• EL CAPO. Edward Montaño tuvo una gran perfromance en Unicachi. El lateral demostró un ida y vuelta sacrificado y mucha potencia para llegar al ataque. (Foto: Aldo Ramírez / DeChalaca.com)
  • LA CLAVE. A pesar de las complicaciones que tuvo Minero para llegar al partido, salieron al césped y ganaron. Algo rápido y sencillo. (Foto: Foto: Aldo Ramírez / DeChalaca.com)
  • LA CALAMIDAD. Jesús Porras dejó con diez a su equipo y dificultó el trabajo que hacían sus compañeros por conseguir el empate. (Foto: Foto: Aldo Ramírez / DeChalaca.com)
  • EL CAMBIAZO. Marco Berrocal ingresó por un exahusto Héctor Ancachi. El ingresante logró anotar sobre los 85'. Cambio totalmente productivo. (Foto: Foto: Aldo Ramírez / DeChalaca.com)
  • LA CANCHA. En el Municipal de Matucana se vivió un clima bastante intenso alrededor del partido. El público vivió el encuentro emocionante que ambos equipos entregaron.. (Foto: Foto: Aldo Ramírez / DeChalaca.com)
  • KAZUKI ITO. Micke Palomino supo controlar el partido a pesar de los constantes reclamos de jugadores y comando técnico de ambos equipos. (Foto: Foto: Aldo Ramírez / DeChalaca.com)

 

El capo: Café del monte

Con chispazos de crack, el colombiano Edward Montaño demostró con creces su lugar en Alianza Unicachi. El lateral izquierdo del conjunto de Yunguyo fue una salida productiva en ataque, además de presentar seguridad al momento de marcar. En realidad, sorprendió sobremanera su accionar, considerando que inicialmente no llegaba a encajar en el esquema de 'Panaderito' Díaz, quien incluso lo dejaba en el banco. Otro de los que dejó una gratísima impresión fue Pedro Rodríguez, seguramente feliz por la consagración de su "pariente" español en la Euro. Fuera de bromas, el volante por fuera de Unicachi, pese a actuar con cierta vehemencia -recibió al amarilla al 1'- cuenta con una técnica valorable.

La clave: Contra todo

La entrega de los jugadores de Unicachi se vio en el campo, pese al complicado ambiente previo. El equipo de Yunguyo llegó al estadio de Matucana a solo diez minutos del inicio del partido; con una calistenia forzada y agilizada por el corto tiempo, fue más que valorable lo conseguido por el conjunto azulado. El empuje del equipo ante la adversidad fue clave para afrontar y ganar este partido de visita.

La calamidad: No hay porras para él

Se le fue la mano a Jesús Porras, quien solo duró un tiempo en el partido luego que en dos acciones desafortunadas viera las amarillas, en consecuencia, la roja y afuera. Esta situación solo sirvió para hacer más difícil la labor del cuadro local en búsqueda de la igualdad. Asimismo, Erick Sánchez y José María Córdova tuvieron, y mostraron, poco para generar peligro en la retaguardia de un cómodo Jhonny Soto.

El jugadón: Juan Quinho

Sobre los 26', el siempre peligroso Juan Quiñónez emuló al mejor Ronaldinho y se mandó un par de bicicleteadas sobre la marca de Edward Montaño. En esa jugada, el marcador le puso el freno; sin embargo, quedó para la retina tal magnífica acción.

El duelo: Más de Colombia

El actor principal de este partido fue Montaño, quien no dejó a Erick Sánchez movilizarse por su sector e hizo improductiva la labor de desequilibrio del volante. Así también, el colombiano, cada vez que encaró -aprovechando la ausencia de Porras- fue una pesadilla para Minero. Otro de los encontronazos, literalmente, fue el de Orlando Alvarado y José María Córdova: un duelo "sangriento" que terminó con la roja para ambos. En tanto, el duelo más parejo lo protagonizaron Yampiere Zapata y William Tafur, aunque, dadas las circunstancias, el visitante salió airoso.

El cambiazo: Marco marcó la diferencia

"Juega como Messi". Cierto desatino del espectador que propagó dicha frase para referirse a Marco Berrocal; sin embargo, este demostró sus cualidades individuales y comandó el ataque del cuadro de Yunguyo desde su ingreso a los 58' por el agotado Héctor Ancachi. Berrocal generó peligro y aprovechó muy bien las diagonales ante la desprotegida zaga local. Su premio fue el gol a los 85' en un contragolpe letal que supo culminar a pierna zurda.

La cancha: Si no hay solución, no la hay

Con todo lo difícil que significa desalojar a un público que en la previa presenció el encuentro entre Bentín y River Canchacalla por la Etapa Provincial de Huarochirí, sobre las 14:30 el Municipal de Matucana estuvo listo para recibir al cuadro predilecto de Casapalca. Con un marco más que interesante, no faltó alguno que otro desadaptado que quiso meterse al campo de juego con el afán de empañar el partido. Sin embargo, parte del cuerpo técnico y algunos jugadores locales tuvieron que ponerle freno a la exacerbación. Al final, la misma gente despidió en aplausos a sus jugadores.

El escándalo: ¿Muda de la suerte?

La desventaja obligaba a realizar cambios en Atlético Minero. No necesariamente al ingreso de Alberto Arias, sino al ingreso de los ya famosos uniformes "retro". En la primera parte, Atlético Minero estrenó los nuevos uniformes para la temporada 2012: son de diseño exclusivamente naranja y con el escudo, la marca deportiva y el número, sin más ni más. Sin embargo, parece que la camiseta no dejó satisfecho al grupo y para la complementaria diez de los once jugadores de Minero reingresaron al campo con el singular uniforme parchado de la temporada 2008. ¿Cábala? ¿Sudor? Quién sabe. Lo cierto es que no influyó en el marcador.

Kazuki Ito: Algo de meñique

Micke Palomino demostró temperamento ante los asiduos -y escandolosos- reclamos por parte de ambas escuadras. No obstante, también es cierto que el partido se le fue de las manos muy rápido, tras las continuas fricciones, sobre todo cerca de las áreas. La expulsión por doble amarilla de Jesús Porras fue acertada, y quizá algo tardías más bien resultaron las expulsiones de Córdova y Alvarado, quienes de rato en rato se fueron recordando todo su árbol genealogico. El trámite general lo complicó mucho.

Fotos: Aldo Ramírez / DeChalaca.com

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La Ficha y La Pizarra

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