A mal tiempo, buena cara

En las últimas semanas, Alianza Cristiana pasó las de caín en el aspecto dirigencial. Su presidente, Plácido Chino Dahua, viajó a Lima en los días previos al arranque de la Segunda División, dejó con los crespos hechos a su plana que se quedó en Iquitos y, contra todo pronóstico, le dio prioridad al grupo que estaba entrenando en Lima; ergo, cambió su discurso, dejó en el aire al plantel genuino en el oriente e inscribió en la Segunda a otro equipo distinto -incluído el comando técnico- del que todos conocían. Las consecuencias de la improvisación, obviamente, lo hicieron tocar fondo: el cuadro de Andoas acumuló cuatro derrotas en igual número de presentaciones.
Nada plácido
No obstante, todo lo anteriormente expuesto pasaría desapercibido si no fuera porque, en las últimas semanas, el equipo acusó problemas logísticos para trasladarse a Rioja, la sede alterna que empleó Chino Dahua como refugio tras no querer ser local en Iquitos por "hostilidad hacia su persona". De hecho, Alianza Cristiana arribó a la calurosa ciudad sanmartinense, tanto ante Coopsol como ante Torino, el mismo día del partido, razón por la cual jamás pudo sacar provecho de su localía. Sin embargo, todo el desbarajuste se debió a que Plácido Chino, en realidad, ya no rendía cuentas ni tampoco aparecía en las sesiones de la ADFP-SD.
Se sabe, con la documentación del caso, que Plácido Chino habría presentado ante la ADFP-SD a otros miembros directivos de su club de manera irregular, esto, a razón de que, ante los Registros Públicos, los integrantes de su directiva en realidad son otras personas, los mismos quienes desde hace varias semanas indicaron que entre ellos nunca hubo acuerdo para proporcionar los documentos que obliga la ADFP-SD para participar en el torneo. O sea, todo la documentación que derivó Chino a la Segunda nunca tuvo la venia de su directiva y mucho menos salió de la sede institucional del club, en Iquitos.
Por ello, luego de varias semanas de reuniones y litigios con la Segunda, y dado de que Plácido Chino está no habido, la ADFP-SD decidió vacarlo y darle la potestad del club a quien está registrado como vicepresidente, Iván Chota Rodríguez. Y lo que se pretende hacer de inmediato es que el equipo vuelva a jugar en el Max Augustín de Iquitos, algo que recién podrá hacerlo en la fecha 7 ante Alianza Universidad, dado de que para el duelo de este fin de semana, ante San Alejandro, ya existe un preacuerdo firmado para jugar en el Inca Pachacútec de Rioja.
Se avecinan cambios
Eso sí, lo que se pretende hacer en el acto, es repotenciar al equipo que entrena en Rioja. En ese sentido, en las próximas horas deberían estar acoplándose al plantel que dirige Octavio Vidales jugadores como Manuel Marengo, Hugo Castillo, José Sosa y los africanos Uzoma Godson -quien juega de '9' y también de arquero- y Kambou Herve -quien puede actuar como back central o '6'.
Por cierto, respecto a la continuidad del comando técnico del equipo que está jugando el torneo de ascenso, la directiva, ahora presidida por Chota, va a renegociar su contrato y revisar las condiciones que fijó el saliente Chino (aparentemente con un monto que sobrepasa el presupuesto del club). Si Vidales y su grupo de trabajo no acepta el ajuste, se estaría haciendo la resición y el plantel estaría a cargo de Alfredo Gutiérrez, el DT que actualmente dirige al grupo que se encuentra en Iquitos.
Composición fotográfica: Roberto Gando / DeChalaca.com
Fotos: Emilio Ruiz / DeChalaca.com, Prensa Alianza Cristiana

Parece que se avecinan los retiros de clubes, y al igual que el año pasado, el campeon será el mejor en los tribunales de justicia del futbol peruano.
Saludos