Balance de Johan Fano en Colombia: Cafetero a su café
Con 37 años a cuestas, Johan Fano decidió ponerle punto final a su vinculación con las Águilas Doradas. Es momento de hacer el balance sobre un delantero que se sintió como pez en el agua en territorio colombiano.
No muchos jugadores peruanos pueden presumir que un club haya agradecido de gran manera el tiempo que vistió sus colores. Le sucedió a Johan Fano, quien prefirió ponerle final a su vínculo con las Águilas Doradas de Colombia, club en el que vivía su segunda etapa. Con la culminación de esta etapa de Fano en Colombia, amerita hacer un balance de su paso por tres clubes en un total de cuatro años.
El sueño de blanco
Fano vivió su primera experiencia en el extranjero con la camiseta de Once Caldas. Llegó en 2008 como el goleador del torneo peruano, y de inmediato se ganó el corazón de los hinchas del cuadro de Manizales.
Con la camiseta del campeón de la Copa Libertadores 2004 empezó a marcar goles de inmediato, y anotó un total de 13 tantos en su primer año. Se destacó por un hat trick que le convirtió a Deportes Tolima en una derrota 4-3. Para 2009 la realidad cambió ligeramente, y Once Caldas se volvió un equipo mucho más potente. El cuadro manizaleño llegó hasta la final del Torneo Apertura y se impuso en dos partidos al Junior de Barranquilla. Fano no estuvo en el duelo definitorio por acumulación de tarjetas amarillas, pero fue la figura y el goleador del equipo al marcar 13 goles sólo en ese torneo corto. Al final de la temporada se marchó con 9 tantos más para llegar a los 22.
Una vez culminado su contrato, Fano decidió irse rumbo a México para vestir, también con éxito, la camiseta del Atlante. En Manizales dejó un gratísimo recuerdo, un título del Torneo Apertura 2009 y 35 goles en dos años que lo catapultaron a la selección peruana.
Regreso sin peso
Luego de haber sido elegido como el mejor jugador de la liga mexicana en 2010, Johan Fano volvió al fútbol peruano y fichó por Universitario, donde se quedó por un año. Su teléfono nuevamente sonó desde Colombia. Esta vez lo necesitaba el poderoso Atlético Nacional.
Fano se incorporó al cuadro de la ciudad de Medellín, pero las cosas no salieron como se esperaban. Era el momento en que Dorlán Pabón había empezado a despuntar, y el experimentado delantero peruano no tenía sitio en el equipo. Con el conjunto paisa estuvo un semestre y apenas marcó tres goles por la Copa Colombia.
Segundo hogar
Sin chances de jugar, Fano optó por marcharse a un equipo donde sabía que iba a poder ser titular. Leonel Álvarez, quien había dejado la selección colombiana, lo pidió para reforzar el ataque del Itagüí Ditaires, y el peruano retribuyó a esa confianza con 6 goles en 17 partidos durante el Torneo Finalización 2012.
El delantero nacional decidió no seguir al final de la temporada y regresó al club con el que había debutado en Primera División: León. Tras año y medio en Huánuco, y cuando se pensó que había vuelto al fútbol peruano para retirarse, Fano sorprendió a todos con su retorno al Itagüí, que empezaba su gitanesco periplo y su posterior mutación para convertirse en Águilas Doradas y posteriormente en Águilas Pereira.
Con las Águilas ha permanecido un año, disputando la Liga Águila, la Copa Águila y la Copa Sudamericana. Esta vez no estuvo cerca de conseguir algún título, pero retornó a Colombia para mantenerse en lo suyo: los goles. Durante su último año en Colombia, Fano disputó 20 partidos durante el segundo semestre de 2014 y 23 durante el 2015. Marcó 11 goles en la liga colombiana, uno en la copa y otro en la Sudamericana.
Lamentablemente para sus intereses, con el correr de los meses su presencia empezó a hacerse cada vez menos constante en el once titular, y más como una pieza de recambio para los últimos minutos. Su movilidad ya no era la misma de antes, pero su presión en salida aún lo mantenía como un jugador peligroso para cualquier defensa rival. A pesar de ser considerado, Fano optó por rescindir su contrato luego de la eliminación en la Copa Sudamericana ante Olimpia. Se marchó tras el agredecimiento de todos sus compañeros y de un club pequeño que supo apreciar a un delantero que en el fútbol peruano nunca recibió una gran valoración.
Saldo positivo
Pocos pueden dudar de que Johan Fano es un delantero querido en Colombia. El peruano se ganó el cariño de los hinchas de dos equipos gracias a sus goles. No sólo consiguió un título con el Once Caldas, sino que también convirtió al Águilas Doradas en su segundo hogar.
Tras su salida, el club le dedicó un emotivo video de despedida a modo de retribuir lo que el atacante le ofreció al cuadro antioqueño. Durante su paso por el fútbol Colombiano en tres clubes distintos, Fano dejó un saldo de 56 goles en 151 partidos, una cifra nada desdeñable para un delantero que supo mantenerse con éxito en una liga mucho más importante que la peruana, y que demostró vigencia plena durante cada momento en que pisó un terreno de juego.
Composición fotográfica: Aldo Ramírez / DeChalaca.com
Fotos: AFP, Liga Postobón
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