La estrella solitaria
Perú no solo juega contra Chile este domingo: sobre todo, le preocupa enfrentar a Marcelo Bielsa, uno de los personajes más particulares del fútbol mundial hoy por hoy.
Para entender a Marcelo Bielsa Caldera (Rosario, 21 de julio de 1955) hay que estar un poco loco. Pero loco por el fútbol, como él.
Este domingo, Perú enfrenta en el Monumental no solamente a Chile, sino también a Bielsa y sus locuras. Es más: podría decirse que por el hecho de que él esté en el banco contrario, pasan muchos de los temores que en la previa inundan el ánimo del hincha peruano respecto de la posibilidad de perder en casa ante Chile por primera vez desde 1985; desde aquel gol de tiro libre de Aravena que casi nadie menor de 30 años puede recordar con fidelidad (acá el link para los masoquistas).
Acá, algunas proposiciones a manera de manual práctico para entender la lógica de un entrenador admirado por varios -quien escribe se incluye- y resistidísimo por muchos más. Un tipo que siempre roba páginas.
1. HAY TÉCNICOS QUE JUEGAN. Siempre se dice que los entrenadores son culpables en las derrotas y los jugadores, los protagonistas en el triunfo. Pero hay claras excepciones, como Mourinho, por ejemplo, que sin haber ganado los títulos del Manchester United roba mucha más atención cuando sus clubes ganan que Sir Alex Ferguson, por ejemplo. Bielsa es otro de esos casos, y no por hablador. ¿Tendrá que ambos hayan hecho protagonistas a equipos que eran chicos en contextos determinados, como Porto en la Champions o Newell's en la Libertadores? Lo cierto es que, a diferencia de lo común, cuando uno juega contra un equipo de Bielsa, nadie pregunta cómo se llama el técnico del rival: todos lo saben de antemano.
2. AL RIVAL HAY QUE CONOCERLO. Parte de la locura de Bielsa es la obsesión extrema por conocerlo todo antes de entrar a la cancha. En Vélez, cuando asumió en 1998, le descubrieron un cuadernito en el que tenía hasta el mínimo detalle de los chicos de todas las divisiones menores del club -por cuyas instalaciones jamás había pasado antes-: pesos, tallas, promedios... Para los que gustamos de la estadística y la data refinada, albricias: este 'Loco' es uno de los nuestros. Para el común de los hinchas, véanlo del lado amable: es un tipo que hace bien su chamba. Bielsa, por ejemplo, jamás declararía en conferencia de prensa que no conoce al plantel de su próximo rival -como cierto flamante director general de las selecciones nacionales que dijo que no conocía a El Salvador-.
3. EL MEJOR ATAQUE ES EL ATAQUE. En el 3-rombo-3 que el 'Loco' practica en sus equipos, la vocación ofensiva es plena. Los dos stoppers tienen salida; el volante ancla (lo que los argentinos llamarían 'El 5', y que en Chile es el ahora lesionado Arturo Vidal) es el que hace empezar a jugar al resto; los dos extremos -ojo con esto- son con frecuencia jugadores que supieron ser volantes (en este equipo, Alexis Sánchez y Mark González), aunque cumplen labores de ataque netas. Lectura: es gente maniática, como el técnico. Gente que sabe fungir en ciertos puestos pero que ejerce otras funciones para ahorrar tiempos y estar mentalizada en cumplir con lo que debe más allá de sus aptitudes naturales -algo que hasta hace no mucho le costaba duras críticas en Chile (ver video)-. Entender que para atacar mucho no hay que tener demasiados delanteros, por supuesto, no es apto para quienes se pasaron años cuestionando si Batistuta o Crespo debían jugar juntos.
4. EL '10' ES EL EQUIPO. Por lo mismo, hablar de conducción en los equipos de Bielsa está también mucho más allá de andar discutiendo si Riquelme debía ocupar un lugar en el Mundial 2002 -Maradona les ha pegado un portazo en la cara a todos los de esa onda resolviendo el tema en un tris tras-. En Chile hay un '10': se llama Matías Fernández y calidad le sobra. Pero el equipo no juega para él, ni él tiene toda la responsabilidad de cargar con el equipo. Es el enlace, sí; enganche, si se quiere forzar la figura. Pero no es de esos '10' antiguos a lo Marco Valencia que está para pegarles a los balones parados: es un tipo que juega al ritmo de los demás, que corre y marca como todos y que solo se diferencia porque cubre el tercer cuarto de cancha. Alguien que juega fútbol moderno.
5. EL BIELSISMO EXISTE. Y no porque lo diga el buen Mifflin Bermúdez, quien se autoproclamó "bielsista" hace algún tiempo pese a jugar con volante en cuadrado -a ver si este año en León de Huánuco se anima por el rombo-. Tampoco necesariamente porque el 'Tata' Martino, Javier Torrente o el buen Jorge Sampaoli, en su momento, la hayan hecho con sus respectivos equipos prolongando y proclamando una escuela. Sobre todo, existe porque en Argentina, donde menottistas y bilardistas quisieron proclamarse por sus respectivos lados dueños de cuanta propuesta táctica existiera, un 'Loco' abrió una tercera vía.
En un partido caliente como el del domingo, en un clásico de esos que por definición puede ganar cualquiera, un tipo con cabeza fría, inteligencia táctica, casi stalker del rival y obseso por el funcionamiento de su diseño, parte con ventaja. Y si de loco tiene más que la cara, puede meter miedo.
Foto: lanacion.com.ar
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