Luego de la Copa América Centenario 2016, Chile ha visto descender su nivel considerablemente y presentado deasjustes defensivos notorios que Perú debe aprovechar.
Jair Villanueva | @Jair_Villanueva
Editor

Se consagró por segunda ocasión consecutiva como campeón de América. Ante el mismo rival, un gigante del subcontinente: Argentina. Chile tocó el cielo para marearse en la altura y caer de nuevo. Hoy está fuera del Mundial por una sencilla razón: su nivel futbolístico. Ante Ecuador afirmó que tiene una de las defensas más flojas de las Eliminatorias, y no tanto por capacidad -varios son los mismos jugadores de la era Sampaoli-, sino porque perdió la coordinación y criterio al presionar.

Transición: defensa a ataque

- Cuatro jugadores agrupados de Chile quedan mal posicionados, luego de presionar con vehemencia y no leer la acción ofensiva de Ecuador.

- Tres versus tres ecuatoriano contra la zaga chilena: Antonio Valencia -derecha-, Felipe Caicedo -centro- y Enner Valencia -izquierda-.

Deventaja posicional

- Contra Enner Valencia van tres chilenos y uno sobra en la zona de rebote. Mientras tanto, Caciedo es resguardado por dos defensores, uno de ellos es Marcelo Díaz, quien regresa como ancla.

- Antonio Valencia queda libre por derecha: su perseguidor más cercano es Arturo Vidal, quien anda replegado.

Descompensación en reducción de espacios

- Caicedo y Enner Valencia atacan defensa chilena. El segundo fija al lateral izquierdo y Luis Antonio Valencia busca su espalda.

- Mientras los defensores agrandan, los volantes achican. Descoordinación en fase de recuperación chilena y pasividad de Arturo Vidal, de nuevo, frente a la proyección de Luis Antonio Valencia.

Caos defensivo

- La descompensación para marcar causa el tercer gol ecuatoriano. Luis Antonio Valencia queda libre luego de que Enner Valencia y Felipe Caicedo sostienen la jugada en el área.

- Mauricio Isla, Marcelo Díaz y Arturo Vidal nunca repliegan con velocidad.

El diagnóstico

Como se observa en las distintas imágenes, dos factores comulgan en la mal parada defensa chilena: la descoordinación al reducir espacios y las transiciones descompensadas de ataque a defensa. La velocidad ecuatoriana y no la altura de Quito, doblegaron a un equipo que ha perdido afinamiento en cubrir los espacios adecuados para neutralizar a su rival. Por ello, si bien su presión suele ser asfixiante en el mediocampo, la cobertura de las espaldas de los volantes no es la mejor. Además, tiene un punto débil claro en defensa: la zona de Arturo Vidal, pues no queda coordinada con el retorno del lateral izquierdo. Estos son puntos donde la selección peruana puede y debería atacar con buen pase entrelíneas y velocidad por las bandas.

Ilustraciones: Jair Villanueva / DeChalaca.com
Composición fotográfica: Aldo Ramírez / DeChalaca.com


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