• CAÍDAS QUE DUELEN. Marlon De Jesús cae el borde del área colombiana tras una falta de Juan Cabezas. (Foto: REUTERS)
  • NO HUBO MAGIA. Michael Ortega  intenta penetrar el área ecuatoriana pero ve frustradas sus esperanzas debido a la férrea marca de Narváez y Gaibor. (Foto: REUTERS)
  • NO SOLO DE GANAS VIVE EL HOMBRE. A pesar de su entrega, Marlon De Jesús no fue efectivo de cara al arco de Mosquera. (Foto: REUTERS)
  • NO DAN PIE CON BOLA. Álex Ibarra cae al piso tras una falta de Juan Camilo Saiz. El veloz extremo ecuatoriano complicó en demasía al bloque defensivo cafetero. (Foto: REUTERS)
  • EVIDENTE IMPORTENCIA. Jorge Andrés Ramos lanza un grito de furia tras fallarse un gol. Los jugadores colombianos nunca encontraron la forma de vulnerar el arco de Jaramillo. (Foto: REUTERS)
  • NO ENCUENTRA EXPLICACIONES. Eduardo Lara, técnico de Colombia, terminó frustrado por el desempeño de sus dirigidos. (Foto: REUTERS)

 

La frecuencia: CMD

En el partido de semifindo, CMD llevó las incidencias del encuentro con Jorge Kieffer en la narración, Roberto 'Titín' Drago en los comentarios, y Fernando Egúsquiza a ras de campo. Dada la ocasión -debido a las escasas emociones con las que contó el encuentro-, el trío supo sobrellevar las incidencias del Ecuador - Colombia de la mejor manera, haciendo hincapié -sobre el final del partido- de que fue el primer encuentro sin goles de los -hasta ese momento- 28 partidos que registró el Sub-20 2011

La pizarra: Por falta de laterales

Ecuador (3-5-2) con Sixto Vizuete en el banco, utilizó una línea de tres al fondo dónde el capitán ecuatoriano Dennys Quiñónez fue de lo mejorcito en defensa. La figura, de lejos, fue John Jaramillo, pero de él se hablará más abajo. La volante estuvo constituida por cinco hombres, pero no tuvo el desplazamiento deseado por su técnico. Y es que el ‘16’ Andrés Oña, cumplía una labor mixta recuperando e hilvanando las jugadas de riesgo para su equipo. En la delantera, Marlon de Jesús y Edson Montaño no tuvieron una mala noche, pero poco fue lo que ocasionó. Colombia, con un clásico 4-línea-2, encontró en el carril diestro la manera de hacer daño a su rival. Con un Pedro Franco (lateral derecho) encarador y motivado, el equipo de Eduardo Lara pudo haber inaugurado el marcador en la noche arequipeña. En la delantera, en tanto, se apreció al jugador que todo el aficionado cafetero pensó que despegaría su fútbol, pero que sin embargo fue el más flojo de la noche: Edwin Cardona.

Los cambiazos: Para tejer las jugadas

Los cambios más vistosos fueron los ‘10’ de cada equipo, los llamados cerebros. De hecho, ambos entraron con la misma intención: que desde sus pies nazca el gol que les otorgue el triunfo. En Ecuador, Juan Cazares debía ayudar a Andrés Oña en la creación y no desentonó. Por el lado de Colombia, dispusieron de Michael Ortega que ingresó por Cabezas (que al parecer no se entendía con Franco) para que así el ‘5’ Colombiano, Pedro Franco, pueda tener mejores balones de cara al ataque. El marcador no se abrió, pero estos relevos mostraron cosas interesantes. También ingresaron Minda y De La Cruz por Ecuador; y Castillo y Calle por Colombia.

El capo: John Jaramillo

El portero ecuatoriano fue exigido no sólo por el equipo Colombiano, si no también por su defensa que durante tramos del encuentro no demostraba la solvencia que debía en la denfensa. El ‘1’ tuvo hasta ocho atajadas importantes, que ayudaron para no ver vencida a su valla. Sin duda, en un partido poco vistoso por parte de los ecuatorianos, estos pudieron tener a la figura en aquel hombre que se paró debajo de los tres palos para evitar una derrota catastrófica.

El extraviado: Edwin Cardona

Un delantero desentendido del juego de su equipo. Se mostró nulo en la marca y totalmente apático en la producción ofensiva, ya que solo caminaba dentro del campo. Tuvo un solo disparo que el portero John Jaramillo controló sin peligro. Era, en principio, la esperanza de gol de toda Colombia, pero se dedicó a mostrar un juego apático y poco característico en un jugador cafetero.

Jailaits

¡Qué sueño!: Recién a los 27’ se produjo la primera jugada de peligro. Cuando todo el estadio repudiaba el juego de ambos elencos, se hizo participe Jorge Andrés Ramos, quien de un cabezazo casi vence a la resistencia ecuatoriana.

Sin nombre: Después de ser el hombre más peligroso hasta los 30’, Jorge Andrés Ramos se comió un gol con el arco en solitario. Si hubiera tenido más tino tal vez sería otra la historia.

Bravo Jaramillo: A los 76’ se pitó una falta a favor de Colombia. El ‘10’ colombiano, Michael Ortega, sacó un tiro magistral en el cual se lució el jóven golero John Jaramillo, quien de una atajada memorable a mano cambiada pudo impedir el gol que le hubiera otorgado la victoria al país cafetero.

Fotos: Reuters

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