Callejón oscuro y sin retorno
Tras su tercera deducción de puntos por deudas con la Agremiación y la planilla actual, Sport Áncash perdió la categoría. Una historia que estaba oleada y sacramentada y que tiene como único responsable a su presidente José Mallqui.
La tarde del martes fue nefasta para la afición ancashina y, en especial, para todo el hincha huaracino que siguió desde siempre a la 'Amenaza Verde', como cuando logró su primer hito y sintió como propio aquel título de la Copa Perú en 2004 que le permitió llegar a Primera, o cuando clasificó a la Sudamericana 2008 y enfrentó en octavos a Palmeiras. Esta vez, se sintió un puñal aún más fuerte que la vez en que descendió en el Descentralizado 2009: fue profundo y mortal.
Como es sabido, mediante la resolución N°004-JD/ADFP-SD-2013, se notificó que Sport Áncash quedó suspendido al incumplir la tercera cuota del convenio de Reconocimiento de Deudas y Obligaciones, con lo cual, según consta en el Artículo 3 del Reglamento Económico Financiero de las bases del presente torneo, además de la resta de dos únidades, ello significa también el descenso automático. Con esta disposición, pues, el camino de la 'Amenaza Verde' quedó minado y sin opciones de seguir participando en el actual torneo de ascenso.
Si habría que sindicar responsables, el pluralismo sobra. En realidad, el único culpable de que en este momento Sport Áncash no tenga salvación es una sola persona: José Eusebio Mallqui Beas, su presidente. Un personaje que en los noventa fue involucrado en un acto de soborno comprobado y que, desde que llegó al mando de la 'Amenaza Verde', instauró el manejo gamonal y, dicho sea de paso, estancó el crecimiento institucional de un club con potencial para afianzarse. Se puede rescatar su constante empeño para salvar a la institución de las penurias en los últimos años, pero lo hizo cuando ya se estaba ahogando.
¿Qué va a pasar con Sport Áncash? Como es obvio, el equipo ya no va a ser programado más en la actual Segunda y empezará a perder todos sus partidos por walk over. Asimismo, sus dirigentes (o sea José Mallqui) van a recibir una sanción de cinco años para ejercer cargo alguno dentro del Sitema Futbolístico Nacional. No obstante, el equipo sí podría aparecer en la Copa Perú de 2014, ya que se trata de un torneo amateur, pero por su condición de infractor no podría volverse a insertar en el ámbito profesional así ascienda (Primera y Segunda, siempre que cumpla el periodo de su sanción y pague todas sus deudas). Una figura similar a la de Cobresol, que tiene el visto bueno para debutar en la Etapa Regional de la actual Copa Perú, aunque lo tiene que hacer con otra directiva.
Con estas condiciones, es claro que el camino para que Sport Áncash vuelva a competir es muy complicado, por no decir imposible. Y solo basta escuchar las declaraciones que hizo José Mallqui a Radio Ovación para descifrar su manera acriollada de plantearse las cosas, ya que mencionó -muy suelto de huesos- que, ante la perdida de categoría, él ya no se va a responsabilizar por las deudas generadas con multiples jugadores de años anteriores y del plantel actual, ya que si no pudo pagarlas ahora que el equipo estuvo en competencia, menos lo va a hacer en su condición de club inactivo.
Por cierto, no tendría por qué sorprender este tipo de actitudes, más aún si lo que está en el trasfondo es sacarle la vuelta al reglamento. Como es sabido, desde hace varios años Sport Áncash tiene una filial que participa en la Liga Distrital de Independencia, en la provincia de Huaraz. El club se llama Amenaza Verde, juega con la misma indumentaria verde con una 'V' amarilla y está conformado por los juveniles del Sport Áncash. Este año se quedó eliminado en la primera instancia del "fútbol macho", pero para 2014 planea llegar lo más lejos posible, tanto que hasta en el último sorteo de la Etapa Departamental de Áncash se "proclamó" la presencia de Mallqui a la misma ceremonia, pero del próximo año.
Si bien la FPF debería revisar el reglamento y poner trabas a este tipo de artimañas (¿hasta cuándo?), también es claro que José Mallqui, gracias al funcionamiento del actual sistema, va a ser expectorado del entorno del fútbol, tal como ya ocurrió en su momento con dirigentes de costumbres prepotentes y gamonales como Juvenal Silva y Lánder Alemán. Lo lamentable es que, como consecuencia de ello, deja a toda una ciudad sin su club más representativo.
Composición fotográfica: Roberto Gando / DeChalaca.com
Fotos: Aldo Ramírez / DeChalaca.com, Puno Deportes
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