabeza para la terna de Víctor Hugo Carrillo; sin embargo, el juez supo controlar la euforia contenida del jugador que se desquitaba con las piernas que pasaban. Lo amonestó, primero, verbalmente, y luego, tras hacer caso omiso a su advertencia, le enseñó la tarjeta amarilla.

Fotos: Diario de Chimbote

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