Localía de Chile en Eliminatorias: Cuestión de límites

![]() |
Roberto Gando | @Roberto_Gando Editor |
Nadie busca cerrar un estadio de fútbol, pero a veces se presentan situaciones que tornan inevitable tomar tal decisión. En el caso de Chile, que su afición reincida en actos discriminatorios le puede costar una dura sanción por parte de la FIFA. Ya en marzo de 2016 sufrió una multa de 70,000 francos suizos por cánticos de ese tipo, situación que se agravó en mayo al ser inhabilitado el Nacional de Santiago luego que el 24 de marzo recibió a la selección argentina.
En aquel momento, el ente rector fue claro al advertir que la pena se podría ampliar si es que sus hinchas repetían tal actitud, que fue lo que terminó pasando el último martes 9 de setiembre, cuando por las Eliminatorias jugó con Bolivia en el estadio Monumental.
Apelando al sentido
En los últimos años, la FIFA ha sido severa con todo acto de discriminación o de conducta antideportiva dentro de los torneos que cuentan con su aval. A Perú, por ejemplo, ya le tocó jugar de local sin público en 2013 luego de los incidentes tras el partido de clasificación ante Uruguay -con intento de agresión sobre el árbitro Patricio Loustau-.
Si bien en muchos otros casos solo se aplicó una sanción económica, la reincidencia implica aventurar una pena mayor, y en el caso específico chileno, ello deriva en anticipar que el 11 de octubre podría no ser local en su capital al recibir a la selección peruana.
Ya en mayo se había planteado tal situación, cuando en los medios de Chile se especuló con las opciones a tomar luego que se confirmó la inhabilitación del estadio Nacional santiagueño. La primera fue la de Concepción, ciudad portuaria que se ubica al centro de su territorio y que regenta el estadio Municipal, con capacidad para 30,000 espectadores. Dicho escenario, sin embargo, se descartó por su escaso aforo, ello pese a que en 2015 se remodeló como sede de la Copa América.
Ahí Perú enfrentó a Paraguay en el partido que definió el tercer puesto, además de albergar encuentros del Mundial Sub-17 que se desarrolló ese mismo año.
Reencuentros conocidos
La segunda opción que aún no se puede descartar, es la de cruzar la cordillera para jugar en el estadio Malvinas Argentinas de Mendoza, que cuenta con un aforo de 40,000 personas. Tal posibilidad, aunque pueda sonar descabellada, no sería nueva para Chile, pues en 1989 ya fue local en territorio argentino.
Ese año, la FIFA conminó a la selección sureña a ser local en dicha ciudad, pues cuando el 13 de agosto recibió a Brasil por las Eliminatorias, en el estadio Nacional se registraron incidentes violentos por parte de su afición. Fue así que catorce días después jugó ante Venezuela fuera de su país, sacando un resultado más que satisfactorio, pues en la cancha goleó 5-0 con un triplete de Juan Carlos Letelier, además de un gol de Patricio Yáñez y otro de Jaime Vera.
Para Perú tampoco resulta ser un escenario extraño, pues en la Copa América de 2011 enfrentó a México y al mismo Chile, que contó con un gran apoyo en las tribunas, pues en Mendoza reside una ferviente comunidad de chilenos y cruzar desde Santiago por tierra toma no más de cuatro horas. Mucho antes, incluso, cuando la blanquirroja disputó el Mundial de 1978, jugó ahí frente a Holanda, Brasil y Polonia.
A un mes de volver a jugar las Eliminatorias, la disputa ya comienza fuera de las canchas, pues Bolivia presentó un reclamo formal ante la FIFA, que será la que decida qué plan de acción tomar en adelante tanto para la selección chilena como para la peruana.
Composición fotográfica: Roberto Gando / DeChalaca.com
Foto: emol.com; Recorte: AS Chile

¿Es decir, el vacilón que es ir al estadio a gritar queda de lado ?
Recuerden cuando vino la seleccion Argentina y le gritaban "cachudo" a Caniggia. ¿Qué se va volver todo esto? ¿Un teatro?