Composición fotográfica: Aldo Ramírez / DeChalaca.comPese a la ausencia de Lavandeira, Rosario se plantó con inteligencia en su accidentada visita a Huancayo y complicó sobremanera al local. Pero su infortunio de cara al gol y para perder a Chacaliaza por lesión apenas ingresado decantaron el 2-0 hacia un 'Matador' eficaz que pudo hasta traducir en goleada un partido que, en realidad, fue muy parejo.

    Roberto Castro | @rcastrolizarbe
    Director General

La altura incide decididamente en el trámite de los partidos del Descentralizado, y no solo por agotar visitantes como la sabiduría convencional cree. Define, sobre todo, libretos de juego: automatismos para la circulación de balón, recurrencia al centro para explotar el tránsito más rápido del balón por el aire o vocación por la pelea antes que por la habilidad en el frente de ataque.

De todo eso saben, y bastante, Sport Huancayo y Sport Rosario. Dos equipos de ciudades de similar metraje sobre el nivel del mar y hasta esquemas de juego predominantes, pues Rolando Chilavert no ha tocado el 4-2-3-1 que le legó Diego Umaña. Por eso, en el duelo que abrió la fecha 2 del Apertura en la 'Incontrastable' era posible esperar o bien una neutralización de propuestas o bien un partido de llegadas constantes producto de la correcta aplicación de cada una en ataque. Y felizmente ocurrió lo segundo; aun cuando el ritmo del partido no haya sido trepidante, las ocasiones de gol amenizaron la hora de almuerzo.

Pero que el menú haya tenido la sazón de una buena papa a la huancaína antes que de una llunca tiene que ver con un tema neto de eficacia. Porque hasta antes de pararse frente al arco, Rainer Torres logró que su equipo lo hiciera bastante bien. Con inteligencia, suplió la ausencia de Pablo Lavandeira -golpeado, fue dejado en Huaraz y así liberado del cansancio de un viaje accidentado, que el cuadro rosarino debió hacer por tierra hasta Lima ante desperfectos en la aeronave que iba a tomar en Anta-. Así, a diferencia del 'Matador', Rosario sí migró de sistema clásico: para extrañar menos al uruguayo, aplicó un 4-3-2-1 con volante en "V" en el que un triple escalón formado por Jesús Rabanal, Farih Jasaui y otro charrúa, Darwin Ramírez, sostenía el peso que habitualmente tiene el equipo por izquierda.

Huancayo se pudo sobreponer con el triunfo ante Rosario. (Foto: Luis Carlos) 

Con ese recurso, y las diagonales consabidas y constantes de un Rolando Arrasco en franco crecimiento, Rosario complicó a un Huancayo que al no poder ejercer el habitual efecto de cansancio que imprime en casa a sus rivales, se dedicó a buscar de todas las formas posibles a su goleador Antonio Meza Cuadra para romper el cero. Mientras, soportaba la carga de Janio Posito en su área. Y así fueron sucediéndose las ocasiones hasta que el hielo lo rompió un defensor en el arco contrario: el paraguayo Gustavo Villamayor se coló entre un bosque de piernas y la mandó a guardar cuando más había insinuado la visita.

La respuesta canalla, como correspondía a un equipo ambicioso, fue rápida y sobre la base de su mejor arma: Rabanal cabeceó sobre el final del primer tiempo y puso la pelota muy cerca del poste izquierdo de Éder Hermoza. De hecho, el ex 'jotita' sufrió sobremanera en los centros enviados a su área, ante los que lució cierta flojedad de manos. Y en el complemento no dejó de pasarla mal, porque Rosario acentuó las diagonales y entre Arrasco y Ramírez siguieron acosando el área local.

En tanto, el 'Matador' insistía con buscar a Meza Cuadra, pero luego de un gol anulado al 'Torito' por carga clara a Josimar Vargas, Chilavert decidió que era momento de buscar algo distinto arriba. Algo que rompiera la montonía del centro y el pase largo para el punta por un poquito más de inventiva. Y entonces, apeló en simultáneo a arriesgar por jugarse por toda la habilidad disponible que tenía en el banco: Marcos Lliuya combinado con Carlos Preciado. La apuesta le pagó de inmediato, porque el colombiano ingresó a hacer una finta para dejar mal parado a Carlos Uribe, luego un autopase para meterse en medio de Brian Bernaola y Vargas y finalmente, un latigazo para fusilar a Salomón Libman. Un golazo sensacional, candidato a ránking anual, que inclinó del todo la balanza.

El partido se terminó de definir justo luego del segundo gol, porque además de la diferencia en el marcador, el cambio que había buscado Torres con el ingreso de Edson Chacaliaza se fue al traste pues al volante le recrudeció una lesión. Solo estuvo 7' en el campo y debió dejarle su lugar al novel Juan Huangal, lo que desbarató cualquier propósito de reacción y hasta pudo, sobre el final, castigar ya en exceso al 'Canalla', dado que Preciado, solo en el área chica, se tomó horas para acomodarse y acabó cediendo un rebote. Igual, su gol ya había pagado la entrada, el almuerzo y un triunfo que disimula un trámite que demuestra a Chilavert que todavía debe tomarle la mano a un equipo al que no siempre se le cruzará un rival con los astros alineados en contra como Rosario este viernes de anticipo futbolero.

Los Goles

Fotos: Erick Álvarez, Luis Carlos


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La ficha del Huancayo 2 - Rosario 0

CHALACAS DE VISTA: Llegadas de los visitantes a Huancayo

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