Composición fotográfica: Aldo Ramírez / DeChalaca.comLuego de confirmarse al estadio Monumental como sede de la final de la Copa Libertadores, ¿debería permitirse el ingreso de instrumentos musicales al recinto de Universitario?

 

    Jorge Frisancho | @wolfs_venom15
    Redactor

El martes 5 de noviembre Conmebol decidió trasladar la sede de la final de la Copa Libertadores entre River Plate y Flamengo a Lima debido a los acontecimientos sociales suscitados en las últimas tres semanas en Santiago de Chile. El máximo ente del fútbol sudamericano señaló que, debido a las buenas gestiones con el presidente Martín Vizcarra, así como con las principales autoridades nacionales, la capital del Perú cumplía con todos los requisitos necesarios para llevar a cabo este evento. En un año en el que se perdieron las localías del Mundial Sub-17 y de la final de la Copa Sudamericana, esta noticia ha permitido que el Perú pueda "lavarse la cara" ante los ojos del mundo debido a lo anteriormente señalado.

Además de que este evento puede ser una gran vitrina para mostrar lo mejor de la capital y demostrar que Lima está lista para albergar eventos trascendentales -tal como sucedió con los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos entre los meses de julio y agosto-, este partido podría de una vez por todas desterrar uno de los mayores mitos que han surgido en los últimos años: la prohibición del ingreso de instrumentos a los estadios debido a que "incitan" a la violencia. Es importante precisar que esto surgió a partir de la promulgación de la Ley N° 30037, cuyo artículo N.° 19 señala todas las prohibiciones para los espectadores y organizadores de espectáculos deportivos, en tanto permite conceder algunas excepciones siempre que se cuente con los permisos correspondientes. De esta manera, las autoridades optaron por prohibir de manera determinante el ingreso de todo tipo de instrumento musical para cualquier partido de fútbol que se lleve a cabo en Lima.

De más está decir que es una costumbre en toda Sudamérica que las principales barras de los equipos de fútbol alienten con cánticos acompañados de bombos, platillos, tarolas o algún instrumento que se complemente de manera adecuada a la letra que se esté entonando. Por ello, surgió la interrogante de si, dado que el partido entre River Plate y Flamengo es un evento internacional, la Policía Nacional del Perú y el Ministerio del Interior serían más flexibles y permitirían que las barras de los dos equipos mencionados puedan estar en sus respectivas tribunas con alguno de los instrumentos mencionados anteriormente. Sin embargo, no pasó mucho tiempo para que algunas voces autorizadas insistan en la prohibición de dicho ingreso, por más que se trate de un evento que involucra a dos equipos que no son del país.

El Monumental para un clásico con banderolas, contómetros y demás parafernalia en la tribuna, allá por 2013. Como siempre debió ser. (Foto: archivo DeChalaca.com) 

En este sentido, cabe preguntarse si esta no es, más bien, la oportunidad para demostrar que los asiduos consumidores del producto fútbol en el país -léase frecuentes asistentes a los estadios de fútbol- son personas civilizadas y que los instrumentos musicales no tendrán otra función que no sea la de acompañar los principales cánticos de apoyos a sus respectivos equipos durante los 90’ de juego. Con ello, las autoridades podrán ser más flexibles y permitirán que para los partidos del torneo local esta prohibición quede en la historia y se vuelva a la fiesta que revestia ir a un estadio de manera previa a la promulgación de la ley señalada.

Es importante precisar que la Conmebol también fija una serie de prohibiciones que se complementan con las leyes propias del país donde se disputan los partidos de Copa Libertadores y Copa Sudamericana; sin embargo, el máximo ente del fútbol sudamericano no toca el tema de los instrumentos musicales dentro de esa lista. De esta forma, se espera que, con el paso de los días, las autoridades nacionales cambien de parecer y sean más flexibles, en aras de promover una fiesta deportiva dentro del estadio Monumental.

De ese modo, si se logra que la final de la Copa Libertadores se lleve a cabo sin mayores inconvenientes tomando en cuenta el uso de instrumentos por parte de los seguidores de River Plate y Flamengo, se sentará un precedente de que es absurdo que se mantenga una prohibición que opaca el ambiente que se vive en los estadios. ¡Qué mejor manera de que la final de la Copa Libertadores tenga todos los ingredientes necesarios para que sea un evento inolvidable en la historia del fútbol nacional! La pelota está en la cancha de las autoridades.

Composición fotográfica: Aldo Ramírez / DeChalaca.com
Foto: archivo DeChalaca.com


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