Objetivo blanquiazul
Unión Comercio logró lo que nadie había podido hacer ante: derrotó como local, siendo un equipo de la selva no iquiteño, a Alianza Lima. Fuera de sus visitas a CNI, los blanquiazules nunca habían sido derrotados en el oriente peruano. Estos tres puntos mantienen a los del Alto Mayo con posibilidades reales de pelear una clasificación a la Copa Sudamericana, justamente lo mismo que fue a pelear Alianza en Moyobamba. Luego de poner cierta distancia entre sus peores momentos en el año y su actualidad, Alianza agarró confianza y dejó de pensar en descensos para mirar las clasificaciones internacionales.
Si está mal o no, a esta altura del año no es fácil de decir. En abril sonaba a absurdo que piense en algo distinto a mantener la categoría, pero con tres cuartas partes del Descentralizado disputadas, tal vez ya no sea desproporcionado. Pero ocurre que perdió luego de seis partidos en los que obtuvo tres triunfos y tres empates. Perdió ante un equipo de Mario Viera, un técnico que nunca antes le había podido ganar; le anotó dos veces Germán Pacheco, hijo de Óscar, quien también le anotó en 1996 cuando jugaba por Melgar; y, se cortó la racha de Miguel Mostto.
Muchas contras tuvo este partido para Alianza, pero la más sensible es que lo aleja de los puestos de Sudamericana. Nada de pensar en descensos, eso ya no es tema victoriano. Alianza tiene equipo y tiene goleador para poner la cabeza en algo más grande.
Foto: Emilio Ruiz
