Devoción remunerada
Manolo Núñez | @Manolonf Columnista Editorial |
Durante todo el 2016 se ha comentado que la San Martín era un equipo que jugaba bien, pero que perdía partidos en buena parte por desaprovechar las ocasiones ofensivas que generaba. El funcionamiento del cuadro santo no ha cambiado, sigue apostando por un juego en corto y en crear asociaciones desde las bandas. Pero en este último par de fechas ha llevado este juego a ser efectivo de cara al arco.
Ante Alianza Atlético, una buena jugada por el medio terminó en una asistencia para Cristian Ortiz que no desaprovechó el mano a mano ante Diego Carranza. Si bien el segundo gol fue de penal, el tercero fue producto de una buena jugada por izquierda y una gran asistencia de Álvaro Ampuero para una mejor definición de Alexander Succar ante el portero sullanense.
La efectividad del primer tiempo resultó clave al final ya que el local terminó descontando dos goles hacia el final. De hecho, hace poco más de dos años no hacía 3 goles en un primer
tiempo, cuando empató frente a Universitario 3-3 por la fecha 11 del
Apertura 2014. San Martín, pues, se ha tomado su tiempo, pero para pulir su mayor defecto justo en el momento oportuno. Estando ya en la última parte del torneo, ser efectivos de cara al arco es un punto clave para evitar el descenso este año.
Foto: César Acha / diario La Hora de Piura
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La crónica del Alianza Atlético 2 - San Martín 3: Ráfagas solares