San Martín - Cienciano: Velasquismo posmoderno

El partido fue…
DISCRETO. Pintaba para más. Los pocos asistentes al Miguel Grau tuvieron que conformarse con un partido lleno de tarjetas y tres goles que graficaron el balance. Un primer tiempo donde San Martín buscó más (con mucho desorden), pero fue Cienciano el que adelantó por medio de Orejuela. En 30', los dirigidos por Díaz -desde una cabina- solo apostaron al juego por los costados, sin efectividad aparente. Para la segunda parte, Maná buscó tener más la pelota. A los 63’, Díaz mandó a la cancha a un Tuesta que le cambió la cara a la San Martín: con su frescura, supo romper la línea defensiva del equipo cusqueño. El empate llegó a través de Maximiliano Velasco a los 65’, y el mismo argentino apareció 19 minutos después para remontar la historia de cabeza. San Martín, el equipo del plantel joven, se trepó al primer lugar del grupo A.
El compacto
Las fotos
El capo: Maximiliano Velasco
El delantero argentino tuvo solo dos ocasiones y las transformó en gol. En el primero, forzó una pelotera hasta encontrar el espacio para rematar de zurda. En el segundo, usó muy bien la cabeza. En un partido regular, el goleador se las arregló para darle los tres puntos a su equipo.
La pizarra
Con un 4-1-4-1, Díaz intentó buscar el desequilibrio por las bandas. Sin embargo, las cosas no se dieron como lo planteó. Esta vez, no hubo una sociedad tan fluida con Joel Sánchez, pero encontraron la diferencia en su goleador. En Cienciano, por su parte, Espejo planteó un dibujo similar. Agrupó gente en el medio campo y dejó a Orejuela solo de punta. El 'Flaco' hizo el gol y el resto del partido se dedicó a pelear. Larrauri hizo un buen partido hasta la primera amarilla que lo condicionó. En el medio, Julio Edson Uribe no gravitó y el equipo perdió mucho con la salida de Guerrero.
Kazuki Ito: Luis Garay
La actuación de Luis Garay fue floja. Si bien los jugadores de ambos equipos se dedicaron a buscar la fricción, el de negro no tuvo la suficiente personalidad para detener las agresiones. Se dedicó a repartir amarillas sin lograr el control del juego fuerte. Tanto así, que hubo un conato de bronca en el que tuvo que intervenir la policía. No hubo discrepancias en sus decisiones y tuvo un discreto apoyo de los auxiliares. Finalmente, inesperada (o inexplicable) la segunda amarilla a Larrauri por dar un salto, queriendo aparentemente obstaculizar un lateral.
Fotos: José Salcedo / DeChalaca.com
Leer más...
La ficha del San Martín - Cienciano
CALETAS: Maximiliano Velasco replicó lo hecho, en su momento, por Héber Arriola ante Cienciano
