Dos chapines adoptivos
De la gran cantidad de futbolistas argentinos que jugaron en el Perú, por coincidencia dos regresan juntos a Lima con una selección nacional. Iván Sopegno y Rubén González trabajan desde 2014 como DT y asistente de Guatemala, respectivamente.
Los que pasan los 30 años deben recordar a dos argentinos que jugaron en el fútbol peruano en los años noventa. Los dos, veinticuatro años después, integran, por coincidencia, el comando técnico de la remozada y emergente selección de Guatemala. Iván Franco Sopegno, exarquero (Rosario, 25 de setiembre de 1963), y Rubén Edgardo González, exdelantero (Buenos Aires, 3 de mayo de 1968), dejaron su tierra natal para seguir sus carreras en el Perú, cuyo campeonato nacional en ese entonces aún estaba dividido en los inexplicables Regionales.
De la 'Academia' a la 'Azul y Blanco'
Sopegno, quien llegó a debutar en Primera División argentina con Rosario Central, era arquero del Cipolletti de Río Negro cuando en 1989 el empresario uruguayo Sergio Missaglia le propuso jugar en Cienciano. Llegó al 'Papá' para jugar el Torneo Plácido Galindo, como alternativa al habitual titular Félix Uscamayta. Con el cuadro rojo, ganó su grupo en el Plácido Galindo y luego jugó cuartos de final contra Universitario, llave en la que su desempeño llamó la atención de los dirigentes de Deportivo Municipal.
Así, luego de quedar en el tercer lugar con Cienciano en el II Regional 1989, volvió a su país y solo regresó al Perú en julio de 1990 para enrolarse a filas ediles. En ellas coincidió con sus compatriotas Horacio 'La Pepa' Baldessari, Oscar Bianco y Mario Aimetta. En aquella ocasión, 'Muni' empezó la temporada con Juan José Tan como DT (I Regional) y la acabó con Ramón Quiroga (II Regional).
Sopegno, quien peleaba el puesto en la 'Academia' con el veterano David 'Chicho' Espinoza y el joven Enrique Vega Centeno, llegó a jugar al lado del desaparecido César 'El Ratón' Rodríguez, Julio Jiménez, Richard Garrido, los hermanos José y Jorge Soto, Marco y Lino Morán, el 'Gato' César Espino, Carlos Guillén, Máximo Alfaro y Wilfredo Quevedo, entre otros. En el arco edil, Sopegno llegó a registrar 3 presencias en el I Regional y 16 en el II Regional, en el que se consolidó como titular.
Luego de su experiencia en Cienciano y Municipal, Sopegno jugó tres años más en Guatemala y uno en Argentina, donde se retiró en Argentino de Rosario. Se graduó como técnico y regresó a Centroamérica, donde fue cinco veces campeón con Comunicaciones de Guatemala. Fue, posteriormente, seleccionador Sub-20 de ese país y desde este año es seleccionador absoluto.
Rubicundamente canario
Por su parte, Rubén González se instaló en Lima en noviembre de 1990 para defender a San Agustín, que estaba al mando de Roberto Chale. González empezó en Platense y dejó años después el Estudiantes de Río Cuarto para volverse santo esa temporada. Llegó al lado de sus compatriotas Jorge Ceballos (defensa) y Néstor 'Negro' Cáceres (delantero) González marcó 3 veces en 8 encuentros en el II Regional 1990. En la siguiente temporada, en 1991, el rubio atacante acumuló con camiseta santa, según los datos que DeChalaca tiene disponibles, 3 goles en el I Metropolitano y 6 en el II Metropolitano.
En 1992, González sumó 5 goles más con San Agustín, pero no culminó la temporada: en noviembre se enroló en Del Monte de Guatemala. Acabó radicando en ese país centroamericano hasta convertirse en el preparador físico de la selección de fútbol por recomendación de Sopegno, al que había conocido en Lima. González, a quien le decían 'Cara Sucia' en Guatemala, trabajó como preparador físico en Amatitlán, Municipal y Petapa, experiencia que le sirvió para ser considerado en la Federación de ese país tiempo después.
Además, González destacó como delantero en Deportivo Municipal de Guatemala, con el que salió campeón en 1993/94. Pasó luego por Sacachispas, Escuintla y Cobán Imperial; con este último ascendió a la Liga Nacional de Primera División. También miltó en el Sanarate, en el que fue dirigido por Sopegno, y en 2001 se retiró oficialmente con camiseta del Chimaltenango.
El ex atacante santo tenía claro cuando estaba en actividad que no iba a ser entrenador tras el retiro. Por eso estudió en la Universidad de San Carlos para ser preparador físico, labor que cumple hasta hoy, cuando ya no peina la cabellera larga que lo caracterizó sino más bien luce un look rapado.
Aquí no chocaron
Hincha de Los Ándes en su adolescencia, González sufría con los goles que le anotaban a Sopegno, arquero justamente de ese club. Se conocieron luego en Lima, pero no llegaron a enfrentarse en el torneo local. La única oportunidad podría haberse dado el 25 de noviembre de 1990, cuando en el Nacional se enfrentaron San Agustín y Municipal e igualaron 0-0: González pilotó el ataque de los de San Isidro, pero 'Kike' Vega Centeno jugó por Sopegno en la 'Academia', puesto que el golero argentino se había lesionado.
Así, el reencuentro de ambos se dio en Guatemala, donde -como ya se dijo- Sopegno llegó a ser DT de González y luego lo enroló como preparador físico. El Perú, ahora, los recibe como a huéspedes pródigos.
Composición fotográfica: Aldo Ramírez / DeChalaca.com
Recortes: diario La Crónica, revista Estadio, suplemento Deporte Total, diario El Comercio
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Actualidad del fútbol en Guatemala
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Debut: 9/11/1983 v. Temperley 1-2
Metropolitano 1983, 4 partidos.