Composición fotográfica: Roberto Gando / DeChalaca.comEl 8 de septiembre de 2000 a Universitario le tocó no solo vencer 6-2 a Deportivo Wanka, sino también decirle adiós a su vieja y añorada cancha de Odriozola.

 

La efeméride dicta que fue hace quince años que Universitario de Deportes le dijo adiós a su primer estadio, el de Breña, pero lo cierto es que el cuadro crema llevaba mucho más tiempo despidiéndose del viejo Lolo Fernández.

Desde que el 18 de enero de 1991 el entonces Alcalde de Lima, Ricardo Belmont, colocó la primera piedra en el terreno sobre el que ahora se levanta el estadio Monumental de Ate, en la ‘U’ ya se tenía la certeza de que la mudanza iba a llegar tarde o temprano. Y así llegó el día durante la temporada de 2000, la del tricampeonato crema.

Las postales

(Recorte: diario El Comercio / suplemento Deporte Total)
Homar Reynoso intenta cubrir el remate de Piero Alva mientras Dante Chumpitaz y Joseph Pozgai observan la acción. Era la fecha 7 del Torneo Clausura cuando a Universitario le tocó recibir al Deportivo Wanka, encuentro que se programó como el último de la jornada, tan solo dos días después de vencer 3-2 al Toluca mexicano en la Copa Merconorte. Por ello, Roberto Chale, técnico merengue, envió al campo a algunos jugadores que no jugaban de manera regular, como por ejemplo a José Laurie en el arco, el ‘Pompo’ Luis Cordero en la volante y el brasileño Bica en el ataque.

El gran momento de la ‘U’, sin embargo, hizo que esa supuesta ventaja en el campo ni se notara aquella tarde en la que el cuadro huancaíno, con Roberto Mosquera como DT, recibió el primer gol con menos de un minuto de juego, tanto conseguido por Bica. Luego el primer tiempo regaló otras tres anotaciones: primero la del ‘Goyo’ Gregorio Bernales a los 23’; luego el descuento del ‘Checho’ Ibarra en 35’; cerrando esa etapa Marko Ciurlizza a los 40’.

 

 

Fue recién durante el complemento que a una de las entonces promisorias figuras del elenco crema se le abrió el arco. Piero Alva, entonces con 21 años, se despachó en esa etapa con tres goles que decretaron la goleada del adiós. Ni siquiera el descuento de Sandro Cavero valió de algo para la visita, que resultó un convidado de excepción en el Lolo Fernández luego de perder por 6-2.

Así, por todo lo alto, Universitario cerró una gran etapa en el barrio de Odriozola, ese en el que con mucho esfuerzo se levantó la primera casa crema, inaugurada en 1952, y por la que incluso el mismo ‘Lolo’ desfiló cuando aún le quedaba algo de pólvora en sus chimpunes.

Composición fotográfica: Roberto Gando / DeChalaca.com
Recorte: diario El Comercio / suplemento Deporte Total


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