Tres no son multitud (ni goles)
El planteamiento de Julio Zamora en el Garcilaso era claro: apelar al contragolpe. De esta manera, envió al campo una línea defensiva conformada por cuatro jugadores, una línea de tres volantes y un ataque conformado por Di Cosmo, Valdez y Meza Cuadra, con el cual buscaba jugar a las espaldas de la defensa de un Real Garcilaso que como local tiene la costumbre de encontrar el primer gol rápidamente y luego manejar el partido.
Si bien el marcador de 2-0 parecería indicar un partido de mero trámite para el conjunto cusqueño, esto no fue así. En el primer tiempo, luego de un constante asedio del equipo local durante los primeros 25’, Melgar dispuso de hasta tres ocasiones claras de gol que no fueron aprovechadas por sus atacantes, fuera por centros mal ejecutados, disparos desviados o imprecisiones en el último pase. En este tipo de partidos no es viable desperdiciar las pocas oportunidades que se presentan, pues Real Garcilaso puede encontrar una jugada clara y anotar, tal como sucedió con el penal bien definido por Andy Pando.
Para el segundo tiempo, Zamora hizo una modificación: sacó a Valdez y envió al campo a Carboni, con lo que pasó a jugar con dos delanteros y pobló la segunda línea de volantes para que Hilden Salas pudiera encontrar un socio en la elaboración de las jugadas. Sin embargo, el gol a través del penal cobrado a favor de Real Garcilaso trastocó sus planes y el equipo dominó fue incapaz de conseguir el empate. Acaso por ello, el técnico rojinegro acabó muy ofuscado, lo que derivó además en su expulsión por parte del árbitro Diego Haro debido a sus constantes quejas.
Foto: José Carlos Angulo

que tu hinchada quiere festejar
Garcilaso hay que perforar
que los logros estan por llegar
Emocionado estoy
con la gran celeste
al Real lo aliento, no se opone nada
Soy del Garcilaso, le hago temblar
GARCILASO PARA TODO EL MUNDO!!!"!