Perú Bizarro: Barbas partidas
Ante la falta de estadios, la Liga Distrital del Cercado de Lima y San Luis no tienen de otra más que compartir el Cuartel Barbones, que desde el año pasado funge como localía de ambos torneos.
El universo de escenarios deportivos a disposición de las ligas distritales en nuestra ciudad capital es muy bajo, y generalmente depende que las instituciones municipales tengan la amabilidad de ceder los campos -comunmente en condiciones deplorables- o, en el peor de los casos, alquilarlo a un precio módico. Como consecuencia, un singular hecho se suscita en el Campo Deportivo del Cuartel Barbones, recinto que alberga dos torneos distritales: el de Cercado de Lima y el de San Luis. Por cierto, no está de más decir que Barbones no pertenece necesariamente a uno de estos dos jurisdicciones, sino más bien al distrito de El Agustino.
Hasta el 2010, tanto el Cercado como San Luis afrontaban sus torneos ligueros en escenarios distintos; sin embargo, hechos extradeportivos tuvieron como respuesta los cambios que se detallan a continuación.
La liga decana utlizaba como localía el estadio Santa Lucía de Barrios Altos, aunque la inseguridad con la que vive la zona, y en una ocasión, el hurto de las taquillas a manos de "los que nunca faltan" obligó la búsqueda de otra alternativa. Por su parte, San Luis cuenta con un estadio municipal; sin embargo, las condiciones en las que se encontraba el campo, además de la poca disposición que tiene el ente gubernamental para que se cedido, hicieron que sea difícil el acuerdo.
La vista se posó en el Cuartel Barbones -la que cuenta con tres campos, aunque solo dos están habilitados en la actualidad-, que salomónicamente fue compartido por las dos ligas de la siguiente manera: San Luis matinalmente y, del mediodía en adelante, Cercado de Lima. En este 2012, el método se mantiene latente; no obstante, San Luis se vio en la necesidad de volver a recurrir al estadio municipal para completar las jornadas ya que la cantidad de partidos sobrepasan la capacidad horaria que tiene en el Barbones.
Como se ve, es complicado no tener un campo propio o una buena relación con la Municipalidad; para ello, solo queda hacer de tripas corazón, pues en tal caso "donde come uno, comen dos" o, mejor dicho, "donde juega uno, juegan dos".
Foto: Aldo Ramírez / DeChalaca.com
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