Yo no sé mañana
Tras su último cotejo en el Descentralizado, Universitario quedó mal parado en la clasificación y ve de lejos el sueño del bicampeonato. ¿A qué debe apuntar el elenco crema en lo que queda del año?
A dos meses para la finalización del Descentralizado (exactamente a diez fechas), el vigente monarca del torneo se ha quedado con escasas posibilidades reales (porque matemáticas aún las tiene) de poder lograr el ansiado bicampeonato. Si se hace un poco memoria, desde 2005 la ‘U’ no había pasado las últimas fechas con los sueños de gloria prácticamente truncados. En 2006 definió el Clausura con Cienciano, perdiendo la posibilidad de llegar a la final. Posteriormente, en 2007, luchó hasta la última jornada para instalarse en la instancia definitiva, pero esto no sucedió. Para el año siguiente, en cambio, obtuvo el Apertura, pero su irregularidad en la segunda parte del año lo dejó fuera de los siete primeros puestos y no pudo disputar la final. Finalmente, para 2009, el equipo logró consagrarse campeón tras disputar la final con Alianza Lima, acabando con una sequía de nueve años.
¿Como si fuera ayer?
La actualidad de Universitario, por el contrario, se asemeja a los campeonatos de 2002 y 2003. En el primero, pecó de confiado luego de obtener el Apertura, y los cambios en la conducción técnica -y la salida de ‘Chemo’ como jugador, un caudillo por excelencia quiérase o no aceptarlo- lo terminó dejando fuera de los siete primeros lugares y, con ello, sin posibilidad de disputar el campeonato ante Sporting Cristal. Al año siguiente, por tienda merengue se repitió una película similar, y es que se pasearon hasta cinco técnicos (Ricardo Ortiz, Javier Chirinos, Ramón Quiroga, Roberto Martínez y Juan José Ore), sin trazarse un objetivo claro. En detrimento de esto, quedaron sin poder dar más pelea luego de la huelga de la agremiación que concluyó el campeonato de manera abrupta.
Ahora, con la llegada de José Guillermo del Solar, la ‘U’ buscó darle vuelta a un año que le ha dado la espalda. Desde la abrupta salida de Juan Reynoso, pasando por los líos dirigenciales y la falta de pagos a los jugadores, la corta presencia de Salvador Capitano y los irregulares resultados a lo largo de todo 2010, los cremas arribaron a octubre con dificultades serias para alcanzar la final y algo distantes de cualquiera de los cupos a la Libertadores. Su principal rival para esto último es Alianza Lima, que también tiene pequeñas chances de pelear por el título y que solo podría apuntar al último cupo para la principal competición continental. En este instante, la distancia entre ambos es de siete puntos, pero dada la irregularidad estudiantil, cuesta creer que le pueda dar caza. Aparte de ello, sino es la oncena íntima, en la otra serie se encuentran hasta tres equipos dispuestos a quedarse con ese cupo y, lamentablemente para los intereses merengues, todos le llevan una ventaja considerable.
Volver al futuro
Por tal motivo, el principal objetivo que debería plantearse en este momento la ‘U’ es asegurarse la participación a la Copa Sudamericana. Actualmente, los cremas ocupan el tercer casillero que otorga clasificación a dicho torneo, pero Cristal no está a más que cinco puntos de distancia y podría terminar amargándole la fiesta si es que no prioriza su presencia en “la otra mitad de la gloria”. De ahí en más, los dirigidos por ‘Chemo’ deberían afilar bien su artillería para el próximo año y ver el lado positivo de, eventualmente, no tomar parte de la Libertadores. Y es que teniendo desocupado el primer semestre, bien podría emular a lo hecho por la San Martín este año y priorizar la primera parte del torneo obteniendo la mayor cantidad de puntos posibles.
De más está decir que, para que todo ello suceda, en Ate tiene que mantenerse la estabilidad institucional para que los jugadores solo tengan en la cabeza entrenar y jugar. Para ello, obviamente, también será positiva la confianza que se le dé a ‘Chemo’. Se entiende que su llegada ha sido pensada para un trabajo a largo plazo y que tendrá todas las facilidades para armar un equipo a su medida, pero siempre bajo las posibilidades del club. En esa línea, rumores como la llegada de Álvaro Recoba, como se barajó hace algunas semanas, no pasan de ser un sinsentido. Y es que los refuerzos bien pueden llegar de afuera, pero en el torneo hay opciones más realistas que podrían sumar al actual plantel. A la ‘U’ le queda, entonces, completar el año de la mejor manera posible, sin obsesionarse por la Libertadores -si se da, bienvenido sea-, y, estratégicamente, prepararse para que al próximo año, por esta época, se encuentre entonado y con hartas posibilidades de pelear por un título que, por estos días, aún le pertenece.
Recorte: diario El Líbero
Foto: cristal.com.pe
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