Kazuki Ito: ¿Estarán con calor?
Alberto Lozano (16) / León 0 - Cobresol 1 / 8 TA - 1 TR
El partido disputado en la ciudad de Huánuco no conllevó mayor problema para la terna arbitral. En la expulsión de Miguel Llanos, el árbitro Lozano no se hizo problemas con las dos amarillas mostradas porque ambas fueron bien merecidas a pesar de los reclamos del lateral moqueguano. Las demás acciones que tuvieron como consecuencia la amonestación se produjeron como hechos normales dentro de un partido. Sin embargo, hubo una jugada que nadie reclamó dentro del terreno de juego, pero que debió ser sancionada. El hecho fue que Juan Flores (portero del León) tenía el balón en sus manos y, al intentar lanzarlo hacia sus delanteros, se le escapó de las manos cayendo al gramado tras lo cual lo volvió a coger. Esa acción es una falta técnica que debió cobrarse como tiro indirecto a favor de Cobresol pero que, seguramente por desconocimiento, no fue pitada.
Albert Caballero (16) / Sport Huancayo 2 - Inti Gas 2 / 7 TA - 2 TR
Acertado arbitraje el de Caballero, a pesar que los jugadores de ambos equipos no colaboraron desde los primeros minutos. Durante el primer tiempo supo controlar las constantes faltas del equipo visitante mostrando acertadas amarillas, lo cual dio como resultado un juego menos friccionado de Inti Gas en la parte complementaria. Las dos rojas que mostró son inobjetables: la agresión de Jorge Lozada fue tan burda que no merecía reclamo, y las constantes protestas del colombiano Annier Figueroa en los últimos minutos colmarían la paciencia de cualquiera, lo que le valió la segunda amarilla y consiguiente expulsión. Y el penal cobrado antes del descanso tampoco merece mayor comentario porque fue muy claro.
Víctor Hugo Carrillo (15) / San Martín 2 - César Vallejo 1 / 3 TA
Partido tranquilo el disputado en el estadio San Martín de Porres, donde Víctor Hugo Carrillo no tuvo problemas mostrando tan solo tres amarillas, siendo el encuentro con menos amonestados de la fecha. La única jugada donde surgió alguna discusión por parte de los jugadores de la César Vallejo, fue en el segundo gol de la San Martín anotado por Manuel Tejada, pero el delantero albo llegó a partir por detrás de la última línea vallejiana en el comienzo de la acción.
Miguel Santiváñez (15) / Alianza Lima 1 - Alianza Atlético 0 / 6 TA
La atención en el Alejandro Villanueva victoriano estuvo depositada en ver si su equipo podía repetir la actuación del pasado fin de semana, y por suerte para el fútbol la labor de Santiváñez fue correcta, por lo que la imagen que quedó del partido fue la del gol de André Carrillo.
Georges Buckley (14) / Sport Boys 0 - Sporting Cristal 1 / 6 TA - 2 TR
En el Callao, Georges Buckley reapareció dirigiendo en un partido que asomaba como el mejor de la fecha. Su accionar durante el encuentro fue bueno, aplicando correctamente la roja directa a Minzum Quina por clara agresión del lateral celeste a Pedro Román. En la expulsión de Mario Gómez, se podría discutir el hecho de si el volante de Sport Boys tuvo intención o no de agredir a Diego Chávarri en la jugada donde ambos se barrieron por controlar el balón, pero la acción se presta a la apreciación que cada uno pueda tener igual a como se dió en la maniobra donde Miguel Ximénez aparentemente simuló una falta en el área cuando forzó una jugada con el arquero Diego Carranza, lo que le pudo costar la expulsión por doble amonestación. Y cuando todo indicaba que la terna arbitral se iba a ir del terreno de juego sin muchos reclamos, llegó la jugada más discutida del partido.
A los 91'+, Diego Chávarri cedió el balón a Roberto Palacios que entraba en velocidad por el medio; este intentó superar a dos defensas rosados girando sobre su eje, pero con la mala fortuna que el esférico se enredó en sus pies para -de rebote- salir directo a la posición donde se encontraba Luis Escalada en posición de gol (que finalmente llegó a concretar). El problema surgió en el hecho que el delantero argentino se encontraba al menos dos metros por delante de la posición del último hombre porteño, por lo que el juez de línea Jorge Hurtado debió haber levantado su banderín marcando el offside. Esto no sucedió, y la jugada acabó señalándose como gol a pesar de los reclamos. Resulta increíble que el primer asistente de la terna dirigida por Buckley no haya podido notar la distancia que separaba al autor del gol de los demás jugadores, porque tuvo tiempo para hacerlo ya que el jugador de Cristal venía estando en esa posición desde antes que la pelota llegara a los pies del 'Chorrillano'. Al final, el juez principal terminó pagando una culpa por un error que no le correspondía.
