Uruguay - Perú: La lucha no alcanza
Uruguay superó a Perú 4-3 en el cierre del Sudamericano Sub-17. La ‘Blanquirrojita’ pudo hacer muy poco ante un cuadro superior y ya clasificado al Mundial. Así, consumó su sexta derrota consecutiva, récord inédito para Perú en la categoría.
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El capo: Francamente bueno
Franco Acosta demostró por qué es el goleador del Sudamericano Sub-17 y marcó dos goles que lo colocaron en la cima con ocho en su totalidad. El delantero uruguayo, a pesar de haber sido suplente en muchos partidos, demostró de qué está hecho: casi solito se encargó de poner en problemas una zaga peruana que, si bien estuvo muy floja, hizo lo que pudo ante el juvenil artillero.
La clave: El despertador
Apenas a los 3’, Franco Acosta madrugó al conjunto peruano: se coló fácilmente por la defensa y marcó solo el primer tanto del encuentro. Desde ese momento, el partido se puso cuesta arriba para la ‘Blanquirrojita’, que despertó a la realidad de no haber ganado ningún encuentro del Hexagonal, algo nada casual. La defensa, como siempre perdida, no dio la talla y le tocó sufrir cuatro goles que pudieron ser más. No obstante, los goles también ayudaron a abrir los ojos a los de Teixeira y a despertar el coraje que a poco estuvo de depararles un empate.
La joyita: Otro Franco
Franco Pizzichillo fue una máquina en el mediocampo y también se dio mañana para sumarse al ataque y hasta anotar dos goles. A los 18’, recibió la pelota en el área de espaldas a la zaga peruana y de genial forma se sacó a tres jugadores con un taco que lo autohabilitó para quedarse solo frente al arco. Luego, definió fríamente hacia el palo derecho y este le dio una pequeña ayudadita para que el balón ingresara. Gran definición del charrúa.
La calamidad: No Abram
Luis Abram fue de lo más flojo de la defensa peruana. Dictaminado como el encargado de poner orden en la zaga central, nunca pudo encontrarse totalmente y anduvo desconcentrado durante todo el partido. En el segundo gol pudo haber hecho más, pero se comió un amague terrible.
El duelo: Por el honor
Beto Da Silva fue de lo más destacado del elenco peruano: marcó un doblete y ambos fueron de cabeza. Esto, ante un rival que siempre va bien por arriba, es un gran mérito por parte del jugador que supo ganársela en el área rival. Fabrizio Buchiazzo lo sufrió incontables veces y de hecho Da Silva se le escapó en el primer gol, a los 20’. Ese duelo en particular lo ganó el peruano.
El cambiazo: Por si acaso
El DT uruguayo Fabián Coito (ex jugador de San Agustín en 1992) sacó a su ‘10’, Alan Méndez, a los 75’ para que descansara luego de haber trajinado bastante durante todo el partido y para cerrarse un poco atrás. En su reemplazo mandó a Elías González, quien entró preciso para detener las arremetidas peruanas que buscaban con desesperación el empate. A partir de ese punto, el partido se cerró y todo fue trámite puro para ambos conjuntos.
La cancha: Ya para qué
La clasificación del conjunto uruguayo al Mundial ya estaba consumada así ganara o perdiera ante Perú. También por eso hubo poca asistencia al encuentro y apenas se veían pequeños grupos de personas en el Juan Gilberto Funes de San Luis. No obstante, los aficionados presentes se las arreglaron para hacer un poco de bullicio y animar a sus noveles promesas en un partido que tuvo tantas emociones como goles.
Kazuki Ito: Excelente conducta
Un encuentro sin ningún problema para el chileno Carlos Ulloa. El duelo se dejó jugar –hubo poca agresividad- y no tuvo mucha participación del principal, quien acompañó las jugadas y sancionó adecuadamente.
Fotos: Diario de La República, AP
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