Mientras Del Solar recibe los primeros elogios de su ciclo por la anulación a Riquelme y Messi, un análisis en frío lo juzga culpable de un pecado táctico mucho más grave: no haber sabido leer los movimientos del partido y, por ello, puesto en riesgo el resultado. 

Fotos: ANDINA

Del Solar ahora no está en la picota, pese a que haya cometido un error aún más básico que los cometidos en otros partidos (Foto: ANDINA)A nadie sorprende que la cultura del aficionado y la prensa sea resultadista. Empató Perú en el último minuto, entonces el DT no lo hizo tan mal. No brillaron Riquelme y Messi, entonces es mérito del planteamiento peruano. Y no es solo un tema local, porque hasta los mismos diarios argentinos, en sus versiones electrónicas, ya hablan de un cerrojo peruano muy bien planteado que tapó los circuitos de la albiceleste.

La lectura desapasionada del encuentro permite caer en la cuenta de que José del Solar cometió un pecado táctico tanto o más grande que los cometidos en partidos anteriores, y que posiblemente se haya terminado maquillando i) gracias a la extraordinaria jugada de Vargas o ii) debido a que Basile fue, posiblemente, un pecador mucho más grande luego de no haberle encontrado la vuelta a la temprana salida de Gutiérrez por lesión.


La pregunta del millón: ¿qué hacía Alva jugando por izquierda? (Foto: ANDINA)'ZORRITO' DESUBICADO

Al 'Coco' le quedó un forado en la defensa que no tuvo mejor forma de suplir que revirtiendo su línea de tres en el fondo en una convencional de cuatro, y su mejor idea fue enviar a un zaguero central neto como el 'Cata' Díaz al lado izquierdo. En la pichanga, en el partido de Winning o el yan-ken-po, eso significa que el equipo rival tiene opciones inmejorables de concentrar el juego por esa banda, para aprovechar la inexperiencia del que ocupa ocasionalmente el puesto.

Para colmo, ¿qué tenía Perú en el campo? A un hombre como Piero Alva, recostado al lado izquierdo, que juega sus mejores partidos... por la derecha. El sábado ante Venezuela fue figura yendo por ese lado. En la conferencia de prensa, Del Solar dijo que Alva había partido nominalmente por izquierda pero por circunstancias de partido corrió de carril. ¿Por qué hoy, con un panorama mucho más claro para hacerlo, nunca se tiró a la derecha?

Díaz debió fungir de lateral izquierdo improvisado y ello no fue bien explotado por el ataque peruano (Foto: ANDINA) Más bien, el 'Zorrito' acabó desesperando en sus pugnas con Zanetti, con el juego excesivamente recostado hacia un costado donde Perú tenía poca salida porque Vargas estaba bastante ocupado con la marca de Messi como para generar espacios hacia la ofensiva. Se caía de maduro correr a Piero de lado, pero ello jamás ocurrió. Con Solano alejado de las épocas en que además de teledirigir el juego centelleaba por la banda, Díaz tuvo todo el espacio del caso para acomodarse tranquilo y de plácemes a la función de lateral izquierdo.


ESE CAMBIO...

Pero el desaguisado no terminó allí. Habían corrido 21' del complemento cuando Del Solar mandó al campo a Guillermo Salas en vez del sacrificado Alva, que hasta recibió algunas pifias tres días después de haber salido en olor a multitud. Cierto, el 'Chicho' tuvo una tarde apoteósica en noviembre contra Robinho. ¿Pero tenía algún tipo de sentido creer que él era la herramienta más adecuada para tapar a Messi, máxime cuando a Messi ya se lo estaba tapando bien?

Con Messi bien cubierto por la zaga liderada por Zambrano, ¿era necesario trastocar el esquema para hacer ingresar a Salas? (Foto: ANDINA) El gol argentino fue un cachetazo en ese sentido. Gago, que tiene cualquier virtud para jugar al fútbol menos la velocidad, corrió sin marca más de 10 metros por la banda izquierda peruana antes de lanzar el balón envenenado que Cambiasso mandó a la red. ¿Y dónde estaba Salas? A mitad de camino entre Gago y Cambiasso. ¿Marcando a quién? A nadie.

No se trata de ser aguafiestas ni de buscar la contra per se. Nada hay en esta página web, tampoco, en contra del técnico de la selección, al menos de modo dogmático. Posiblemente esta crítica sea incluso más fuerte que las hechas en partidos anteriores, con mucho peores resultados de por medio que un empate decente ante una de las selecciones más pintadas del mundo.

Seamos sinceros: esto es, más bien, un sacudidón para caer en la cuenta de qué se habría estado comentando a estas horas de no haber mediado en el instante final la corrida de Vargas. 

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