Cristal - Real Garcilaso: De qué planeta celeste viniste
En el mejor partido del año, Cristal superó 5-2 a Real Garcilaso y tomó el primer lugar de la Serie Impar a tres fechas del final. Ávila volvió a marcar un hat trick y Chiroque anotó un gol de antología en una inolvidable tarde para la hinchada rimense.
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El capo: Triple espada
Írven Ávila marcó tres goles en un partido que era determinante para los intereses de su equipo. El delantero cervecero anotó tras una jugada en la que no logró conectar en primera instancia. Luego, para coronar un gran juego, vinieron los goles de cabeza y de penal. A esto hay que sumarle que se mostró bastante movedizo en ataque, siendo un dolor de cabeza para los centrales del cuadro cusqueño.
La clave: Mochila menos pesada
Cristal necesitaba ganar este partido, y el primer gol no le pudo haber caído mejor. Los celestes abrieron el marcador a los 9’ gracias a un tanto de Marcio Valverde, quien de penal venció la resistencia de Diego Carranza. El gol le quitó una enorme carga de encima al cuadro celeste, que pudo jugar mucho más tranquilo el resto del partido.
La joyita: Chiroquedona
El año pasado, en el Cusco, ya había marcado un tanto similar con Aurich ante Cienciano, y esta temporada no se quiso quedar atrás. Willian Chiroque marcó el que puede terminar convirtiéndose en el gol del año. Juniors Ross arrancó desde campo propio con una corrida espectacular que le sirvió para dejar atrás a sus rivales. El ex Bolognesi cedió la pelota para Chiroque, quien con una serie de amagues se sacó en espacio reducido hasta a tres jugadores que intentaban quitarle el balón, en la que los argentinos categorizarían como una jugada “maradoniana”. Cuando lo logró, quedó solo frente al arco y definió a placer con la zurda, su pierna menos hábil. Un atisbo de genialidad que hizo delirar al Gallardo.
El jugadón: De lo poco que tuvo
En el minuto 55, Alfredo Ramúa efectuó una gran jugada luego de amagar constantemente a quienes fueron a su marca. El mediocampista argentino logró esquivarlos para cederle el balón a Víctor Ferreira, quien remató por encima del arco de Diego Penny y se perdió el que en ese momento habría sido el empate garcilasiano.
El duelo: Por arriba y por abajo
Írven Ávila sostuvo un interesante duelo con el paraguayo Rolando Bogado, quien no pudo detener los reiterados ataques del delantero cervecero. Esto se pudo apreciar en el segundo gol del huanuqueño, en el que le ganó por arriba al guaraní para cambiarle el palo a Carranza y marcar el transitorio 3-1.
El cambiazo: A toda velocidad
A diferencia de otros partidos, esta vez Willian Chiroque sí se mostró determinante en el juego de Cristal. Ingresó en el inicio del segundo tiempo y marcó diferencias desde que tocó el balón. Con su característica velocidad creó peligro de forma constante en el área de Real Garcilaso. A su golazo hay que sumarle el penal que le hizo Diego Carranza, tras una nueva sucesión de amagues que amenazaba terminar en otro tanto de categoría.
La cancha: Marco acorde
Gran marco de público en el Alberto Gallardo. Oficialmente 9,974 personas se dieron cita para presenciar este encuentro que resultaba determinante para que Cristal tomara el primer lugar en su Serie. La gente se dedicó a alentar, aunque hay que criticar duramente a quienes se dedicaron a emitir ruidos racistas en contra de Luis Guadalupe: a esos hay que expectorarlos de las tribunas de todos los estadios del país.
Kazuki Ito: De cal y arena
Manuel Garay y su cuarteta empezaron con el pie izquierdo al cobrar un penal inexistente de Guadalupe en contra de Írven Ávila, que derivó en el primer tanto de la tarde. En la jugada, el árbitro central se encontraba tapado, y cobró al no haber una buena comunicación con sus asistentes, quienes sí debieron estar atentos. Luego Garay se recuperó y pitó correctamente los otros dos penales.
Fotos: Miguel Koo Vargas y Johann Begazo / DeChalaca.com
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Y sobre los papelones... ubÃcate hermano. Garcilaso llegó a cuartos de final de la Libertadores en su debut, para sorpresa de propios y extraños, al punto que la prensa antiCristal le puso el mote de "Máquina Celeste" por jorobar... como si esa chapa ya no estuviera "reservada" desde los '90 por la institución rimenese. Garcilaso jugó con el trasero: al pelotazo y ratoneando feo, pero le pusieron "máquina celeste" igual. Es asÃ. Y el SC no pasó de la etapa de grupos debido a la mediocridad de los dirigentes que amputaron las bandas del equipo y mermaron su potencial...
Gran goleada en el Gallardo en partido clave y bisagra, como para que el Garcilaso se regrese al Cusco con el chip de la derrota en la cabeza y con la lección aprendida de que son claramente menos que el SC.
El gol de Chiroque fue un golazo, hasta que le salió su gol soñado con el Sporting. ParecÃa que lo ensayaba siempre, porque en un sinfÃn de ocasiones cuando tenÃa espacio para rematar, esperaba a los zagueros rivales para dribearlos, y la verdad que terminaba marcándose y enredándose solo. Era exasperante, un papelón. Pero ahora todos los defensas garcilasinos y el portero estaban en el lugar exacto y pudo gambetear una, dos, tres, cuatro veces como le gusta, y menos mal que el remate final fue acertado. Golazo necesario, porque el SC iba ganando por la mÃnima en un partido que no estaba cerrado...
Sobre el partido, y no es la primera vez que lo digo: el club cusqueño nunca debió contratar a guadalupe, un jugador limitado y lento, que mas que garantias, hace sonreir al rival por las ventajas que significa. El primer gol, penal inventado por el juez, pero tambien torpeza de guadalupe, pues estando cerca avila, fastidioso y criollo, cual alan garcia, lo indicado era despejar fuera ese balon, lateral y punto. Luego, en el tercer gol, guadalupe ademas de mover el cuerpo para que el centro llegue limpio, faltaba nomas que le sacara una fotografia a la jugada. Actuo como si fuera ataque de su equipo y no asi defensa. Y esas actitudes no son de ahora, sino de siempre.
Garcilaso hizo un buen partido, pero tuvo todas en contra; arbitros parcializados, jugadores propios que juegan para el rival, y delanteros erraticos. Lo bueno es que hay con que, solo falta un poco de fortuna y de imparcialidad y profesionalismo en los actores del partido.
Estos detalles ya saltan luego, porque ahorita, con la prensa parcializada y los arbitros que inclinann las canchas, nose nota, pero en cuanto empiece la libertadores y sudamericana, la realidad nos permite ver mejor. Ya sin arbitros complices, y sin prensa adulona, la cruda realidad se aprecia mejor y lo pobre del futbol peruano. Alli no hay avilas ni chiroques, pues los clubes no son domesticos sino de otros paises y muy a pesar mio, de mejor nivel.
