Otra macana
El fútbol argentino tuvo la oportunidad de erradicar de una buena vez los promedios, pero decidió seguir yendo como el cangrejo y volver al mismo sistema de 1991. Estamos frente a otra polémica decisión de la AFA.
En el fútbol argentino no existe la democracia en la práctica, y no porque se conviva en una dictadura; no existe porque todos los votantes le temen a Julio Grondona, o por lo menos le deben algo. Ahora la Asociación del Fútbol Argentino decidió cambiar su sistema por uno vigente hasta 1991 y que fue descartado pues se comprobó su ineficacia.
Jugate conmigo
Así, luego de haberse especulado durante meses con un torneo de 38 clubes -que felizmente no se materializó-, las medidas tomadas básicamente son las siguientes:
Ya no serán Apertura y Clausura: Ahora pasarán a llamarse torneo Incial y Final aunque mantendrán el mismo formato. ¿Se habrá querido erradicar con esto todo recuerdo de las épocas de Torneos y Competencias? Inentendible, por lo demás.
Ahora solo habrá un campeón por año: Tal como se hacía en el Perú hasta 2008, el campeón del primer torneo y el campeón del segundo disputarán un partido a final para definir al único campeón por año. Esta medida siempre es cuestionable pues estimula al equipo que ya está clasificado a la final a bajar los brazos en el segundo semestre pues tiene medio título asegurado.
Seguirá habiendo promedio: Quizá las dos primeras características no parezcan del todo malas, pero ahora viene lo difícil: la AFA decidió mantener los promedios para el descenso. Solo cambió que ahora bajarán los tres con peores promedios, a diferencia de los que se hacía en el sistema anterior, en el que los dos últimos descendían directamente y los dos siguientes con peor promedio jugaban la Promoción.
¿Pero qué hacés?
Estos cambios han traído una serie de problemas y cuestionamientos a la AFA, ya que los argentinos no conciben que un club pueda campeonar, y a la semana, durante la final, pueda perder el título. Además, un equipo puede ser finalista y a la vez luchar por el descenso. En fin, todos estos son temas que en el Perú ya vivimos -recordar el caso Bolognesi en 2007, campeón del Clausura a una semana de salvarse de la baja, o de San Martín en 2008, que debía perder para campeonar- y que actualmente se viven en Venezuela. En Argentina tratan de diferenciarse, pero cada vez eligen peores formas.
No es ningún secreto, por otra parte, que en Argentina se tiene enfrente a un gobierno populista, que no permitirá que otro equipo grande se vaya a la B como le ocurrió a River, pues, tal y como lo hacía Juan Domingo Perón, Cristina Fernández de Kirchner tiene una política ligada a la llamada "Patria Deportista", sobre todo con el fútbol, por las masas que mueve. Como referencia, Perón era el principal patrocinador de Juan Manuel Fangio en su mejor momento en la F1, y eso le sirvió para ganarse aun más el respeto del pueblo argentino.
Esta es, pues, una manera archiconsabida de tener a la gente entretenida y concentrada en otras cosas, sin reclamar. Este es un medio deportivo, por lo que no ahondaremos en detalles políticos, pero este nuevo sistema blinda una vez más a los grandes de Argentina y -mediante los malditos promedios- los ayuda a permanecer en la máxima división para ahorrar problemas, además de generar barullo mediático con una final. Grondona lo sabe, y a Grondona le gustan los favores.
Composición fotográfica: Roberto Gando / DeChalaca.com
Fotos: Reuters, prensa Club Atlético Tigre, diario El Sol de Quilmes
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En el 2009 con Boys y Municipal en Segunda habÃa un interés entre la gente y se veÃa público en los estadios. Ahora si no es por dechalaca.com u otras páginas es imposible saber lo que pasa en la segunda.
Los argentinos asà como en sociedad y economÃa, en el fútbol van de mal en peor.