Julio Álvarez (13) / Juan Aurich 3 - Unión Comercio 2 / 4 TA
El último cotejo de la segunda fecha fue dirigido por Julio Álvarez, quien no tuvo mayores problemas con las tarjetas porque los jugadores mostraron predisposición a jugar al fútbol. Pero parece que la terna arbitral en Chiclayo no se quiso quedar atrás, y manchó su actuación con un gol mal anulado a Ricardo Ciciliano por un inexistente offside, motivo por el cual su puntaje se vio reducido.
Henry Gambetta (10) / FBC Melgar 0 - Cienciano 4 / 11 TA - 2 TR
En Arequipa, el cotejo arbitrado por Henry Gambetta fue el que mayor cantidad de tarjetas vio en esta fecha. Trece fueron las veces en las que el réferi tuvo que amonestar a los jugadores, siendo el fiel reflejo de la actitud que se vio en el campo de juego por parte de jugadores y árbitro. Fuera de las amarillas aplicadas por faltas comúnes, las restantes se originaron por agresiones verbales y físicas de ambos bandos. En las expulsiones, la de Leonardo Rivero se produjo por su reiteración en los insultos que profirió a los futbolistas de Cienciano en primer lugar, y la segunda por agredir a Martín Hidalgo, quien seguiría el mismo destino minutos después. El lateral cusqueño se ganó la primera amarilla por planchar con ambos pies a un jugador del Melgar, y la que llevó a Gambetta a tener que expulsarlo, fue por patear por detrás a otro arequipeño. Nada que discutir en las dos rojas, pero al juez principal se le fue el partido de las manos dejando que le discutieran durante todo el encuentro.
Diego Haro (06) / CNI 1 - Universitario 1 / 7 TA - 3 TR
El muñeco porfiado de la fecha fue instalado en la ciudad de Iquitos, en la cual el calor acostumbrado de la selva parece que afectó el ánimo de todos, asi que mejor es ir por partes. La acción que acabó en el gol de Johan Fano fue producto de una ligera falta de Wilmer Carrillo sobre Pablo Vitti, en la cual el jugador selvático se apoyó sobre la espalda del argentino y lo trabó con la pierna izquierda. No importa si fue leve o fuerte, fue falta dentro del área y no hay motivo para discutir. En el penal cobrado a favor de CNI, la jugada vio a Carlos Galván barrerse dentro del área en busca de un balón que al mismo tiempo era perseguido por Jhoys Nogueira. El de Iquitos llegó primero y el capitán crema tarde, penal indiscutido. En suma, ambos penales fueron bien cobrados, pero en la primera mitad hubo otra acción que también pudo haber sido sancionada como pena máxima, cuando un balón rematado por Martín Morel fue interceptado con el brazo por José Zamora. El árbitro dejó seguir las acciones porque para él, el jugador no tuvo intención de tocarla, pero la jugada dejó serias dudas.
En el asunto de las tarjetas y el manejo que Diego Haro realizó de ellas es donde se le pueden achacar todos los problemas que tuvo el árbitro durante el partido. En las amarillas no hay mucho que discutir pues los jugadores se las ganaron justamente, pero es en las cartulinas rojas donde sí hay tema para analizar. En la que vio Renzo Revoredo, lo que se conoce es que el jugador crema utilizó una expresión de grueso calibre para comunicarse con sus defensas, el árbitro asumió que la frase iba dirigida hacia el y lo expulsó sin miramientos. Si bien puede calificarse como inexplicable la decisión (tal como lo hizo El Pelotero en su crónica del partido), habría que ponerse en la posición de Haro o de cualquier otro árbitro ante este tipo de situaciones: si se acepta la palabra del jugador cuando dice que se estaba dirigiendo a sus compañeros, en cualquier otro partido otros futbolistas podrían emplear la misma excusa para justificar verdaderas agresiones verbales hacia la autoridad del partido. Al final, el réferi debe decidir según lo que a él le parezca que sucedió en cada coyuntura y no por lo que los jugadores le digan que hicieron. La segunda expulsión del encuentro la recibió Johan Fano, tras dos amonestaciones mostradas al golpear a jugadores del equipo local. El problema con ambas amarillas surge en el hecho que el árbitro debió haberle sacado la segunda cartulina mucho antes, en acciones donde el delantero también golpeó con fuerza a los rivales. Quizás Haro intentó controlar las tarjetas para no exacerbar los ánimos que ya venían caldeados, pero el resultado terminó siendo lo opuesto. La última roja, vista por José Zamora de CNI, no merece mayor análisis porque agredió con un codazo a Cristián Álvarez tras haber ido ambos a disputar un balón.
Para finalizar, se dice que hay árbitros reglamentaristas y los que manejan partidos, pero lo visto en el Max Augustín no fue ni lo uno ni lo otro y Diego Haro terminó ofuscando a los dos equipos. Incluso, se llegó a complicar tanto el asunto que hasta terminó sacando de sus casillas al director técnico de Universitario tras la expulsión de Revoredo, lo que motivó que también lo echara del terreno de juego.
Foto: Fernando Herrera / DeChalaca.com
