Composición fotográfica: Aldo Ramírez / DeChalaca.comEn el décimo aniversario de la hazaña de los ‘Jotitas’ ante Brasil en 2007, Perú se fue al otro extremo y cerró –con cero puntos- su peor participación en un Sudamericano Sub-17. Paraguay ganó 2-0 y sentenció una campaña numérica y futbolísticamente paupérrima.

 

Jaime Escribens | @jaime_escribens
Redactor

Talca volvió a presentar otro pobre desempeño de la Sub-17 dirigida por Juan José Oré. Eliminada desde la derrota con Venezuela -aunque por juego queda la sensación de que lo estuvo desde el comienzo-, la blanquirrojita llegó al último partido con dos objetivos: tener por fin algún tipo de entendimiento colectivo y evitar una estadística que hoy es realidad y condena a esta camada como la actriz de la peor participación de Perú en la historia de la categoría.

Al frente se plantó un Paraguay favorito en el duelo y para clasificar al hexagonal final. Una victoria contundente ante Argentina y dos empates frente a Venezuela y Brasil hacían necesaria la victoria a los guaraníes en la última fecha para asegurar la clasificación. Como referente se entendía a Fernando Romero, quien confirmó su nivel superlativo esta tarde: uno revestido de rapidez, fuerza, potencia y presencia. Un referente de área que, sin hacerse presente en el marcador, marcó la pauta en la zona ofensiva albirroja.

Perú tuvo unos aceptables 20 primeros minutos. Quizá no por mérito propio, sino porque Paraguay demoró en aplicar algo que neutralizó totalmente cualquier intención creativa peruana: la presión en tres cuartos de cancha que ejercía el elenco guaraní. No solo era rápida y alta, sino también agrupada y correctamente violenta. Víctor Villasantti y Antonio Galeano, apoyados por los laterales, marcaron territorio en todo el mediocampo. Por el lado peruano, Anthony Aoki fue ancla entre la defensa y ataque y se mostró bastante incómodo ante esta medida del equipo contrario, por lo que se le complicó en más de una oportunidad organizar juego.

La selección peruana estuvo lejos de cualquier expresión de juego. (Foto: prensa FPF) 

Fuera de la clara superioridad paraguaya, queda la sensación que los goles no fueron exactos reflejos del dominio. El primero tuvo la autoría de Alan Rodríguez, quien a partir de un débil tiro libre logró marcar el desnivel. El segundo nació de un desborde de Romero, quien lanzó un centro y Anthony Fuentes –irónicamente, quizá el central peruano más destacado durante el torneo- la direccionó al arco. Goles que sentenciaron lo justo, pero que por cómo sucedieron no representaron el trámite de juego.

Y así se acabó el sufrimiento, que hace algunos partidos dejó de ser un sueño o una esperanza. Perú se va con pena y nula gloria de tierras chilenas, donde no pudo mostrar ningún punto por destacar. Esta generación tiene espacio para desenvolverse mejor en la Copa Federación y el Torneo de Reservas, para así emanar un mejor fútbol: está visto, por lo ocurrido hace diez años, que el rendimiento en un Sudamericano de esta categoría no es vinculante con el futuro. Pero en el pasado quedará, imborrable, esta dolorosa mancha estadística de la Sub-17 de 2017.

Los goles

Fotos: prensa FPF


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La ficha del Perú 0 - Paraguay 2

 

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