Un diamante para cada ocasión
Unión Comercio tiene un patrón de juego en cada encuentro, pero no lo repite en el que sigue. Es decir, cada fin de semana emplea una táctica diferente que se ajusta a lo que pide el partido del día. De hecho, esto es lo óptimo porque no es igual jugar en Matute contra Alianza que en el Garcilaso contra Cienciano. Pero también es cierto que es lo más difícil de lograr pues requiere el aprendizaje, por parte de los jugadores, de una estrategia nueva cada semana. No se logra la especialización tan valorada en el fútbol actual (y en toda industria, en realidad) pero esto otro funciona cuando se tienen jugadores “esponja” que absorben las indicaciones como debe ser.
También hay que tener un técnico capaz y valiente. Inteligente y atrevido. No se trata de buscar que jugar bonito, si no jugar como corresponde al rival. Hace un par de semanas, Uribe dispuso un planteamiento tal que complicó mucho a Alianza en su cancha por su vocación ofensiva. El exceso de osadía lo hizo mandar a los suyos por la victoria y se quedó sin nada al final. Pero él creía que el triunfo era posible, apostó y perdió, pero es aplaudible el coraje expuesto.
Este domingo le tocó subir al Cusco y le puso un medio campo “gordísimo” (3-4-2-1) como oposición a Cienciano. El ‘Papá’ acostumbrado a generar varias situaciones de gol por partido, esta vez apenas si complicó a Pretel. Al no contar, los Rojos, con jugadores “por fuera”, quedaron anulados con tantísima gente en el tercio de la cancha que ni siquiera les dejaban patear de lejos. ¿Me pregunta por el ataque de los de Nueva Cajamarca? Se apostó a la contra, pero no resultó. Otro día Sinisterra estará más lúcido y podrá concretar una de las dos que se le presenten y habrá un resultado aún mejor. Claro, eso sí Uribe no nos vuelve a sorprender con una estrategia nueva.
Foto: José Carlos Angulo
