Cuando hacerse el loco está bien

En los últimos días trascendió que Juan Manuel Vargas sufrió un desgarro muscular que lo tendrá alejado del trabajo físico por un plazo aproximado de tres semanas. Este hecho haría que Sergio Markarián haya tomado la decisión de no llevarlo con la selección a jugar la Copa América. Esta es la versión oficial de los hechos en torno de por qué el ‘Loco’ se perdería nuevamente la Copa, tal como sucedió hace cuatro años. Se puede recuperar antes del inicio de la competencia, pero el estratega habría decidido no arriesgarlo. Sin embargo, las malas lenguas que rara vez se equivocan dicen que la separación de Vargas se debería a otro motivo bastante más triste que el comentado.
Se dice que el jugador de la Fiorentina estaría colmando la capacidad de ceder del técnico, pues no viajó a Japón a disputar la Copa Kirin porque prefirió descansar -o cualquier otro verbo que aplique en el plano de lo políticamente correcto-. Esto claramente habría entorpecido el trabajo de la selección. Una vez que el equipo regresó de Asia, nuevamente como campeón del torneo, Markarián habría encontrado en el zurdo ciertas actitudes que distan del compromiso que se espera de un futbolista para con el proyecto que se está llevando a cabo.
¿Cuál es la verdad? Eso solo se conoce a ciencia cierta al interior del grupo y, en realidad, no tiene por qué trascender más allá de esas fronteras dado el conocido morbo de un sector de la prensa peruana por explotar noticias insulsas aun cuando ello pueda implicar obstáculos al trabajo de la selección. Sin embargo usted, lector, como yo podemos hacernos una idea de lo que está sucediendo dentro de la Videna considerando las innumerables historias de distintos jugadores peruanos a lo largo de la historia. La más reciente de ellas involucró al recién reconvocado Jefferson Farfán y a John Galliquio y Reimond Manco, quienes aún no han vuelto al equipo. Antes tuvieron que salir sin mucha elegancia jugadores que ahora están en el grupo como Claudio Pizarro y Santiago Acasiete. Ellos de manera oficial, otros, de una manera más discreta como Carlos Lobatón cuando el ciclo Del Solar.
Se hace camino al andar. Hay que estar loco para cometer los mismos errores del pasado. No hay necesidad de ser mago para descubrir que en un medio tan inquieto, donde el periodismo turista está al acecho de una noticia embotellada (mejor si tiene compuesto femenino) para vender dominicales en televisión o papel periódico de cincuenta céntimos, el arte de la diplomacia resulta el más apropiado. La “guerra” futbolera debería tener solo enemigos extranjeros, pero se sabe que el peor enemigo que puede tener un peruano es otro peruano. Los trapos sucios se lavan en casa; más aún si es un trapo de moda alocada que más adelante, cuando se busque el objetivo grande, será necesario vestir. Y no se trata de apañar; se trata de ser inteligentes y no dispararnos a los propios pies. Mejor queda, entonces, hacerse el loco.
Foto: terra.com.pe

Y diciendolo a tono de el articulo, HABRIA QUE ESTAR LOCO PARA NO LLEVAR AL LOCO A LA COPA, Es nuestro mejor jugador, y aunquesea que lo lleven y jugue contra Chile y si clasificamos lo demas partidos, y que se termine de recuperar alla, pero de que tiene que ir, tiene que ir, es nuestro maximo referente y el que impone mas respeto en la cancha, lo necesitamos.
De otro lado, yo vivo en Europa hace mucho tiempo y los comentarios que giran alrededor de los contratos de Vargas son en un 70% una gran mentira mediatica en el Peru, Vargas es considerado un buen jugador, pero ninguno se aloca por tenerlo.
No me sorprenderia que haya alguna cosa de cierta en cuanto a actitudes negativas por parte de Vargas, no seria el primero ni el ultimo...es el cancer del futbol peruano de los ultimos años. Porque un jugador peruano no puede comportarse de profesional cuando va a jugar por la seleccion????