Pescador de la suerte
No juega bien ni suele ser superior a sus rivales, pero Cristal ya logró su tercer triunfo en el Apertura, el segundo como visitante. Dos errores del árbitro fueron decisivos para que le volteara el partido 1-2 a José Gálvez en Chimbote. La fortuna, tan esquiva en todo 2007, empieza a sonreírle a los rimenses. Los locales, por su parte, siguen en deuda con su afición.
Polémicas: Triunfo con Gambetta
¿Cuándo le había volteado Cristal un partido a Gálvez en Chimbote?
Fotos: Diario de Chimbote
Para ganarse la lotería, hay que jugarla. Y aunque Cristal no invierte mucho, le alcanza para que la suerte se ponga casi siempre de su lado. A veces, como la tarde de hoy, el azar proviene de fuentes insospechadas, como el árbitro Henry Gambetta. Un penal errado por los galvistas que debió repetirse y un gol a favor en evidente posición adelantada fueron instantes claves en un partido que los rimenses sacaron adelante casi sin saber cómo.
PESCADO A LA MEZA
No es exageración decir que los primeros 44 minutos fueron plenamente omitibles. Como para lamentar haber ido al estadio o acudido a la TV sacrificando una tarde de playa. El encuentro era un monumento al desacierto: pases fallidos, centros cortados, proyecciones innecesarias.
A los 40 recién llegó la primera de riesgo: una
media vuelta de Meza-Cuadra que el debutante Manuel Heredia resolvió con
acierto. Cinco minutos después, sin embargo, el delantero tuvo su revancha.
Magallanes lanzó un perfecto pase por derecha, Meza-Cuadra le ganó en pique a
Christian Ramos, cruzó un zapatazo y Gálvez abrió la cuenta en un partido que
merecía un rotundo cero.
CAMBIO DE CARNADA
Cristal parecía liquidado cuando, a tres minutos del reinicio, Pinza Hernández empujó en el área a Juan Carlos Portilla y Gambetta decretó penal. Sin embargo, Heredia se convirtió en héroe de la jornada y atajó el disparo de Diego Martínez. Después llegó la primera gran polémica del partido: tan polémica, que debe analizarse en una nota aparte.
Los celestes no habían generado una sola oportunidad de gol: un planteamiento excesivamente defensivo, con un solo delantero (Ximénez), había neutralizado cualquier posibilidad de avance -el ingreso de Paul Cominges ayudó, pese a su deficiente actuación, a mejorar el volumen ofensivo celeste-.
Gálvez tampoco
había merecido mucho más y, ciertamente, un 2-0 habría resultado demasiado
premio para el local. Pero el empate llegó en el momento más insospechado. A
los 55,
Sheput cobró un tiro libre desde la derecha, pivoteó Villalta y, en una jugada
muy parecida al gol de la semana pasada a San Martín, el uruguayo Ximénez, esta
vez poniendo la pierna por delante, venció sin discusión al arquero Fernández.
El partido se animó y ambos arqueros tuvieron intervenciones de mérito. Faltaban cinco minutos y el 1-1 parecía lo más justo y diplomático. Sin embargo, llegó el segundo error grave de la terna. Lobatón lanzó un pelotazo largo, el Chorri pivoteó (véase cómo esta jugada le está rindiendo frutos al equipo de Oblitas) y Christian Ramos apareció, en evidente off-side, para decretar de cabeza el triunfo.
Como en Trujillo hace 10 días, los bajopontinos se llevaron tres puntos inesperados casi al final. Su defensa casi se infarta cuando Ángelo Cruzado perdió dos claras ocasiones en los descuentos. Pero la suerte ha vuelto a hermanársele. En Cristal, al menos por ahora, hay buena marea.
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