La Liga y las migas
La Liga española está en boca de todos. No solo porque tiene a dos de los mejores equipos del mundo, sino porque está en crisis. La Liga pasa por uno de sus peores momentos y, por lo pronto, no da indicios de mejora.
Desde el inicio del siglo XXI, la Liga de España ha ido ganando poder entre los equipos más fuertes, que todos conocemos, pero ello solo ha logrado que la brecha que existe con los equipos restantes se amplíe, generando una disparidad que le ha restado atractivo a un torneo que siempre se alzó entre los más importantes de Europa. Hoy por hoy, la Liga es un campeonato predecible, que adolece de competitividad. Barcelona y Real Madrid han monopolizado el poder futbolístico en España y la sombra que le podían hacer equipos como Valencia, Athletic Club y Atlético de Madrid -que este año sí se codea con los grandes- se ha ido desmoronando. La diferencia entre las dos potencias y el resto ha provocado que una pelea digna e interesante sea imposible.
La situación es delicada y la falta de interés se ha visto trasladada a la asistencia de aficionados a los estadios. Según revelan los números de la temporada pasada, la media de ocupación total de los estadios viene cayendo y ha situado al torneo español en el quinto puesto a nivel mundial, con un promedio de 83% que tiene tendencia a la baja. En otras palabras, la Liga ha dejado de atraer a su público y se sitúa por debajo de torneos como la Major League Soccer de Estados Unidos, país en el que el fútbol no es sino el quinto deporte más popular. Esto, por supuesto, no se ha traducido en un problema para los dos de arriba, lo cual no hace más que comprobar el creciente problema que afronta la Liga: Barcelona tiene una media de 72 mil asistentes y Real Madrid una de 69 mil.
La disparidad futbolística es, tal vez, el factor principal que ha conducido a la caída en las asistencias. Sin embargo, emergen distintos factores que coadyuvan a la pérdida de interés del hincha. A diferencia de países como Alemania o Inglaterra, en España los derechos televisivos no se negocian en bloque entre los equipos, sino que los equipos lo realizan de acuerdo a su propio poderío, generando una notoria disparidad en los costos por derechos de transmisión de sus partidos; estos costos son transferidos al aficionado.
La crisis económica que ha azotado a Europa y, con especial fuerza, a España, no ha sido un factor ajeno. El costo de las entradas no ha disminuido de manera paralela a la situación económica de la mayoría de españoles ni al decrecimiento en la demanda de entradas para los partidos. El gasto en asistir a un estadio ha pasado a ser relegado por otros más importantes para los consumidores de fútbol y, si a ello no le siguen medidas por parte de los equipos para hacer más accesible el ingreso a los partidos, los números seguirán cayendo. Todo indica que, al fin y al cabo, se le está prestando mayor atención -indirectamente, claro está- al espectador televisivo y no al hincha de carne y hueso que se sienta en las gradas.
El fútbol español está perdiendo seguidores cada día por culpa de un criterio que solo favoreció a los equipos más poderosos y que parece que está empezando a jugarles a ellos también una mala pasada. Para quien escribe, amante del juego del Barcelona, seguir la Liga ya no tiene mucho sentido. Uno ve jugar a los azulgranas y sus demostraciones de buen fútbol son agradables -igual que las de Real Madrid-, pero el fútbol sin emoción no es fútbol. Incluso, una baja tan importante como la de Lionel Messi en el Barca no significa un problema para su equipo, que sigue jugando igual y goleando al rival que se le ponga al frente. El último que lo comprobó fue el Betis, que sufrió el poderío blaugrana pese a que el argentino se retiró lesionado. La Liga, está dicho, se ha convertido en un monopolio que ya no atrae ni divierte.
Composición fotográfica: Roberto Gando / DeChalaca.com
Fotos: EFE, AP
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Marco estas un poco desactualizado, tal vez vivas fuera del paÃs pero Universidad San Martin gano los torneos de 2007, 2008 y 2010.
Es fáctico que la crisis económica que cunde en España está afectando también al fútbol, hay clubes como el Málaga que ha sido sancionado por UEFA de no participar en competencias internacionales hasta que salde sus deudas, pero en nivel de juego siguen siendo los mejores, es mi humilde opinión. Yo dirÃa más bien que Alemania tiene la liga más desigual de todas, porque es ''el Bayern y 19 más'', ¿Borussia Dortmund?, es un equipo de moda, hace tres años eran un equipo de media tabla como casi siempre lo fue, el único grande de Alemania es el Bayern Munich y gana casi siempre la Bundesliga.
Aparte de tener a los mejores estadios del mundo, los hinchas son increiblemente apasionados, apoyan al 100% a sus equipos estén en la situación que estén, además, para los que no saben, todos los jugadores tiene que ser de selección o promesas mundiales (a excepción de los que son europeos) pero eso la hace mas atractiva. Ver un partido por el descenso es mejor que ver un partido por el tercer puesto de España, ver un Sunderland vs Southampton por ejemplo, con tremendos jugadores en ambos lados (En el Sunderland juega el mediocampista por izquierda de Italia, Emanuel Giacherini, esta Adam Johnson de la selección inglesa, en el Southampton esta el uruguayo Gaston Ramirez, Rickie Lambert que es el nuevo 9 de Inglaterra, está Dejan Lovren, uno de los centrales del futuro, asà como Victor Wanyama, además del 9 de la selección Italiana como lo es Pablo Daniel Osvaldo.) Y comparar un partido que parece de equipos desconocidos es mucho más pasional que ver un Betis vs Bilbao, es increible la diferencia de individualidades y la manera en la que se juega. Les recomiendo ver la Premier y se darán cuenta de lo que me refiero.
Además, alguien lÃneas arriba dijo que los chicos de España le ganan a cualquiera? Ps, por lo visto no ves fútbol, este año el Swansea le metió 3 al Valencia en Mestalla. ..
