Foto: Prensa FPFVallejo dominó el juego en Matute pero cayó derrotado 0-1 por Alianza Universidad, que apeló a la efectividad como arma principal. Los azulgranas solo dispararon una vez al arco vía Ísmodes y eso fue suficiente en detrimento de los incansables intentos poetas por vencer a un inspirado Morales.
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    Eduardo Tirado | @EduardoTL
    Redactor

El encuentro entre poetas y azulgranas bien podría clasificarse como uno que de esos que despierta aquellas acaloradas discusiones sobre los diferentes estilos de juego que se practican y cuál es el mejor. Por un lado, la Universidad César Vallejo de José del Solar se mostró como un cuadro que mantuvo el dominio en todo momento y atesoró la posesión del balón mientras respetaba el juego asociado al ras. Por otro lado, Alianza Universidad se replegó en la mayor parte del duelo y solo hizo daño a partir de contraataques, de los cuales solo uno logró concretarse en ocasión de gol y, de hecho, fue la llave para abrir el marcador.

El arranque de la Vallejo fue demoledor, puesto que desde el segundo minuto de juego ya estaba probando la portería de Diego Morales. Sin embargo, la falta de precisión hizo que esos continuos embates no encontraran buen puerto. Apenas corría un cuarto de hora y solo se iban sumando más ocasiones de peligro a favor del elenco trujillano, por lo que todo parecía indicar que el gol llegaría más temprano que tarde para los comandados por 'Chemo'. Quizá se esperaba que se cumpla aquel popular dicho que reza que tanto va el cántaro al agua hasta que se rompe, pero no fue así.

Bastó una distracción defensiva poeta para que la historia tomara un giro inesperado, al menos hasta aquel momento. Una conexión fallida de Sebastián Cavero con Damián Ísmodes fue interceptada a medias por Jersson Vásquez, quien de cabeza -en lugar de despejar- dejó botando el balón en el área para que 'Damichón' se avivara y aprovechara el despiste, oportunidad que le permitió convertir mediante un derechazo en primera.

Cavero en la lucha con Garcés. El juvenil cedido por Alianza Lima a Alianza Universidad viene teniendo continuidad en el arranque de año. (Foto: Prensa FPF) 

Después de ello, el cuadro de Ronny Revollar se armó de coraje y quiso dar ese segundo golpe sobre la mesa que extendiera la diferencia, mas no lo logró. Fue Reimond Manco quien se adentró en área rival, pero fue derribado por Renzo Garcés. Fue un claro penal, pues el defensor primero tumbó al exjotita y luego tocó el balón, pero Kevin Ortega determinó que no había pasado nada. Para cerrar la primera mitad, Yorleys Mena probó un remate de media vuelta tras una acción individual, pero el balón se fue lejos a pesar de su esmerado intento.

La segunda mitad fue un concierto de los poetas, quienes siguieron su mismo libreto de seguir atosigando a su contrincante. El ingreso de Luiz Da Silva como extremo izquierdo hizo que Mena ocupara el puesto casi de lateral volante por derecha, ya que Erick Morillo era quien había abandonado el campo. Ello podría entenderse como un craso error de Del Solar, pues alejó al colombiano del arco y le encargó una tarea más sacrificada.

Por su parte, Revollar entendió que el complemento le pedía reorganizarse al medio y cerrarse más, por lo que optó por el ingreso de Óscar Vílchez por un desgastado Manco para compactarse. Los cambios ofensivos en filas poetas sumaron a Víctor Cedrón y Sebastián Pineau para ganar mayor peso en ataque, pero no fue suficiente. Las ocasiones generadas iban todas a manos de un Diego Morales que estuvo prístino en el arco huanuqueño y atajó de todo, hasta una chalaca improvisada de 'Beto' da Silva, quien estuvo bastante participativo, aunque sin suerte.

Como tantas veces, Morales se elevó por encima de todos y fue garantía en el marco poeta. (Foto: Prensa FPF)  

Sonará redundante, pero que un portero con el liderazgo de Morales brinde seguridad ante un equipo con una potencia ofensiva importante como Vallejo hace crecer en moral a todos los compañeros, y esto se observó en el Alejandro Villanueva. El capitán contagió tranquilidad al resto, quienes se encargaban de cortar los circuitos poetas o al menos de dificultarles el franco remate. Incluso, aún si se escapaba algún disparo, el argentino respondía y apagaba el incendio en portería. Todo ello, claro está, encajado en un modelo defensivo que tenía hasta al mismo Renato Espinosa -reemplazante de Carlos Neumann- en su propio lado del campo para tratar de aglomerar lo más posible al equipo.

Puede que a algunos no les agrade la defensa a ultranza, pero la efectividad azulgrana -sin lugar a dudas- es de admirar, ya que su único remate al arco fue gol. Después de conseguida la ventaja, cedió terreno a voluntad a un elenco poeta que -a su vez- fue cediendo cada vez más ante la frustración de no poder anotar, a pesar de dominar el juego a placer. Seguramente, hay quienes discutirán los recursos utilizados; pero el hecho es que, gracias a su efectividad, Alianza Universidad consiguió su primer triunfo y su primer gol en la historia ante la Vallejo; y quizá sí termine siendo irónico que, en uno de los encuentros que más sufrieron en su historial contra los poetas, hayan ganado con tan poca producción ofensiva, y -sobre todo- sin esa tan mentada “superioridad” de la que ahora tanto se habla en el fútbol, la cual algunos valoran más incluso a merced del resultado conseguido.

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