Kazuki Ito: Violencia nada sosa

Hasta que Henry Gambetta pitó el final del Cienciano - San Martín, el Descentralizado tenía rojas en todos sus partidos. No es casualidad: los jugadores no están ayudando a los árbitros. Pero estos también han tenido una jornada nefasta en algunos casos. Al final, cinco de los ocho encuentros tuvieron rojas, y tres de ellos, actuaciones para el olvido.
Freddy Arellanos (14) / Inti Gas 1 – León 2: El ya experimentado referí cumplió de manera acertada el encuentro designado en Ayacucho. Sancionó correctamente, amonestando a los que lo merecían sacando seis tarjetas amarillas y una tarjeta roja por doble cartulina a Leoncio Guevara, quien de modo irresponsable solo duró cuatro minutos en el campo. Las faltas innecesarias del ex Aurich y Melgar así lo merecieron.
Miguel Santiváñez (13) / Sporting Cristal 3 . FBC Melgar 1: Correcto el arbitraje de Santiváñez, pues pasó desapercibido como un árbitro debe hacerlo. Si bien expulsó a un jugador por equipo (Reyes en Cristal y el debutante Márquez en Melgar), no exageró tanto con las tarjetas y acertó en todos los goles. Expulsó correctamente también al asistente técnico mistiano Leonel Rocco, y vio bien que no hubo intención en el pisotón de Rotundo a Leiva, quien quedó lesionado tras la fuerte jugada.
Henry Gambetta (13) / Cienciano 1- San Martín 3: Cuando un equipo gana bien no tiene por qué preocuparse en si el arbitro influyó o no en el resultado. Los santos dieron cátedra a los locales, y Gambetta, en un partido con poca fricción, aprobó en el Cusco. Sacó un total de seis cartulinas amarillas, y el juego albo no tuvo polémica en las anotaciones del encuentro. Cienciano y Juvenal no se gastaron en ningún quejido.
Fernando Legario (12) / Total Chalaco 0 - César Vallejo 1: Harta candela en la presentación del equipo porteño en Huacho. Legario tuvo que aplicar mano dura mediante ocho amonestaciones y expulsando a un jugador por equipo. El más ofuscado del encuentro fue Wilmar Valencia, quien anduvo totalmente molesto por la rigurosidad del juez, y le estuvo reclamando durante todo el partido. Incluso al final se le acercó y al parecer le dijo palabras fuera de contexto que podrían acarrear una grave sanción para el DT. Algo exageradas sus palabras, pues la expulsión de Grabowski fue totalmente justa y si Total Chalaco perdió fue por el discreto partido de todas sus líneas.
Héctor Pacheco (12) / Juan Aurich 2 - Universitario 1: En un partido de alto riesgo, a Pacheco le faltó similitud entre su criterio de sanción. Orejuela estuvo incorrecto y agredió tanto a La Rosa como a Rivas sin que el juez sancionara. Tampoco amonestó a Rabanal, quien le dejó el chimpún a Chiroque, y estuvo corto de vista en un par de penales dudosos para el equipo crema. El primero de Álvarez podría pasar de largo pues no hubo intención, pero el segundo sobre el mismo Orejuela sí merecía la pena máxima. También falló en el segundo gol aurichista, pues nunca hubo falta de Galván, y más bien pudo haber dejado seguir el juego. Pacheco cobró el tiro libre, y Ciciliano liquidó el encuentro. Al final, coronó su irregular actuación con una absurda ley de compensación expulsando al panameño Tejada tras recibir un codazo de Galván, quien también recibió la roja. Con una amarilla a ‘Diente de Oro’ por provocación podría haber tenido más amistades en Chiclayo.
Víctor Hugo Rivera (10) / Alianza Lima 3 - Alianza Atlético 0: El árbitro FIFA desvirtuó el partido al principio del segundo tiempo al no cobrar una clara falta de Peixoto sobre Caicedo cerca del área. Si bien no fue penal, como algunos reclamaban, por el hecho de ser el último hombre, el zaguero íntimo debió haberse ido expulsado. Lo más curioso fue que Rivera, en "colaboración" con su asistente César Guillén cobró fuera de juego (¿?), para las quejas de Cardama. Al estratega churre no le cambió la mística y se fue expulsado -qué raro- y vio desde la tribuna como su equipo sucumbió goleado. Por lo demás, el arequipeño estuvo correcto, y acertó en la falta que generó el segundo gol de Alianza, la cual fue cometida por Martínez fuera del área y no dentro.
Albert Caballero (09) / José Gálvez 2 – Sport Huancayo 1: La dudosa amarilla a Mesarina provocó un gesto incómodo de Julio César Uribe, que Caballero interpretó absurdamente como una ofensa, por lo que el técnico galvista vio la roja. Indignado, el 'Diamante' se metió a la cancha a increpar al juez principal, cosa que con sus antecedentes lo ayudó poco. Poca fricción y poco fútbol en Chimbote, por lo demás, pero el árbitro pagó cara su equivocación.
Federico Sosa (04) / CNI 3 – Sport Boys 1: El 20 de febrero no será un buen día para recordar en la vida de Federico Sosa. Si bien fue la fecha de su debut en primera tuvo el dudoso honor de haber recibido el peor puntaje en la historia de una terna arbitral por los redactores de DeChalaca.com. Los nervios y la mala intención de los jugadores le jugaron una mala pasada al novel juez. Nunca pudo controlar el partido y quiso dar presencia con tarjetas tanto amarillas como rojas. No tuvo parcialidad en los cobros: si expulsó a Guevara por un patadón a Zamora, ¿por qué no hizo lo mismo con Castillo cuando trabó a Rossel? ¿O con Carlos Elías, quien soltó un manotazo descarado al ‘Chato’ Barrena? Personalidad fue lo que le faltó a Sosa: parecía que los jugadores dirigían el encuentro. Con un inexplicable expulsado más -Vázquez- y un penal no cobrado para Boys, se llegó al descanso. Seguramente reconvenido vía celular, Sosa paró la mano, pero terminó siendo muy pasivo, pues las faltas siguieron a alto ritmo. Vergara pagó caro su codazo frente a Mariño y fue -en uno de los contados aciertos- el tercer expulsado de la noche iquiteña. Sosa ya tiene antecedentes nefastos en partidos de Segunda (en un IDUNSA - Águila se salvó por poco de ser agredido); con un tiempo en la congeladora deberá reflexionar y, quizá, volver con más personalidad y confianza.
Foto: Fernando Herrera

Con negrita las que perjudicó al Aurich, con subrayada las que perjudicó a la U.
(4-2)
En consecuencia, ¿a quién perjudicó más?
Al Aurich
decisión errada y hasta cierto punto cobarde en todos los casos
- offside no era
- falta en ataque, menos
- si considera que el delantero fingió, era amarilla para el delantero
- si considera que no fingió, era falta, sea dentro o fuera del área, o sea tiro libre o penal
- en caso de ser falta era roja para peixoto
Al menos creo yo que cuando el árbitro tenga duda, simplemente no cobre nada, ni ficción del delantero ni falta del defensor.
No obstante, en el caso concreto que te refieres al partido de alianza vs. aasullana; fue una falta ENOOORME contra el "9" sullanense.
Para mà fue fuera del área, pero igual eso ameritaba expulsión a Peixoto